Tribu primitiva - un nuevo comienzo

Capítulo 5 La bendición de ser amada +18

Mientras losdos trajeron otro bambú y lo cortaron incluso lograron hacer tapas que secierran bien y se abren con más dificultad. Recolectaron todo el algodón queencontraron y lo guardaron en cesta lo limpiaron y lo peinaron con cuidado.

Después deeso empezaron a empacar las piedras de luz y la de hielo solo dejaron tres piedrasde luz afuera y una de hielo. Apilado en el dormitorio al lado de la pared. Algunacaja tenía solo uno otra caja tenia dos o tres piedras de luz que son máspequeñas. Las piedras de luz se parecen a los corales que a menudo ha visto enla televisión. En la oscuridad de la habitación no hay pizca de luz las cajasson bien cerradas, las piedras de hielo cada uno venía en una caja de su tamañoecho de tubo de bambú.

Ella se pusoa cocinar cada uno hace lo suyo primero volvió a limpiar los intestinos losfroto con sal hasta que salió su olor.

Primero hayque comer ya que comerán tarde hoy prepara mas cosas para comer.

Peló muchaspatatas los corto y los puso en agua para hacer puré luego corto otros parahacer sopa en formas más pequeñas limpio 8 cebollas dos capias grandes lasemilla lo guardo y lo puso a secar al lado de la otra.

Hiso unfuego y coloco un cubo grande para hacer sopa puso un trozó de grasa dejándoladerretirse formando el aceite y hasta que formo algunos chicharrones lo saco enun plato agrego la cebolleta picada y el pimiento rojo y un poco picante. En untubo limpio saco mitad del aceite Lo mesclo y lo dejo freír unos 3 minutos,mientras miro el pimiento que se secó puso en un tubo un poco y con un palolimpio lo aplasto hasta que se convertido en polvo hiso igual con la pimientanegra que ya se secó por completó y lo dejo en el tubo ya que lo pondrá casi alfinal.

Mirando lacebolla lo revolvió y tiro encima el pimentón, lo mesclo tres veces y le agregola carne cortada en cubitos de un bocado hasta que la carne se volvió un pocoblanca le echo el agua encima hasta la mitad del cubo y lo dejo hervir.

 Al lado hiso otro fuego.

Ana se leacerco tímidamente Erica la miro y le sonrió.

- ¿Tieneshambre?

La niñaasintió luego negó con la cabeza sus pequeñas manitas juegan con sus dedos.Erica puso algunas patatas en el fuego para asarlas.

- Puedoayudar, dijo con su pequeña vocecita.

- No hacefalta, todavía eres un bebe. Dijo y le acaricio la cabecita lo tomo en susbrazos y le dio un beso en su mejilla. Si tenéis hambre podéis tomar frutassolo dejar espacio que habrá mucha comida deliciosa, la dejo en le suelo allado de su hermano.

Los dosniños aún se sentían tímidos y andaban con cuidado y miedo, pero ya comprendíanque ya no son unos niños sin madre y padre y podrían sentir que el buen tratoque recibieron era real, solo que se sentían muy tímidos.

Tomo elhígado y lo corto en rebanadas de un cm lo lavo con mucha agua, puso el agua ahervir y dejo que el hígado se hirviera hasta salir toda la sangre de él. Luegolo saco en un plato y empezó de nuevo derretir la grasa, saco los crujienteschicharrones y los puso en el plato al lado de los otros fritos anteriormente, sacomás de la mitad del aceite y lleno el tubo de bambú, lo tapo y lo dejo a un ladoenfriarse. Le agregó cebolla picada y pimiento lo reboso le agrego pimentómolido, puso el hígado sobre el y agua hervida hasta que lo cubrió. Puso sal enlas dos ollas y las dejo cocinarse a fuego lento.

Recolecto elpimiento seco y empezó a machacarlo todo lo guardo en un tubo de bambú finitocon tapa, lo mismo hiso con el pimentón.

Ya tenia trescondimentos mas pimentón picante, pimentón dulce y la pimienta esto lo hiso sonreírdulcemente.

En una cuevailuminada por piedras de luz de colores que están colocados en el sueloalrededor de la pared y la luz solar que entra de afuera. Una joven de 16-17años vestida con un vestido de piel gastada típico de las tribus primitivas.Tenía el cabello largo liso y oscuro tejido en una trenza y ojos de color azulcon una cara hermosa sin imperfecciones, es hermosa y hermosa.