Cafúne (Milo J)

~11~

Ya habían pasado dos semanas del pico que le di a Mara, posta no me lo podía olvidar, bah, a ella no me la podía sacar de la cabeza, necesitaba verla otra vez, quería darle un pico otra vez, bueno, más que un pico un beso, además, no solo quería verla por eso, quería verla porque con ella el tiempo pasa muy rápido, es muy cómodo convivir al lado de Mara.

Capaz si la llamo para ir a su casa me contesta, o capaz no puede o no quiere que vaya a su casa.

-Holaa, quién es?-.

Hasta por teléfono me saca una sonrisa de boludo.

-El amor de tu vida, deaa, yo Marita, quién más?-.

-Camii, cómo estás lindo??-.

-Mejor ahora que te escucho-.

Alta vergüenza estoy pasando ajsjjs.

-Ayyy, Romeo Santos, para cuando venís a cantarme serenata?-.

-Fuaa cuando vos quieras linda-.

-Ahora podes?-.

-Sí se trata de vos puedo siempre, pasa dire y voy-.

-Ahí te la mando, besis-.

Listooo, me agarro una riñonera y me voy con Marita.

Narra Mara

Listo loco, hoy la pongo, deaaa, que decía.

Milo iba a venir a mí casa así que tenía que ordenar mí cuarto, lo ordené lo más que pude e intenté estar un poco decente.

Sonó el timbre y yo estaba re nerviosa, este chabon me tiene mal.

-Buen día quería, te traje unos sanguchitos de miga- dijo con una sonrisa cuando abrí la puerta.

-Nooo, sos un amor, pasa pasa-.

-Fuaa alta pieza tenés- dijo cuando entro a mí cuarto.

Él se fue directo a sentar en mí cama y yo dejé los sanguchitos en mí escritorio.

-Vistee, es re linda-.

-No más linda que vos- susurró.

-Ayy, y si en vez de chamuyarme no me declaras tu amor de una vez?-.

-Y si con el pico que te dí la otra vez te pusiste toda roja, si te declaro mí amor te morís acá- contestó con una sonrisa.

Que deje de sonreírme así porque me va a dar un paro.

-Qué lástima que solo fue un pico, encima nos interrumpieron- dije.

-Si tanto querés en vez de un pico te doy un beso en serio, además no tenemos a nadie que nos interrumpa ahora-.

Me acaban de dar tres paros conchales, deaa, re atrevida.

-Y no se- le dije mientras me acercaba a él - con la suerte que tenemos seguro tocan el timbre-.

-Probemos- susurró.

Me agarró de la cintura y me acerco aún más a él, yo puse mis manos en su nuca y me acerqué de a poco a sus labios.

No podía confírmalo pero estaba segura de que estaba más roja que Marte.

Llegó el momento tan esperado por ambos, nos estábamos besando por fin.

El beso era lento pero dulce, se podía notar como ambos estábamos nerviosos.

Por instinto, supongo, me senté arriba de sus piernas, estaba súper nerviosa.

Yo no quería que se acabara ese beso nunca, pero lamentablemente existe algo llamado oxígeno, nos terminamos separando por falta de aire.

Al terminar el beso él sonrió, yo me puse más roja todavía.
Seguíamos en la misma posición, yo sentada en sus piernas con mis manos en su nuca, y él sentado en mí cama con sus manos en mí cintura.

-Tanta mala suerte no tenemos, está vez nadie nos interrumpió- dijo.

-Jajjs, tenés razón- le respondí y me levanté.

-Algo me dice que estás un poco nerviosa todavía, jajsjs estás toda rojita-.

-Yo?? Para nada corazón, él nervioso serás vos acá, que no paras de sonreír-.

-No es una sonrisa de nervios, es sonrisa de enamorado-.

Dios, estaba en la gloria.

-Vas a hacer que me desmaye acá si me decís cosas tan lindas nene-.

Él solo rió y yo me fui a la puerta para ir a la cocina.

-Queres mate?-.

-Esa pregunta me ofende, Marita-.

-Bueno perdón ajsjaj, la única yerba que tengo es playadito, te gusta?-.

-Naa listo, vos querés que te pida matrimonio?- me contestó y arrodilló enfrente mío.

-Yyy, si tanto insistis obvio- sonreí.

Él se sacó un anillo de la mano y me lo dio.

Este pibe va a hacer que me muera de amor.

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Buenas reinas, cómo va la muchachada?

Tuvieron muchos meses de espera, pido perdón, se había armado bardo en mí cole, pero como recompensa les traje dos capítulos en un día, uno te corto y otro un poco más largo.

Son una verga los caps? Sí, pero lo que cuenta es la intención.

Bueno amores, besitos en la cola 💋 las amoo