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Mis días estaban contados, esa misma noche había pasado todo mi tiempo tratando de averiguar como redimirme de lo que habia pasado. Pequeños fragmentos de mis recuerdos venían a mi mente de manera fugaz, todo lo que tenía en mente era Nicolas Miller. Soñando una y otra vez con lo sucedido la noche de su muerte. Estaba desesperada, tanto que investigue como
comunicarme con los muertos, había encontrado algunas cosas en internet, que podrían ser útiles y si buen había escuchando que sería mejor no tocar esas cosas, solo quería un poco de paz.

Esperé un par de semanas y en una noche, me escabullí del guardia de la puerta del cementerio y corrí a la tumba de Nicki. estaba desesperada por salir de eso y si un extraño se acercaba y me ofrecía una salida, yo la tomaba sin pensarlo.

Así que abrí la tumba de Nicki y tomé mi teléfono, abrí la aplicación de un libro extraño que había descargado y empecé a pronunciar una oración. No sucedió nada realmente, al enterarme de que era una completa estafa, entre en desesperación y golpee los restos en descomposición de Nicki una y otra vez. No me había enterado de que
el guardia había escuchado eso y había llamado a la policía.
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– El allanamiento de tumbas también es un delito y una falta de respeto, Madison. – Expreso el oficial.

– Lo, lo se. Yo solo...

– No. ¿Por qué nunca dijiste que había alguien tras de ti? lo habríamos resuelto.

– ya es tarde para eso. ¿no es así?

-Voy a confiar en tu palabra. Tienes suerte de que yo fui quien llego primero a la escena. – Sus palabras hicieron que sintiera alivio. – Solo vete y no digas nada, dile a tu madre que no podre llegar hoy, tengo mucho trabajo.

Le agradecí y me puse de pie de inmediato para luego caminar a la salida.

– Madison – El llamo mi nombre.

– ¿Sí? – De inmediato me detuve

– ¿Quién mato a Nicolas Miller?

– No lo sé, solo me enteré de que todos tuvieron la oportunidad. El oficial Jones dijo que se suicidó. Dijo que estaba en malos pasos, encontraron una cuenta bancaria a su nombre, parecía que vendía esteroides y en los entrenamientos a menores de edad y querían enjuiciarlo. Tal vez no quería enfrentar la prisión. Eran 20 años, la vida se le iría en una celda. – Mentí –

– Bien, confiaré en tu palabra– Dijo una vez mas – ya puedes irte–

2: 00 Am
El camino era oscuro y frio, una única lampara iluminaba el lugar y apenas podía leer la frase en la lápida.

– ‘’El camino de la vida es corto, pero la gloria es eterna.’’ – Leí en un susurro mientras inundaba de humo mis pulmones al calar mi cigarro.

– ¿Te gusta?, yo mismo la elegí. – Su voz me hizo dar un peuqeño salto de susto–

– No esta mal. – Voltee para encontrarme con él de frente. – Ángel Dilaurentis. Ha pasado mucho. – Miré por encima de su hombro y me encontré con la mirada del otro chico. – Nicolas Miller. No diré que es Un placer en conocerte. He escuchado muchas cosas sobre ti

– Te dije que era buena actriz – Ángel susurro a Nicki.–

– Hiciste un buen trabajo. – Nicki se acercaba para ver las facciones de mi cara. – Es igual a Madison. - ¿de dónde la sacaste?

– La conocí en un bar de prostitutas. – Ángel saco un sobre de su mochila y me lo entrego. – 12 mil. Por todo el trabajo.

– Un gusto hacer negocios con ustedes. – Tome el dinero y lo guarde. – solo tengo una pregunta.

– Dime. – Contesto Nicki.

– Aun no entiendo, me he hecho pasar por esa chica, Madison. que asesinaron. He sido ella durante todo este tiempo y he matado a su amigo de una sobredosis, mentí contra la chica que ‘’Asesino a Ángel’’ y ahora está pudriéndose en la cárcel, y su otra amiga no va a salir del manicomio. Pero no entiendo ¿por qué?

– Cada uno tenían algo especial. – Hablo Nicki- pero, ellos sabían mucho. Ellos sabían que yo había matado a Madison, fue un accidente, pero, eso no se vería bien en mi curriculum. Los mejores amigos guardan secretos y eso fue lo que los hice hacer, pero ellos no quisieron colaborar mucho y me iban a hundir, no soy mucho de su agrado.

– Entonces finges tu muerte. ¿pero que sentido tiene acabar con todos?

– Somos mejores amigos, si yo caigo, ellos caen conmigo. Pero tu y yo no somos amigos. – se acercó amenazante y de su pantalón saco una navaja. – y sabes mucho.

-– ¿yo? – entre en pánico- no, yo no diré nada, te lo prometo. – di algunos pasos  atrás.

-– Si no puedo confiar en mis amigos, ¿Qué te hace pensar que en una desconocida sí? – Nicki presiono la navaja contra mi cuello.

Cerré mis ojos, me aprecia que era el fin de todo y ahora me arrepentía de haber aceptado este trato.  Escuche un disparo y mire el cuerpo de Nicki a un lado en el suelo, con 1 bala en la cabeza. Me espante y observe al frente. Ángel le había disparado.

– Si me preguntas cuales son mis motivos, solo diré que he estado esperando este momento durante mucho tiempo. – a Ángel parecía cambiarle la voz, a una más seca y fría   Se coloco en cuclillas y tomo algo del pantalón de Nicki.–

– Era. era tu amigo. – No podía creerlo- lo ayúdate todo est…

– Nicki no es amigo de nadie. – Mostro una tarjeta de crédito – su número en el banco es gigante. Y a mi me gustan mucho tener amigos de los verdes.

– ¿Como..

– Al final quien le creería al una roba identidades, que salió de la nada a suplantar a una persona inocente, asesino, mintió a la ley y daño vidas por un poco de dinero. No te hagas la inocente. No eres mejor que yo.

– yo. yo solo…

–  Lárgate antes de que cambie de opción.

No tuvo que decirlo dos veces, cuando me di la vuelta y empecé a correr lejos de él. Estaba confundida y asustada, ¿todo este tiempo? ¿A dónde se había ido el chico dulce que conocí en los pasillos de la universidad?

– Y allá va otra. – una sonrisa tétrica se formó en su rostro. –

Me Maldije internamente y mientras corría, me prometí no volver a aceptar ningún otro trato de un desconocido

- 1.. 2.. – Ángel apretó el gatillo del arma y dio justo en mi cabeza.–
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Siempre he sido alguien calculador, sabía que todo eso sucedería y no los culparía a cada uno de ellos, si ahora me odian. cada uno de ellos arden desde su propio infierno.

He escuchado miles de historias, en donde el motor de las personas es su familia, a otras los inspiran el amor, algunas otras su sed de superación, pero si me preguntas a mí, Ángel D'lorenti ¿Qué es lo que me hizo llegar tan lejos?, muy probablemente te respondería que la venganza. Porque verán, no puedo ser el Amigo de todos, todos los días. Ni el saco de boxeo de Zoé, todo el tiempo, mucho menos el títere de Nicki.

– Los extrañaré - Susurré para mi mismo, mientras observaba arder en llamas, el único recuerdo que tenía de mi grupo de amigos. La foto del día en que nos conocimos

Di un leve suspiro con la melancolía de los buenos momentos que dejaba atrás. Salí de mi habitación con una caja llena de mis cosas y corrí al auto de mi madre.

– Ángel, cariño. Apresúrate, es tarde- mi madre gritaba desde el auto.

–  disculpa, estaba despidiéndome de la casa. - subí al auto y le di un último vistazo a la casa.

– Está bien cariño, estaremos bien. Será un nuevo comienzo. Harás nuevos amigos, siempre haces que las personas te amen - Ella tomaba el volante y conducía-

Sonreí de lado al escuchar sus últimas palabras. "Siempre haces que todos te amen". Supongo que no podría esperar a conocer a mis nuevos "amigos" en una nueva ciudad.

Más allá de la tumbaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora