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Vegetta frotó sus ojos cansados, apartando las sábanas para levantarse de la cómoda cama, no había logrado dormir, pero de todas formas se sentía cansado. Sus pies tocaron el frío suelo y se quejó, buscando sus pantuflas a tientas en la oscuridad de la habitación, cuando las encontró acudió al llanto de su pequeña.

El omega caminó hasta la habitación de su cachorrita ignorando la presencia de su esposo que se encontraba moviéndose inquieto en el sofá, sin poder conciliar el sueño, pasó del lugar yendo directo hacía donde se encontraba la cuna de la bebé, esta se encontraba llorando y moviendo sus manitas, en busca de atención.

― Shh, ya estoy aquí ― la tomó en sus brazos, meciéndola de inmediato, procurando que dejara de llorar.

"Papi soñé feo"

La pequeña sollozaba a la vez que intentaba balbucear cosas inentendibles para su padre, el omega simplemente secó sus lagrimitas y dio un beso en su coronilla, acomodándolo mejor en su pecho, la pequeña se acurrucó allí donde el aroma de su papi abundaba, haciendo imperceptible el otro que estaba molestándole, guio su manita hacía su boca, intentando contener las feas sensaciones que había experimentado.

Vegetta salió nuevamente, había comprobado que Leo no quería dormir solita por alguna razón, así que se lo llevó junto a él. Foolish esta vez estaba sentado, observando a su esposo e hija, no dudó en ir tras ellos, pensando en que las cosas no podían seguir así con Vegetta, no le gustaba.

El mayor entró a la habitación, pero cuando estuvo a punto de cerrar la puerta sintió como algo la obstruía, allí estaba el alfa, simplemente ignoró su presencia de nueva cuenta y caminó hasta su cama, para acostarse junto a su bebé.

El alfa también se recostó en la cama, a un lado de su esposo, pero este de inmediato se dio la vuelta, dejando a la pequeña Leo en el espacio que sobraba de la cama, Foolish bufó.

― No deberías dejar a Leo en la orilla de la cama ― expresó el menor, pero Vegetta hizo todo su esfuerzo en hacer parecer que no lo escuchaba.

― Vegetta, no seas tan terco, deja a la bebé en medio de la cama, ella solo está asustada debido a las feromonas de hace rato, un ambiente familiar será lo mejor para ella.

"Ay que aburrimiento, ¿Y si jugamos a que me das leche de tu pechito?"

Con ayuda de sus pequeñas manos, Leo intentaba quitar la tela que obstruía su paso al camino de la felicidad, pero le era casi imposible pues admitía que aún no era una profesional con eso de desabrochar botones. Ella era ajena de lo que sucedía a su alrededor. Su papi suspiró en ese instante, y tomándola con cuidado la levantó para cambiarla de lugar.

"Chale, ya lo estaba logrando"

El omega realizó la acción y de inmediato estaba dispuesto a voltearse, de no ser por una mano sosteniendo su hombro, cuidando de no lastimar a la bebé en medio de los dos.

― No quiero estar peleado contigo ― dijo el alfa, mostrando que estaba arrepentido de su actitud anterior, dejando de lado el orgullo ― lamento si te hice sentir mal, estaba estresado por lo del trabajo, no debí desquitarme contigo.

Vegetta suspiró, bajando la mirada hacia la pequeñita, que emitía soniditos desesperados mientras tiraba de la tela de la camisa de su pijama.

"Papá Fulich, ¿Recuerdas cuándo te dije que te amaba? No fui yo, fue el autocorrector"

Y bueno, Leo seguía resentida por ser cambiada de lugar cuándo según ella estaba cerca del objetivo.

― Sentí como si todo aquello que decías lo pensabas de verdad... Fue tan, no sé, era como si hablara una persona diferente del Foolish que conozco.

Foolish asintió apenado, pasando sus grandes manos por las mejillas de su esposo, Vegetta no merecía el trato que le había dado.

― I was a dumb idiot, I know, ¿Podrías perdonar a este alfa tonto? ― preguntó, esperanzado de resolver los problemas ― Eres muy valioso Vegetta, no dejes que nadie te haga pensar lo contrario, así sea yo mismo.

"Alguien abra estooo"

Leo daba con sus puñitos en el pecho de su padre, pero estos no tenían fuerza alguna, así que pasaban desapercibidos para el omega inmerso en la mirada de su alfa.

― Pero me vuelves a decir cosas así y no me ves más Foolish ― advirtió el mayor, cediendo ante las disculpas de su alfa, a fin de cuentas, ambos se amaban con la misma pasión, entendía la presión del alfa, pero eso no significa que iba a aceptar un trato de esos, pero por esta vez todo podía quedar en el pasado.

― It's okay Vegetta.

― Y...

Fueron interrumpidos por un balbuceo lleno de exigencia, casi un grito enojado de su retoño.

"TENGO HAMBRE POR TODO LO SAGRADO PAPI, QUÍTA ESA TELA DEL MEDIO Y ALIMENTAME DE UNA BUENA VEZ"

― Creo que alguien quiere atención ― señalo Foolish sonriendo.

― Si, lleva rato tirando de mi camisa, debe tener hambre.

"¿Entonces estabas ignorándome? Lo pensé de todos menos de ti papi"

― ¿Preparo el biberón?

"Hey, ¿Cuál es tu obsesión con el biberón? Primero me das chupones y ahora esto, ¿Seguro que eres mi padre?"

― No, no te levantes ― Vegetta detuvo al menor, a la par que hacía a un lado la camisa del pijama que utilizaba esa noche, Leo por fin sería feliz.

― Well.. ― el menor se acomodó a sí mismo, y también a Leo, para que pudiera estar más cerca del pecho de Vegetta, y así poder alimentarse ― ¿Entonces todo bien?

― Ajá ― comentó el omega, que sostenía el cuerpecito de Leo para mantenerla en aquella posición.

"Todo perfecto, bro"

Baby Thoughts || FooligettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora