16.-El jefe

12 1 0
                                    

Me quedé un momento viendo el artefacto que tenía, parecía un cubo un diseño brillante, pero me llamó la atención que en la gema del centro de una de las caras, al ver a través de ella pude observar como habían algo parecido a espejos dentro del cubo que ocasionaban que se formaran imagenes infinitas por las paredes, parecido a un caleidoscopio.

"No sé de qué me hablas"

"Bueno, parece que no vas a hablar, oficial. Tal vez tenga que refrescarte la memoria,¿No?"

[La separación física nos recuerda la importancia de la conexión emocional.]

Un sonido parecido a una fractura de vidrio o hielo rompiendose sonó de repente, de un momento a otro ya no estaba en la misma sala y me caí al estar sin la silla o las ataduras.

"Veamos de lo que eres capaz".

Me levante del piso e iba a sacar mi espada, pero en un descuido me había olvidado que ya no la tenía.

"Fiushh"

Una daga arrojadiza va dirigida a mi cabeza, esta ya estaba a unos centímetros de mi ojo.

Estaba muy cerca, pero reaccioné a tiempo, retrocedi mi posición hacía unos segundos en el pasado cuando estaba en el piso.

"Sabes, es exactamente esto lo que esperaba que hubieras hecho cuando te encontraste con mi compañera... Muy bien, ahora...".

Me arrojó una espada a mi mano, inmediatamente me pusé en guardia y cruzamos espadas.

Abaniqueando con gran destreza, él tenía una mejor técnica, mientras que él se mantenía firme con cada tajo que repetía, me estaba limitando únicamente a defender los ataques.

En un descuido, yo lanzo una estocada al nivel de su abdomen.

Él lo esquiba girando su cadera y me impacta con un codazo directo a la cabeza.

Me desoriento...

"Tu estilo, me recuerda un poco al de la realeza, bueno, creo que ya todo quedó claro..."

[A veces, la mayor habilidad reside en saber que no tienes ninguna.]

De nuevo sonó un ruido extraño...

Se acercó y me puse en guardia, ya no tenía su arma desenfundada.

 Activé mi habilidad y le puse como objetivo regresarlo a su ubicación de hace unos minutos para poder escapar.

Pero entonces sonó otro tipo de sonido quebradizo y se disipó mi activación.

"Lo siento, pero ahora las habilidades son inútiles", dijo con una sonrisa.

Me encesta un golpe directo a la cara que me hace caer contra la pared, empiezo a sangrar por mi nariz.

A este paso iba a perder, necesitaba tiempo para recuperarme.

Teletransportación y una habilidad negadora de poderes, si tenía una habilidad debía de ser muy versatil, pero algo debía ser cierto, debe tener un punto débil importante para que funcione.

"Soy Casper de las tierras de Liyandre"

El oponente se detuvo antes de asestar un segundo ataque.

"¿Esa ciudad alejada más allá de las colinas?"

"¿Conoces esas tierras?"

"Sí, nos llegaron algunos reportes acerca de la calamidad Armadura Maldita".

"¿Que ocurrió con los sobrevivientes? ¿Sabes algo del virrey Graika?"

Guardó una pausa mientras me miraba fijamente y su expresión se hacía un poco desanimada.

[El mayor poder reside en reconocer nuestra propia vulnerabilidad.]

Sonó nuevamente una fractura.

"No encontraron a ningún sobreviviente, ahora sólo es una zona desolada".

Se pasó a sentar de piernas cruzadas en el suelo.

"Ay no..."

Mi sentido de supervivencia se desvanecía lentamente.

"Cuéntame qué te pasó".

Le conté todo lo necesario.

"Ya veo, tu padre tenía una reliquia como tu... probablemente a él estuviera buscando eso".

"¿De qué hablas?"

"Armadura Maldita persigue a personas con habilidades artificiales, así como la que tienes tú"

"¿Estás diciendo que lo que pasó en mi pueblo pasará aquí también?"

"Tarde o temprano, es a causa de una especie de maldición, creo".

No podía repetirse lo mismo, incluso si me fuera ocurrir algo a mí, no quería que pasará en esta ciudad nada igual, tantas vidas, tanta sangre, no podría soportar escuchar esas voces de nuevo.

"Ahora ya no tengo a donde ir"

Tristeza, envidia, ira, varios sentimientos mezclados nublaban mi mente, buscaba un nuevo comienzo aquí, vivir una vida más pacífica, como si fuera un sueño, me forzaron a despertar.

"Pareces unas buena persona Casper, la vida no te ha tratado bien en este último tiempo, pero no todo esta perdido, tienes una opción".

"¿Qué crees que debería hacer?"

"Somos una organización que recolecta habilidades".

"¿Para qué lo hacen?"

"Hay un evento mundial que se realiza cada cierto tiempo que involucra a todos los continentes, es una guerra campal en la que personas con habilidades que cumplan ciertos requisitos son traídas a otro mundo, del cual queda una persona que recibe un favor de los dioses. Uno de los requisitos implica reunir habilidades en reliquias especiales para desbloquear el pase a este acontecimiento".

"¿Entonces trabajan para el reino?"

"No, el reino cuenta con una sección especial que involucra a personas muy capaces con habilidades especiales, están tratando de reunir la mayor cantidad de gente posible para mejorar sus posibilidades de ganar, todos son militares, y nosotros tratamos de evitar eso".

"Esto es mucho para mí, no vine aqui para formar parte de algo tan grande, quería tener una vida tranquila".

"No te preocupes, puedes tomarte un tiempo para pensarlo, cuando estés listo te tomaremos en consideración, pero recuerda, las personas como nosotros no pueden vivir una vida normal".

Tuunnn, la puerta de madera detrás de esa persona se abrió.

"Jefe, nos tenía preocupados, estuvimos buscándolo en las demás salas, pero estaba justo en la última que revisamos".

"Melody, dejaremos que se vaya".

Me dejaron retirarme, al salir de la casa, pude ver que nos encontrabamos en el bosque en las afueras de la ciudad, la gran cantidad de arboles alrededor impedía verlo a la distancia y por la zona parecía que era en una región muy profunda dentro de toda la vegetación.

Mientras caminaba trataba de asimilar lo que había pasado.

Y una imagen pasó por mi cabeza.

"Espera, Bianca..."



CAPAS Y SECRETOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora