CAPÍTULO 8

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Capítulo 8

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ENSÉÑAME A AMAR

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★彡『 TAEKOOK 』彡★


Taehyung

El dolor de cabeza punzante me obligó a recostarme un momento, el simple hecho de pensar que debía dar una fiesta esta noche me había logrado estresar. No me gustaba ser el centro de atención, me consideré siempre alguien muy reservado. Yoongi me había sugerido hacer una celebración por la nueva mansión, me volvió loco dándome mil razones por las cuales debía hacerlo, terminé por aceptar para que me dejara en paz.


Compré la mansión luego de vivir un mes y medio en un hotel con Minya, quería un espacio para ella, un jardín amplio en el cual mi pequeña Kim pudiera divertirse, una cochera con suficiente espacio para los autos, habitaciones para el personal, en fin, me sentía más relajado al tener mi espacio.


Yoongi era uno de mis mejores amigos, lo ha sido desde que éramos adolescentes, vivía en Seúl y manejaba una agencia de autos deportivos, decidió aparecer para echarle un vistazo y darme su opinión, que nunca he pedido, sobre la casa. Al parecer le gusto tanto que imagino donde sería la fiesta, en qué jugar poner al dj, donde podría ir la barra y las luces, deje caer mis hombros cuando finalmente se fue.


Minya pasaría la noche con la hija de Yoongi, habían logrado llevarse bien a pesar de que la pequeña Min le llevara un año a mí princesa.


Sin más, tomé un baño de burbujas, eché mi cabeza hacía atrás y cerré los ojos, el dolor de cabeza continuaba. Deje que Yoongi invitará a quienes quisiera, sabía que serían personas de nuestra clase, empresarios, multimillonarios, no tenía por qué preocuparme, pero una persona en particular daba vueltas en mí cabeza. Me mordí la uña intentando controlar el impulso, solté un suspiro, sabiendo que me arrepentiría y tomé el celular y lo llamé.


–Jimin ¿Qué tal? –


–Hola, Yoongi ¿Qué tal todo? – respondió el rubio del otro lado.


–Mira, daré una fiesta esta noche. Idea de Yoongi– puse los ojos en blanco –Será en la mansión que te mostré hace unos días ¿Lo recuerdas? –


–Claro, ahí estaré...–


–Espera– me apresuré a decir, me mantuve en silencio unos pocos segundos, pero finalmente abrí la boca –Trae a Jungkook, está invitado al igual que tú–


–Bueno, que amable, estaremos ahí está noche. Gracias por la invitación Taehyung– corté la llamada.


–no tenía idea de lo que hacía, no entendía porque ese omega había estado en mi mente en este último mes y medio, desde que lo conocí, tal vez era la forma en que trataba a mi hija. O lo que Minya me contaba de él con una sonrisa en su pequeño rostro, pero quería verlo, aunque sea de lejos, aunque verlo con él me provoca un extraño dolor en el pecho.






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Busqué una camisa negra, un pantalón de pinza del mismo color y unos zapatos acharolados, peine mi cabello hacía atrás y busqué algún perfume fuerte, pero con buen olor. Miré por la ventana, los autos comenzaban a llegar. Yoongi parecía estar más emocionado que yo, de hecho, esto parecía una celebración para él y no para mí.


La música rebotaba por todas partes, baje para encontrarme con una alfombra carmesí en la entrada, la cual continuaba hasta una de las salas más amplias. Abrí las puertas y me encontré con grupo de personas allí, un mesero pasó por mi lado y atine a tomar una copa, la bebí de un sorbo, tal vez el alcohol calmaría la jaqueca.


La noche avanzó, la gente se había multiplicado, bebí lo suficiente como para reír por estupideces sin sentido. Yoongi había dejado entrar algunos fotógrafos, intenté escapar y cubrir mi rostro de ellos, no estaba en condiciones de que me vean de esta manera. Saludé a algunas personas a lo lejos con la mejor sonrisa forzada que tenía en ese momento, la música comenzaba a sonar más fuerte y las luces me mareaban en cada paso que daba.


Alcé la vista y lo encontré entre la multitud, a lo lejos, sus labios rosados se llevaron mi atención, sus ojos se clavaron en los míos y atinó a sonreír, su brazo estaba rodeando el de Jimin. Como si fuera algo automático, mi semblante fue serio de nuevo, la mirada de dolor de él fue una puñalada en mi pecho, aparté mi vista y me escabullí entre la multitud.


Corrí hacia una de las habitaciones de abajo, aflojé mi camisa para poder respirar mejor, llevé los mechones que tenía en mi frente hacía atrás, con el resto de cabello. Me odiaba, me parecía ridículo que algo así me doliera, él no era nadie, apenas sabía su nombre y a que se dedicaba ¿Qué demonios me pasaba? ¿Qué hacía que me provocaba sentir algo así? Negué con la cabeza dispersando todos los pensamientos, acomodé mi camisa dentro del pantalón y desabotoné los últimos tres botones.


Mi cabeza daba más vueltas de lo normal, apenas podía caminar bien, me dirigí a la fiesta, las luces blancas se habían apagado, la gente bailaba al ritmo de la canción. Yoongi saltaba como un demente entre la multitud emborrachada, tambaleé sobre uno de los meseros.


–Yoongi– una mucama se me acercó. Me sostuvo por la cintura, atiné a caer –¿Está bien señor? –


–Sí, So-hyun– me zafé –Solo quiero bailar– tropecé nuevamente.


–Déjeme a mí, yo me encargo– esa dulce voz me envolvió como un manto de seda.


Me dejé llevar, sentí unas manos en mi cintura, colocó mi brazo sobre sus hombros, entrecerré los ojos y caminé a la par. Imágenes borrosas, sentí caer mi cuerpo sobre el suave colchón, abrí los ojos y lo vi, su hermosa sonrisa, como la de un ángel, acaricio mi frente, todo fue negro otra vez.

꧁𒆜 🅻🅰🅴 🅹🅸🅽🅽🅸🅴 𒆜꧂

꧁𒆜 🅻🅰🅴 🅹🅸🅽🅽🅸🅴 𒆜꧂

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⏰ Última actualización: Apr 13 ⏰

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