AU Una Propuesta de Divorcio |VegasPete

Capítulo 13

Pete.

Con el pasar de los días y la boda cada vez más cerca, tenía menos tiempo de encargarme de mis asuntos. Tuve que ir a un sinfín de reuniones para los preparativos, que si las flores, que si el pastel, que si los anillos, que si esto que si lo otro. Terminaba exhausto con ganas de solo dormir por la noche.

Hasta ayer, cuando Vegas pasó por mí para llevarme a cenar. Fue bastante extraño, ni siquiera avisó, solo se presentó aquí con una sonrisa arrogante.

—¿Por qué estás tratando de ser amable conmigo? — le había preguntado mientras regresábamos a mi casa, la cena fue deliciosa y pudimos charlar con normalidad, pero aún seguía esa pregunta en mi cabeza.

¿Por qué Vegas estaba tratando de que nos lleváramos bien?

—Vamos a ser esposos. — había respondido unos segundos después. —Quiero que nos sintamos cómodos, que este sea un matrimonio por conveniencia no quiere decir que no podamos ser amigos.

Asentí mirando por la ventana. Podía darle eso, Siempre y cuando aún tuviéramos una sana distancia. Después de eso recorrimos las calles en absoluto silencio, él condujo con cuidado y cuando llegamos a mi casa incluso se ofreció a recogerme hoy temprano ya que mi auto se quedó en la oficina y, en efecto, eso hizo.

Cuando llegó por la mañana mamá estaba extasiada, era la primera vez que Vegas llegaba a casa y ella lo invitó a tomar el desayuno con tanta insistencia que él no se pudo negar.

Mi móvil sonó en mi escritorio, donde lo había dejado hace un par de minutos, lo tomé y reconocí el nombre de Big.

¿Algo andaba mal?

—Saengtham. —respondí.

—Jefe. — él dijo, sonaba estresado y hasta un poco cansado. Lo imaginé pasándose las manos por el cabello exasperado. —Tenemos un problema, la aduana está revisando uno de nuestros contenedores.

Contuve la respiración. Lo que malditamente me faltaba.

Alguien llamó a mi puerta, me debatí entre hacerle esperar o atenderlo, pero como seguramente era mi nuevo asistente, respondí.

—Adelante. —Casi me atraganto con mi propia saliva al ver al hombre frente a mí, me recompuse muy tarde, porque él torció la boca esperando que diera el primer paso. Llevaba un traje gris y una corbata negra, parecía serio, sus facciones habían madurado, no había más rastros de aquel adolescente, cómo era de esperarse por supuesto, teniendo en cuenta que me había negado a verlo por más de cinco años. —No me importa lo que tengas que hacer, Big. Asegúrate de que ese envío llegué a su destino. —le colgué antes de que lograra contestar.

Iba a ser un jodido problema si no se recibía en la fecha prevista.

—Señor Pete, un gusto volver a verlo. —saludó con un ligero asentimiento de cabeza.

—¿Tú no estabas en Corea?—pregunté, sentí mis manos temblar con ligereza, respiré bocanadas de aire tratando de tranquilizarme.

—Si, pero su padre me pidió que regresará para ser su asistente personal. — parecía una persona distinta, se veía diferente, como si no fuera el mismo Omega de hace tantos años.

—¿Mi asistente?

—Si. Por cierto, muchas felicidades por su boda, usted y el señor Vegas se ven muy enamorados, espero que sea el día más feliz de su vida. Iré a instalarme, si necesita algo no dude en hacérmelo saber, estoy aquí para hacer su vida más fácil.

Cómo si eso se pudiera.

¿Ya no lo amas?

Estuve a punto de preguntar, pero me mordí la lengua y en su lugar vi a Tawan salir de mi oficina.