desgraciado

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Alma desgraciada como peregrino, 
caminando en la noche, buscando un destino. 
Pobre alma sin hogar, en la soledad, 
un eco en el viento, gritando su verdad. 

Puedes ser tú la salvación, 
la chispa que encienda mi corazón. 
Puedes ser tú la redención, 
la llama que ahogue mi desilusión. 

Este pobre desgraciado, cargando su pena, 
te ofrece su amor, su vida, su arena. 
Hoy perdido en el olvido, sin rumbo ni abrigo, 
te busca en la tormenta, te llama, te persigo. 

Con cada latido, un fuego encendido, 
te quiere conquistar, dejar atrás el frío. 
Dejar de ser sombra, renacer en tu luz, 
en tus brazos encontrar la paz que me seduce. 

"Ecos en Papiro: Poesía para tu Alma"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora