Historia basada en los Yautjas, en donde una Omma cambiara el orden de una sociedad tan antigua como las estrellas.
Bakúba era el nuevo líder del clan 578 TH y necesitaba nuevos cachorros que aseguraran su descendencia.
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Ya habían pasado dos días y mientras los Yutjas salieron de caza excepto Kun'ba. Adrix por fin despertó pidiendo ver a su hijo, nadie se lo pudo negar y ella no hablo con nadie mas hasta que el medico dio indicaciones.
KUN'BA
- Aun esta débil solo alimentará al cachorro una vez al día hasta reponerse y no podrá aparearse durante dos lunas.
Adrix supuso que fue por compasión la ultima indicación. Mas tarde llego Baku'ba con sus hijos mayores y ordenando la cena, fue informado de la condición de su Omma, espero que todos se fueran a sus respectivos aposentos para ir con la pequeña Adrix quien dormía abrazando a su cachorro.
A la mañana siguiente despertó muy angustiada de no sentir a su hijo entre sus brazos y al voltear la imagen de Baku'ba cargando a cachorro la sorprendió.
BAKU'BA
- Aun estas débil no deberías amamantar.
Adrix no quería arriesgarse y hacerlo enojar de nuevo, acepto y mandaron a traer su fórmula, no los separo en esta ocasión. Baku'ba ordeno un baño para su Omma y quela regresaran a su alcoba, no sin antes escuchar a Gran Omma quien le recordó que no podría aparearse en al menos dos lunas.
Ya en la habitación Adrix acurrucaba a su hijo para poder dormirlo.
BAKU'BA
- Háblame mujer, no me desesperes.
ADRIX
- Le agradezco dejar a mi hijo a mi cuidado.
BAKU'BA
- No te trate mal en ningún aspecto y aun así me desafíate, lo que paso es resultado de tu altanería.
ADRIX
- El bebe ya duerme ¿Podríamos hacer lo mismo?
Baku'ba se recostó rodeando a su Omma por detrás percatándose de como temblaba, pues ahora le tenía miedo, trato de ronronear, pero no logro calmarla, decidió soltarla para darle su propio espacio. Le platico acerca de su exitosa casa y prometió enseñarle a utilizar algunas armas, Adrix lo escuchaba sin prestarle la mínima atención a sus palabras.