‧₊˚profesor particular ༄ ‧₊˚enzo x matías

visita

‧₊˚🔞

la madre de matías había convencido a enzo. bingo. ¿cómo se enteró matías? pues por los mensajes de texto que parecía no parar de intercambiar con el mayor.

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"matías, te pido una disculpa, pero tendremos que reorganizar los horarios de clase".

"y eso por qué??:(("

"estoy dando clases de verano en la universidad junto a otro profesor. tu madre me animó, agradécele de mi parte."

"qué días tiene libres?..."

"lunes y jueves, lamentablemente."

"ya veo. ¿qué horas dicta?"

"¿para qué deseas saber eso?"

"curiosidad."

"martes, miércoles y viernes. tres horas desde las 4 de la tarde"

"no puede venir por las mañanas?"

"tengo otros clientes, matías."

"ah, tiene otros clientes."

"no hables así."

"estaré en la universidad mañana,
quizá lo vea"

"espero que no, nene."

"mejor borre ese mensaje antes
de que algun superior lo vea, profe"

"este mensaje ha sido eliminado. nos vemos el jueves, matías."

"lo espero, profe:)"

‧₊˚

aquella tarde del martes matías estaba combatiendo la emoción y la vergüenza. estaba acostumbrado a lidiar con hombres, quizá no tan mayores como enzo, pero eran hombres.

notó que al profesor le gustaban sus juegos, sus miradas y provocaciones; tanto que quería quebrarlas. matías no iba a dejarse ganar, no iba a dejarse controlar por enzo hasta obtener lo que tanto deseaba. desde que lo conoció, no podía parar de pensar en él. tuvo que procesar todo lo ocurrido el día anterior, ese bendito lunes en el que probó una parte de lo que era enzo realmente.

no era suficiente, quería más. se sentía borracho con tal solo recordar la sensación del miembro grande enzo en su boca. quería tenerlo dentro, sentirlo y ahogarse en el placer provocado por la fuerza de ese hombre. recordaba su olor y sus labios dominantes sobre los suyos, haciéndolo sentir tan pequeño y débil. acostumbraba a tener el control, pero esta vez quería estar a merced de él, permitirle de todo. amaba el sonido de los gemidos de enzo, respiraciones profundas trazadas con una voz gruesa y dominante. llegaba a sentirse avergonzado por desearlo tanto, por dejarse derrotar. ¿qué hubiese pasado si su madre no los interrumpía? el solo pensamiento lo hace estremecerse.

matías siempre se consideró una persona perseverante, así que cuando llegó el miércoles, estaba más que listo rumbo a la universidad llegadas las 7 de la noche. 

quizá estaba haciendo demasiado, pero era joven, y se supone que la gente joven debe tener experiencias interesantes, ¿no? además, no podría perder, ya había conseguido atrapar a enzo en su red de faceta inocente. supuso que sería fácil.

las oficinas de los profesores estaban abiertas para asesorías, no sería complicado hacerse pasa por un estudiante del ciclo de verano.

– disculpe, ¿donde se encuentra la oficina del profesor vogrincic? soy su alumno –. indica el castaño a uno de los seguridad del edificio.