3.- Sorpresa.

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El calor de la mañana me hizo despertar de mi cómodo sueño, abrí lentamente los ojos y jadeé al darme cuenta que estaba toda sudada.

Que buen inicio de día me dije irónicamente.

Estiré mi mano hacia mi celular para checar la hora, eran apenas las 6:30. Me sentía algo molesta, me había despertado antes de lo debido, normalmente me levantaba a las 7 o 7:30 para llegar a las 9 puntualmente a la primera clase.

Sabiendo que ya no podría dormirme, caminé bostezando hacia el baño que compartíamos Jisoo y yo para poder bañarme. Conociéndola ella estaría muy dormida, su sueño era pesado y yo la molestaba diciendo que ella no dormía, que ella se desmayaba.

Me duché con tranquilidad y al terminar lavé mis dientes como cada mañana. Regresé a mi habitación pensando que ponerme, se veía que iba a ser un día caluroso de nuevo por lo que optaría por otro vestido. Elegí uno de los más frescos, este era de varias capas con un lindo patrón cuadriculado en color morado claro. Era muy lindo.

Humecté y cepillé mi cabello, lo dejaría secar mientras hacía el desayuno. Con el calor que hacía de seguro se secaría antes de irme para poder peinarlo, tardé un poco más maquillándome, hoy quería verme especialmente bonita para la Profesora Manobal.

Ocho días exactos habían pasado desde ese momento en la oficina de la linda maestra, los demás días habían transcurrido con miradas discretas y cómplices entre nosotras. A veces dejaba notas en mi cuaderno cuando revisaba mis tareas y yo hacía lo mismo en su escritorio antes de cada clase suya. Incluso el otro día había dejado un paquete de gomitas y un llavero en forma de pez después de que le conté en notas que tenía uno naranja y pequeño en la casa de mis padres.

Cocinaba unos omelette para Jisoo y para mi cuando la vi salir adormilada. Me sonrió y entro al baño para poder asearse, veinte minutos después estaba terminando mi desayuno viendo mis redes sociales cuando me percaté de que mi mejor amiga salía arreglada y lista para irnos.

Se veía linda como todos los días.

—Hoy te despertaste temprano Chaeyoungie— habló después de dar el primer bocado— Gracias por el desayuno.

—De nada Unnie, sabes que siempre cocinaré para ti— dije feliz— Iré a peinarme para que nos vayamos en cuanto termines.

Ella asintió y yo me levanté para dejar mi plato en el fregadero. Lavé de nuevo mis dientes y fui a mi tocador, retocando mi labial mientras pensaba cómo acomodar mi cabello; decidí que lo dejaría suelto pero para que no me molestara en clases, sujeté los mechones de adelante con unos lindos lazos que me había regalado Jisoo hace un tiempo, combinaban perfecto con mi vestido de hoy.

Tomé mi mochila y salí caminando hacia nuestro pequeño armario donde guardábamos nuestro calzado, agarré mis sandalias blancas con un pequeño tacón completando mi atuendo. Mi mejor amiga salió con sus cosas e hizo lo mismo, tomando sus zapatos deportivos para después salir de nuestro apartamento.

Eran las 8:45 cuando llegamos al instituto. El cielo estaba despejado y el sol brillaba con intensidad. Nos dirigimos a nuestro salón platicando de un nuevo videojuego que Jisoo moría por comprar.

Las clases iniciaron, siendo la primera clase Ciencia y luego dos horas de Matemáticas. Hoy se me estaba pasando el tiempo demasiado rápido y la razón de esto era porque ya quería que fuera el turno de mi linda Profesora. Como era de costumbre, tuvimos un receso para poder comer algo o avanzar en tareas pendientes. Jisoo me llevó por una bebida fría al comedor para quitarnos el calor y aunque tuviéramos aire acondicionado en las instalaciones, persistía la sensación térmica.

Regresamos al aula y mi felicidad parecía desbordar, por fin la volvería a ver. El timbre sonó dando finalizado el descanso y en pocos minutos llegaría la mujer de mis sueños.

Guilty Consience (Chaelisa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora