No Fue el hecho de que Miel amara a otra persona lo que más le dolía a Derek. Lo que más le dolía en su interior, era que esa otra persona fue el hombre al que consideraba su mejor amigo.
Derek le tenía tanto aprecio a Scott, era su hermano, estaba seguro de que podía confiarle su vida y ambos estaban dispuestos a dar la vida por él otro.
Pero, sí, esto estaba doliéndole como nunca.—Esa Miel siempre será tuya, Derek —volvió a confirmar la pelirroja.
Por supuesto que la Miel adolescente, la del pasado.
La que habría dado la vida por él, sería completamente suya. Derek lo sabía. Sabía perfectamente que la Miel que él conocía ya no existía más que en sus recuerdos y tal vez, en sus ojos.
—¿Entiendes lo que estoy diciéndote, Derek?
—Sí.
—Dime algo más, Derek.
Él desvió la mirada.
—Lo siento Miel. Lamento no haberte amado como lo merecías en ese momento. . .
Miel se echó hacia atrás. No había oído ese tono de voz en Derek jamás, solamente, cuando sus padres habían muerto.
—Lamento que tuvieras que irte y no decirme acerca de Benjamín. . .
—No fue tu culpa, ni la mía. Tú estabas devastado por el asesinato de tu familia y yo no encontré el momento adecuado.
En algún punto de ambos, esta conversación era algo que deseaban hace tiempo. Un tipo de cierre que sus corazones jamás habían tenido.
—Te quiero Derek. Porque siempre serás una parte de mi vida y mi pasado. Eres el padre de mi hijo, tenemos un hermoso niño que siempre nos unirá.
Derek se volvió hacia ella, con la mirada más apaciguada que antes, suave y dulce.
Miel casi sintió que volvía a hablar con el Derek del cual ella se había enamorado cuando era adolescente.
—No podrías haber elegido mejor persona Miel. . .
Al dejar salir su nombre con suavidad, acarició la mejilla de la pelirroja casi como un beso de despedida.
Bajó la mirada al ver como ella sonreía y finalmente se alejó, reincorporándose del sofá.
—Tengo que irme.
—¿Estamos bien?
—Debemos estarlo, Miel, ¿No? Solo necesito tiempo.
Ella asintió y bajó la mirada. Derek caminó lejos, con cierto dolor en su pecho.
El mismo dolor que no cesó siquiera cuando cerró la puerta de su casa, esperando poder hundirse en su cama hasta dormir.
Cerró los ojos y suspiró al ver a Peter, el rubio mayor sosteniendo una revista en el sofá de su loft.
—Desde que has bajado del auto se siente ese aroma abrumador.
Derek sabía bien que significaba ese aroma. El aroma del sufrimiento.
No respondió.
Se mantuvo en silencio mientras consideraba soltar un golpe hacia el rostro de su tío.
Peter no sabía si seguir hablando o no, pero su naturaleza burlesca y sinceras, hizo que no pudiera cerrar su boca.
—Ella eligió, ¿verdad? —cuestionó.
—¿Qué quieres, Peter? —preguntó ya en tono desafiante.
—Solo espero que la tratases bien.
—¿Por qué debería importarte?
—Porque Miel es como mi hermana.
Como un rayo, algo cayó sobre la mente de Derek, algo que unió todo lo que faltaba. Se precipitó hacía Peter, tomándolo por el cuello de su camiseta, gritando en su rostro.
—Tú sabías que ella estaba embarazada cuando se fue, siempre supiste cobre mi hijo, ¡Y JAMÁS ME LO DIJISTE!
Con un movimiento fuerte, Peter se soltó de las manos de su sobrino.
—Ella me lo pidió, Derek.
—Y se supone que tú eres mi familia.
—¿A quién le debía más? A la chica que me cuidó cuando tenía el cuerpo quemado? ¿A la única que fue a verme? ¿Por la que sigo vivo? ¿O a ti?
Derek se mantuvo en silencio, con el pecho agitado, la mirada oscura y las garras en sus manos afiladas.
—Pero era mi hijo al que estabas ocultándome.
—Era a él, a quien estaba protegiendo, a ambos. Miel me lo pidió, ella necesitaba sentirse segura, así que se lo prometí. . .—se cortó a sí mismo y extendió sus brazos— ¿Acaso buscas a quien culpar por perderlos? Cúlpame a mí, Derek. Sé lo que piensas. Que tal vez si yo te hubiese contado que tenías un hijo con ella, hubieses tenido más tiempo para recuperarla.
—Ella quiere a Scott.
Se formó un silencio y por primera vez, en años, Peter sintió un dolor al ver a su sobrino con la mirada rota. Pero había algo que él tenía que oír.
—Y bien sabes que Scott es para ella. Él no es un mal chico.
—Lo sé.
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MIEL ||| Teen Wolf ||| Short Story
FanfictionMiel se marchó de Beacon Hills hace mucho tiempo. Ahora volvió, con un niño y para sorpresa de Derek Hale, es su hijo. El corazón de Miel ahora se verá disputado por su primer amor, Derek Hale y su nuevo amor, Scott Mccall.