Kousaka Junpei, El Espíritu de la Venganza

05

Inglaterra
1431

Nos encontramos en un pueblo medieval, donde todas las casas estaban prendidas Fuego, había gente sufriendo, una gran cantidad de soldados muertos y algunos fueron quemados vivos. En medio del pueblo en llamas, se encontraba una mujer de pelo blanco con una espada blanca en sus manos. Mientras otros soldados se acercaban a ella, esa mujer sacaba fuego desde sus manos, quemando a los soldados, y a la velocidad de un rayo, cortaba las cabezas de los supervivientes. La Albina no tenía piedad con los soldados, en sus ojos estaban grabados con sentimientos de odió y rencor, con una pizca de sed de sangre. mientras ella misma veía a todas sus Víctimas en el suelo, sin sentir pena por ellos

Jeanne: El mundo es cruel... No importa cuántos actos de honor le des a tu país, o cuántos aliados tengas... El mundo... Siempre será un lugar muy cruel... Los humanos solo piensan en ellos mismos... Los que tengan la mentalidad más razonable... Jamás son escuchados... Son ignorados, por los que para ellos creen que hacen lo correcto... Y al final, terminan traicionandolos por testimoños falsos... Cómo yo... La Humanidad... No tiene corazón...

REGRESANDO AL PRESENTE

Se abren unos ojos, era Jeanne qué por fin despertó de su castigo... Veía que a sus alrededores, el cielo nocturno, estaban en otro tejado

Al mirar arriba, ella se sorprende. Al ver a Kousaka Junpei mirándola Fijamente, mientras aún la tiene entre sus brazos

Junpei: ¿Estás bien... Jeanne?

Jeanne: ......

Ella cierra los ojos, y suspira un poco

Jeanne: Pudiste haberte ido... A vivir tu propia vida... En vez de meterte en este estupido conflicto qué tengo con esa Samurái... Por qué... Por qué simplemente no te vas y me dejas... Yo puedo encargarme de esto sola... Solo baje la guardia un instante... ¿Por qué?

Junpei: (Pensativo)

Junpei: Por qué aún te debo el favor de darme un hogar...

Jeanne: ......

Jeanne: ¿Acaso tienes idea del problema que te has metido? Esto es mucho peor que destruir una estatua de un dios Gato por accidente

Junpei: Por lo menos no tengo que ayudar a 100 gatos cómo aquella vez

Jeanne: ......

Jeanne: Tomoe te lo dijo, ¿Verdad?

Junpei: ¿?

Jeanne: Yo mate a su esposo... Un tal Minamoto no Yoshinaka... Lo mate sin piedad... Y también a varios cientos de Humanos sin Alma como tú... Por esa razón... Ya deberías haberte dado cuenta que no soy la mujer qué tu crees que soy por estos 7 días...

Junpei: ......

Junpei: Eso ya es sopa pasada, ¿Verdad?

Jeanne: ¿?

Junpei: Aún que no conozca muy bien tu pasado... Eso aún no me da una razón para no protegerte... Aún eres muy valiosa para mí, Jeanne... No importa cuántas personas hayas matado... Yo te seguiré hasta el final...

Jeanne: .....

Jeanne: Pero también puedes encontrar a alguien mejor que yo... Otra chica que puede amarte realmente... Puedes hasta tener un verdadero Harem de chicas qué te amén... ¿Por qué debo ser yo? ¿Una asesina?

Junpei: ......

El chico respira hondo, mientras qué la mujer cierra los ojos

Jeanne: ¡¡¡¿?!!! — ella se sorprende, al ver cómo Kousaka Junpei la besa directamente en los labios. Un beso bastante conmovedor para élla