Los villanos llegaron a la orilla y pegaron un salto a la arena. Corrieron de vuelta a la torre más alta. No podían creer que habían estado tan cerca del pergamino sin darse cuenta. La magia se estaba agotando, las pruebas que habían tenido que atravesar para llegar a la estrella seguían activas, pero su fuerza menguaba y se desvanecía, ahora era muchísimo más fácil llegar a la recámara de la estrella. Mal había cortado la cuerda de la tirolesa, pero ahora el puente flotante de las tablas de la verdad era un puente normal de tablas que se sacudían con el viento. Las estúpidas escaleras debían ser la peor parte, pero antes de escalar hasta la cima, Mal volvió a leer el texto. Un pasadizo secreto. En la retorcida mente de su madre, la entrada estaría en el peor lugar posible para fastidiar a cualquier tonto que intentara robar sus secretos.
—¡Alto chicos! —detuvo a sus amigos antes de que dieran otro paso por esas infernales escaleras —. La entrada debe estar acá abajo.
—¿Qué dices?
—¿Te imaginas subir miles de escalones y descubrir que la entrada estaba al principio? Es algo que mi madre haría sólo por burlarse de los demás. Hay que buscar la entrada aquí ¡Vean si los tabiques abren alguna compuerta! —sus amigos escucharon y presionaron todos los bloques de adoquín oscuro que pudieran activar la entrada al pasadizo, hasta que finalmente, Lonnie encontró el correcto y una pared de bloques se sacudió, revelando unas escaleras que llevaban al interior de la tierra.
—¿Y si es otra broma de tu madre?
—Ni siquiera a mi madre le gusta subir mil escalones —afirmó Mal y bajaron. por fortuna solo eran algunos treinta escalones abajo para llegar a la sala de la estrella donde Maléfica había escondido el pergamino. Mal bostezó, llevaba prácticamente un día entero sin dormir y con el esfuerzo físico apenas le quedaba energía —. Bien, Evie ¿hay alguna pista...? —cuando abrió de nuevo los ojos. La sala era completamente oscura, como tinieblas y estaba totalmente sola. Era diferente al cuarto oscuro de antes, esta vez podía ver su cuerpo sin dificultad y la luz de su celular funcionaba bien, pero estaba en el vacío de la oscuridad —Bien, esta debe ser la última prueba... Porque en serio no tengo fuerza para otra noche.
Mal caminó unos pasos y parecía no avanzar en lo absoluto, entonces escuchó una risa detrás suya. Se giró y se puso en posición para pelear, aunque ya se sentía fatigada de solo pensarlo. Maddy estaba frente a ella.
—Oh Malsy, tu siempre creyendote la heroína, pero cuando tus amigos te necesitan ¿donde estás?
—¿Qué les hiciste? —Maddy apareció detrás de ella. Mal intentó golpearla, pero la atravesó como humo y entonces, Uma la empujó.
—Mejor aún ¿cómo conquistaste tus demonios? ¿Ser princesa te hizo olvidar todo lo que hiciste? —se burló. Mal lo intentó de nuevo, pero solo eran ilusiones.
—Sé que lo hice fue horrible.
—Mi cabello —dijeron Uma y Maddy al mismo tiempo. Uma dio un paso al frente —. Mi confianza —Maddy se alineó de nuevo con Uma para hablar al unísono —Éramos amigas, Mal, casi hermanas —se unió una tercera voz que correspondía a Evie.
—¡No! —intentó retroceder, pero dos figuras más aparecieron y le bloquearon el paso.
—¿En serio crees que alguno de nosotros es tu amigo? —dijo Jay, o mejor dicho, la ilusión de Jay.
—¿Crees que daría mi vida por ti después de todos los años de abusos y llamarme cachorro? —Carlos la pateó. Jay la levantó del cuello y la lanzó.
—¿Que te sería leal cuando hubieras entregado a los duendes si hubieras tenido oportunidad?
—¿Que sería amable contigo luego de que me metieras en un armario con trampas de osos?
—¡Era la Isla de los Perdidos, ustedes hubieran hecho lo mismo conmigo si estuvieran en mi posición!
—¿Crees que te merecías ser mi hija? —Maléfica apareció —. Toda tu existencia tenía un propósito y fallaste en él ¿por qué? ¿por un tonto chico?
Ben se manifestó. Jugando con su anillo de bestia.
—Todo este tiempo que hemos pasado juntos... Y jamás pudiste confesarme la verdad. Eres una mentirosa.
—¡Maldita!
—¡Traicionera!
—¡Inutil!
Mal contuvo las ganas de llorar, había sido una persona horrible y en verdad se estaba esforzando por ser mejor, pero sabía que jamás podría cambiar nada de lo que hizo en el pasado. Apretó la mandíbula y finalmente exigió que se detuvieran.
—¡Basta! —caminó con la espalda recta —. ¡Fui un monstruo! Hice cosas horribles para ganar el aprecio de mi madre, pero al final nada valió la pena. Estoy a punto de perder a la persona que amo, mis amigos, mi futuro ¡pero trato de corregirme todos los días, lucharé todos los días para no volver a ser quien fui! Me esforzaré para merecer la amistad de las personas que herí.
—¡Eso no es suficiente! —dijeron todas las voces con un eco aturdidor. Mal estaba agotada, las ilusiones la arrinconaban y se sentía claustrofobica ¿cómo te libras de los errores para que no afecten tu futuro? Uma seguía gritando cómo Mal la dejó de lado cuando eran el dúo imparable de la isla, las mejores amigas que habrían conquistado el mundo. Maddy le recordaba la época donde Mal exploró su lado más perverso, donde decapitaba muñecas y sus bromas se volvían diabólicas, cómo su control y manipulación forjaron un rencor profundo en ella, donde cuando eran niñas la gente las confundía por gemelas, pero Mal seguía resaltando y opacandola. Evie se lamentaba de no haberla invitado a su fiesta de cumpleaños cuando eran niñas, pero reclamando que Mal no tenía derecho de destruir su vida por un estupido berrinche de la niñez. Jay le dijo que solo la seguía por conveniencia, que todos los años de compañerismo solo era para beneficiarse de ella y admitió que se habría desecho de ella en cuanto pudiera porque realmente no valía nada para nadie. Carlos dijo que si no fuera la hija de Maléfica nadie la hubiera respetado ni temido, que todo su nombre y reputación giraba sobre su madre y ella solo era la decepcionante sombra que ensuciaba el legado de "La emperatriz del Mal" igual que él, no sería reconocida si no fuera por su madre. Mal era la peor de la Isla de los Perdidos en todos los sentidos. La peor amiga, la peor novia, la peor líder, la peor villana, la peor reina, la peor ladrona, ella no era buena en nada y no lo sería nunca.
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Carrera en la Isla de los Perdidos
FanfictionUna estrella mágica capaz de cumplir cualquier deseo cae en la Isla de los Perdidos, activando brevemente la capacidad de la magia en la Isla, ahora para evitar una catástrofe, Mal, Jay, Evie y Carlos deben navegar hasta la Isla de los Malditos y ro...