Casi Humanos

10/Segundo Final

Jiang Cheng suspiraba mientras guardaba en cajas sus cosas, en un rato el camión de la mudanza vendría, solo enviaría algunas cajas con su ropa, libros y algunas cosas más como recuerdos. El resto de la casa se quedaría como estaba, en caso de que no regresara nunca esa casa pasaría a ser de Jin Ling así que cuando eso pase él decidirá que hacer con todo lo que quede.

Hoy se cumplen exactamente cinco meses de ese extraño día que tanto le cambió la vida y desde ese día se dedicó a buscar la manera de comenzar de nuevo. Para empezar buscó empleo como profesor en Estados Unidos y lo encontró en una universidad bastante buena en Nueva York, Wei Wuxian lo ayudó a buscar departamentos a buen precio y al final termino encontrando justo lo que quería y a un precio excelente, aunque no podía pagarlo en su totalidad de inmediato así que pensó en solo rentarlo mientras ahorraba para pagar el resto, después de todo su salario sería muy bueno. Sin embargo Wei Wuxian y Jiang Yanli no dejarían que esto pasara, cheques con sumas de dinero considerables llegaron por debajo de su puerta apenas un día después de haber encontrado el departamento. Inmediatamente fue a regresarlos, pero Wei Wuxian le dijo que era su regalo de cumpleaños adelantado; y Yanli dijo que si era para él, no había ningún problema, por supuesto él ya estaba pensando en la manera de reembolsarles el total de manera discreta.

En una semana se iría a un nuevo país, a un nuevo departamento, a un nuevo trabajo, pero sobretodo a un nuevo comienzo.

Se acercó a la estantería para tomar un libro, pero lo que tomo en su lugar fue un álbum de fotos.

-El camión ya llegó. -dijo Wei Wuxian asomándose por la puerta. -¿Qué tienes ahí? -observó el objeto en las manos del otro.

-¿Ya no lo recuerdas? -levantó el álbum para que fuera completamente visible para Wei Wuxian.

-¿Cómo podría olvidarlo? Fue el primer regalo que te compré en su totalidad con mi dinero. -de hecho así era, ese había sido un regalo de cumpleaños.

°

Pronto sería el cumpleaños número diez de Jiang Cheng y Wei Wuxian había estado ahorrando para comprarle algo, su mejor amigo era un aficionado de la historia y que mejor regalo para un aficionado de la historia que un libro antiguo, pero mientras caminaba con su madre por el centro comercial rumbo a la librería, sus ojos vislumbraron un álbum de fotos bastante lindo en una tienda de antigüedades y Wei Wuxian tuvo una idea.

En la fiesta de cumpleaños de Jiang Cheng había niños de su edad, algunos mayores y otros menores, todos hijos de gente rica e importante, socios y amigos de sus padres, pero no de él. Cuando llegó Wei Wuxian su cara se iluminó, Jiang Cheng corrió a él y este lo recibió con un abrazo y le entregó su regalo, al momento de abrirlo la felicidad se desbordó por todo su rostro, el encuadernado era hermoso al igual que los detalles marcados en el cuero, que por el paso del tiempo parecían querer desvanecerse; su rostro brilló aún más al ver el interior, fotos de ellos, de ambos, la mayoría tomadas con la vieja Polaroid de Wei Changze que Wei Wuxian había encontrado en el sótano de su casa y que por milagro aún funcionaba y algunas otras tomadas por Cangse Sanren o Wei Changze.

°

El álbum seguía ahí, pero ahora estaba completamente lleno con fotos de ellos desde su infancia hasta la actualidad, una amistad retratada en fotos. -No creí que aún lo tendrías.

-¿Cómo podría deshacerme de él? Es el objeto más significativo que tengo. -lo ojeaba mientras el Wei se recargaba en su hombro.

-¿Sabes que te voy a extrañar?

-No -ambos se rieron y Wei Wuxian le ayudo a guardar las últimas cosas para dejar que la mudanza se las llevara.

°

Una semana después, tres hombres, una mujer y dos niños despedían entre lágrimas y sonrisas a un hombre que desaparecía por el pasillo del aeropuerto para abordar su avión a una nueva vida.

-El edificio es bastante bonito. -Sonrió mientras veía un edificio algo antiguo pero bien conservado.

-¿Verdad? -preguntó el director quién le daba un recorrido por toda la institución. -El edificio principal tiene setenta años y fue construido por la primera generación que se graduó aquí y desde entonces cada generación deja un regalo para la escuela, se convirtió en una tradición. -habló orgulloso.

-Es una gran tradición. -observó al rededor.

-Así es. Lo llevaré al aula que ocupará y tal vez veamos a otros profesores en el transcurso. ¿Le parece?

-Me parece bien. -caminaron por buena parte de la escuela y en efecto encontraron a otros profesores que recibieron de forma calida al recién llegado.

-Ella es la Profesora Samantha Parker, imparte la especialidad de diseño gráfico. -Señaló a una mujer de largo cabello Rubio y ondulado, era hermosa. -La mejor diseñadora gráfica de Nueva York.

-Me alaga demasiado, señor Clarke. -sonrió, hasta su sonrisa es perfecta. -Usted debe ser el Señor Jiang.

-Así es, Jiang Cheng o más bien dicho: Cheng Jiang. -aquí el apellido va al final. -Impartiré Historia a partir de la próxima semana.

-Será un placer tenerlos con nosotros. Sí me disculpan...

-Por supuesto no le quitamos más tiempo. -ambos le abrieron espacio y la dejaron irse.

-Sigamos adelante, casi llegamos a su aula y también casi ha conocido a todos los profesores, solo nos falta uno. ¿Dónde podría hacerse metido?

Jiang Cheng dejo de prestar atención al hombre, aunque no por completo. Observaba los jardines y los edificios, este lugar era muy lindo y aunque todo iba bien en su nuevo hogar aún tenía que buscar la manera de empezar a buscar a ese intruso; a veces se preguntaba si debía buscarlo o simplemente dejar que el destino los encontrara, pero la ansiedad de no saber si el destino los quería encontrar era demasiado para él. Estaba perdido en sus pensamientos hasta que recordó que aún estaba con el director.

-...La razón es bastante graciosa, de hecho... -el director no parecía haberse dado cuenta que Jiang Cheng se había perdido en sus pensamientos. -¡Oh! Ahí está, -detuvo la conversación en cuanto vio a alguien. -El hombre que estaba buscando, usted es el último en ser presentado con el nuevo profesor.

-¿Nuevo profesor? -preguntó el desconocido.

Esa voz.

-Él es Cheng Jiang, el nuevo profesor de historia y al igual que usted es chino. Profesor Jiang, él es Qingge Liu, el profesor de Arquitectura.

Solo en el momento que escuchó ese nombre, Jiang Cheng se atrevió a levantar la vista.

-Un placer, Jiang Cheng. -habló en chino.

-El placer es todo mío. -sonrió. Creo que después de todo si era buena idea dejarlo en monos del destino.

¿Verdad?

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- NephilimCipriano 🌷