Los cazadores de sirenas

Capitulo 21

🫧Un nuevo rumbo🫧

Matt

Todo sucedió muy rápido.

Fue lo único que pensé,al caer hacia el agua.

Sentía que me moría,que mi pecho se hundía.

Mi brazo ardía,que no pude evitar soltar un grito de dolor por el impacto.

Al verla a Nerida,intenté acercarme a ella,pero al tener las manos atadas no me dejaba siquiera nadar correctamente.

Sentí sus brazos contra los míos,y solo apoyé su cabeza en su hombro.

Al menos si iba a pasar a la otra vida,estaría mis últimos momentos con ella.

Solo cerré mis ojos,viendo cada vez,más oscuridad.

Oía una voz lejana llamándome.

"Matt...no avances "

"Matt...no sigas"

Me pedían,me ordenaban.

No quería seguir,solo esconderme y finalmente,descansar en aquella oscuridad se expandía.

Pero...

De la nada,comienzo a escuchar a alguien cantar.

Su voz era fina y dulce,cantaba precioso.

De vez de hacer caso a las voces,alce la vista y vi una pequeña luz a unos pasos míos.

Seguí arrastrándome de la oscuridad,hasta llegar a tocar un céntimo de la luz amarillenta que se movía.

Y al hacerlo...

Me levanté sobresaltado.

Nerida estaba a mi lado,tocando mi corazón y cantando a susurros.

Al ver mi brazo,era como si aquella bala,nunca hubiese existido.

Solo quedó una cáscara,la sangre como los moretones habían desaparecido de mi cuerpo.

Al agarrar la mano de Ella, no pude evitar sonreírle.

—-Cantas...precioso.—-Fue lo único que pude decirle,al hacerlo,mi garganta se encontraba rasposa y me costaba poder hablar.

Ella apoyó su cabeza contra la mía,y sus mano izquierda aún seguían en mi corazón,que latía muy rápido.

—-Por el dios del mar...pensé que te perdía.—-Susurró,acariciando suavemente mi mejilla.

Al escucharla,no pude evitar sentir de repente,como un escalofrío recorrer por mi cien hasta mi garganta.

—-Nollores,nollores,nollores...

Pero lo único que hice,fue lo contrario.

Comencé a llorar en silencio.

Nunca lloré frente a nadie,ni tampoco es que haya llorado alguna vez.

Siempre que alguno de mis hermanos o yo mostráramos algo de debilidad,lo único que nos ocurría que algo peor nos sucediera,que nuestro tío se enfade y solo empeorábamos las cosas.

Es algo que mi hermano Kai siempre me enseñó,a no ser débil.

Pero,al ver su mirada de decepción,no pude sentirme tan avergonzado de mí mismo.

Siempre me dejaron en claro eso:que yo por ser diferente,iba a ser tratado toda mi vida con diferencias.

—-Ya no los conozco...—-Finalmente hablé,sintiendo un dolor tan profundo como si me atravesaran con una daga.

—-A quienes?—-Pregunto Nerida,acercándose más,sintiendo su respiración cerca mío.

—-A mis hermanos,ya no se quienes son realmente...—-Añadí,intentando alejarme.

Pero ella de vez de alejarse y dejarme solo,me tomó del mentón y me besó.

Sus besos eran suaves,como si me tomara un té de hierbas.

A eso saben,solo que de vez dulces,salados.

Fue como la primera vez,pero esta vez,ninguno de los dos se apartó.

Ni desapareció.

Al separarnos,sus ojos amarillos como la luna permanecieron intactos al mirarme,por lo cual,sentí como si me mirara un lobo por la noche.

—-Si ellos te traicionaron,no tiene el derecho de ser llamados hermanos ni familia. —-Me respondió, con una sonrisa sincera.

Solo suspiré,aliviado,intentando limpiarme las lágrimas.

Pero ella me detiene,y me las limpia ella.

—-No estás solo...—-Al decirme esto,agarra mi mano y la coloca en su pecho,por la cual,sentí su corazón latir con fuerza—Estás conmigo.

No pude  evitar sonreír,y al entrelazar nuestras manos,nos reímos al darnos cuenta que sus manos eran el doble de grandes que las mías por sus garras negras como la de un oso.

Pero al ver atrás de ella,vi a lo lejos,dos de los barcos hundirse junto una gran llama expandirse por la madera mojada.

Ella al ver mi cara,se giró,y los dos por un largo tiempo,nos quedamos mirando el barco poco a poco hundiéndose.

No se realmente qué decir,qué pensar o qué hacer.

En parte,deseo que ellos estén bien.

Pero por otra parte...espero que ellos se den cuenta de todos estos años de lo que hicieron,al ver como uno a uno va cayendo.

Que aprendan,a no ser tan falsos con su gente.

Que sepan y sientan lo mismo a los que les hicieron lo mismo.

Que se arrepienta especialmente el que inició todo,Roger,de haber nacido.