★꙳⭑ . 마이 데몬 𝐌𝐘 𝐃𝐄𝐌𝐎𝐍.. ✩!!

09┃𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑

En un abrir y cerrar de ojos, HeeDo había sido teletransportado con KooWon al jardín trasero de la empresa nerviosa, la rubia
rápidamente empujó a KooWon fuera de su camino, haciéndolo alejarse dramáticamente, mientras se arrojaba para sentarse en el banco de madera detrás de él

― Esto es inútil, si solo funciona con MiYeon MiYeon ― HeeDo suspiró, tratando de olvidar la imagen de KooWon con su cuerpo presionado contra el suyo, mientras se cruzaba de brazos y se giraba hacia el hombre

― Como sospechaba, el problema no soy yo, sino el culpable... ― KooWon suspiró, también cruzándose de brazos ― Pero vi su rostro claramente, así que por qué...

— ¿Necesitas conocer la cara? — Preguntó la rubia confundida

- Sí

— ¿Se sometió a una cirugía plástica? — cuestionó retóricamente HeeDo, buscando una solución para no haber encontrado al hombre

― De todos modos, el problema no es mi poder... ― Concluyó KooWon, levantándose del banco y luego caminando hacia la chica rubia frente a él

― Entonces déjame sostener tu puño ― El hombre se inclinó hacia HeeDo, quien rápidamente retrocede, distanciándose

― Dije eso solo después de atrapar al culpable ― La mujer negó, retrocediendo al ver que KooWon intentó agarrar su muñeca nuevamente

― La gente ya sospecha de nuestra relación, olvídenlo

HeeDo negó con vehemencia, evitando a KooWon, quien estaba parado frente a ella mirándola indignado y luego, caminó nuevamente hacia la entrada de la empresa, dejando al hombre solo atrás

Al regresar a su oficina, HeeDo permaneció en su elemento hasta la tarde, simplemente revisando las cámaras de seguridad en la oficina de CheonSook, y sin KooWon para ayudarla, la tarea se volvió aún más difícil pero, al llegar a una de las grabaciones, el día treinta y uno, a las veinte, la bolsa de
CheonSook, que estaba en una pequeña mesa de madera al lado del sofá, simplemente cambió de posición y en un intento por ver mejor, la joven hizo zoom en la pantalla y cuando se dio cuenta de que tenía razón, cambió su mirada hacia el pequeño reloj que estaba en la esquina de la cámara, señalando la hora, y entonces, notó que la grabación saltaba de las veinte a las veintitrés

- ¡Tonterías! — Se quejó la mujer, sabiendo que quienquiera que alterara las cámaras, las imágenes podrían haberse perdido para siempre, sobre todo si sus sospechas eran ciertas y se trataba de alguien de su familia

- ¿Todavía está ahí? — La voz de KooWon entró en la habitación, asustando a HeeDo

― Ya terminé ― Respondió de repente la mujer, apresurándose a abandonar el rodaje. Y luego, viendo sonar su teléfono sobre la mesa, HeeDo leyó rápidamente el nombre de la llamada, identificándolo como SeokHun, y respondió rápidamente - Hola, SeokHun. — Acabo de tomar la computadora portátil del Sr. Cha y eché un vistazo, pero está todo muy limpio, alguien debe haber llegado antes ― informó el hombre luciendo preocupado al otro lado de la línea — Acabo de terminar de revisar las cámaras de su habitación y digo lo mismo alguien debió haber intentado excluir toda la evidencia… ― La mujer dictó lentamente, tratando de alejarse lo menos posible de KooWon, quien intentaba inclinarse sobre su hombro para escuchar la conversación

— Sí... HeeDo... ¿Quieres ir a cenar conmigo? Ahora voy a tu oficina— Preguntó el hombre lentamente, pareciendo avergonzado por la invitación que le brindó

— Oh, ni siquiera había visto la hora por supuesto, tengo que comer algo...

De repente, HeeDo dejó de hablar al sentir que su silla se giraba, quedando cara a cara con KooWon, quien la miraba con una mirada mortal

— No lo harás — Dictó el hombre, con su voz franca y pareciendo irritado y molesto por algo — Ya tienes cita

- ¿Ya lo tengo? — Preguntó la rubia confundida, frunciendo el ceño.