Cap. 4.- Piedra por piedra.

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Pov's Autor.

Es una linda mañana de miércoles, el famoso "ombligo de la semana", un día que despertó con el clima ligeramente nublado y con los rayos del sol apagados, brillando por su ausencia ese día.

Lo que te emociona demasiado, mientras comienzas a levantarte para comenzar tu día poco a poco. Te acercas al baño de tu habitación para darte una ducha, tan relajante y helada. Hace mucho que no estabas sola en tu casa, ahora tienes todo lo que necesitas a tu alcance para saciar tu urgente necesidad de soledad.

Me las van a pagar esta y cada una de las que haga, Williams y Hymentact...—susurras para tí misma, mientras sientes tus pechos rebotar con el movimiento—. Les voy a dar por donde más les duela, a los dos... Empezando por tí... Querida Blobertha...

Dejas de ducharte, para salir del cuarto de baño y cambiarte, mientras planeas una venganza mucho más satisfactoria por todo lo que te han hecho pasar; después de ponerte un vestido que hace mucho no ocupabas, te diriges a la cocina, donde todo está perfectamente acomodado, como lo habías dejado. Piensas en salir a comer, o ir a ''Forgeti's Bar'', donde definitivamente te darían un mejor trato que en tu mismo "hogar" si es que así se le pudiera llamar.

Así que, tomas tu bolso con las llaves de tu auto y una chamarra de cuero que estaba sobre la silla del comedor, que hace conjunto con tu hermoso vestido color azul. Al salir de tu casa, te has topado con que Robert había acudido, apunto de tocar la puerta.

—Oh... Pensé que no estarías...—dijo, un poco inseguro, metiendo sus manos a su chamarra de cuero, el frío era jodido ese día.

—¿Qué quieres ahora?—dices fría y sin intenciones de hablar, cerrando con llave la puerta principal.

—Quiero hablar...—lo miras con furia, fulminándolo con la mirada—. Sobre lo que pasó.

Y entonces, sales corriendo a la puerta trasera.

—¡Vamos querida! No te puedes enojar solo porque Blobertha estuvo aquí... No hicimos nada malo—decía de una forma molesta, despreocupada y sarcástica hasta cierto punto.

—¡Ya cállate! No necesito más explicaciones...—dices, cerrando la puerta trasera, con llave y candado—. Te enviaré los papeles para que los firmes, al final, no te tengo que dar nada... ¡Nos vemos el día del divorcio!

—¿Divorcio?... ¡Nunca lo discutimos, necesitamos hablarlo!

—¡¿Pero qué quieres hablar?! ¡¿Lo que esa perra no te hizo al oído?! ¡Ahhhh~ Si~ Robert~!—finges gemir, mientras dabas pequeñas sentadillas, como ejemplo claro de lo que habían echo—. No soy estúpida, tendré la cara, pero no soy nada tonta, y créeme... Ustedes dos, lo pagarán muy caro, se los juro por Dios... ¡Y no estoy tomando el nombre de Dios en vano!

Tomas tu auto, y te vas lo más rápido posible de ahí, conduciendo a toda velocidad.

Mientras que Robert se había quedado estático en el mismo lugar, sin reaccionar.

Al llegar a ''Forgeti's'', suena la campanilla de la puerta, dándote la bienvenida de forma cálida. De pronto, te das cuenta de que el lugar estaba parcialmente vacío, sólo algunas personas que conoces estaban ahí, bebiendo un poco o simplemente comiendo. El lugar era fresco y algo ruidoso, así que, te acercas hasta la barra y te sientas, casi derrotada.

~°•Secreto en alcohol•°~ [Clay x T/n]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora