𝘾𝙖𝙥𝙞𝙩𝙪𝙡𝙤 6

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- Abril.

Su voz sonó demasiado grave, hacía que mi piel se estremeciera y que mis hormonas perdieran el control. Él me tenía acorralada en la pared y no despegaba su mirada de mi cuerpo.

-¿P-profesor Snape?

Su sonrisa era perversa, al igual que sus intenciones. Sus manos se posaron en mi cuello y dirigió su boca hacia el.

Me desperté exaltada, ¿qué había sido eso? Sentía todo mi cuerpo sudado y mi corazón bombeaba continuamente.

5:30 de la mañana. En 2 horas comenzaban mis clases, tenía dos opciones; quedarme durmiendo plácidamente o quedarme despierta.

Mi mente no funcionaba, estaba aún en una especie de trance por el sueño que había tenido. Lo recordaba a la perfección. El profesor y yo nos encontrábamos en su oficina, no había nada de distancia entre nosostros y...

¿Qué estoy pensando? ¡Tengo 12 años! Esto es culpa de Aike, es un completo hormonado.

Agité mi cabeza varias veces y finalmente me levanté de la cama.

Me quité el pijama, estaba completamente sudado, es obvio que necesitaba una ducha.

Ya, bajo el agua tibia observé todos mis pensamientos y los fuí desechando lentamente, mientras el agua acariciaba mi columna, piernas y cabello.

El agua estaba ardiendo, amaba eso.

...

Estaba de camino hacia el gran comedor para desayunar algo. No había casi estudiantes por los pasillos, apenas unos de sexto-séptimo año y prefectos.

Cuando logré llegar, tomé asiento en la fila de mi casa, Hufflepuff, ¡Tan sólo había dos estudiantes!

Ignoré eso y mordí un trozo de tostada con mermelada de frambuesa, y así fuí, desayunando y ensimismada en mis propios pensamientos que rebotaban por mi mente, dándome un gran dolor de cabeza.

Pude ver a los profesores charlar entre ellos, no estaban todos pero la mayoría. Por ejemplo se encontraba la profesora McGonagall sacando tema de conversación al profesor Snape, espera... ¿El profesor Snape? Si, ahí estaba, con un rostro serio y unas ojeras inundaban sus ojos oscuros.

Me quedé embobada mirándole como si fuera lo más importante de este mundo, podría jugar que estuve así medio minuto, el, obviamente me miró por unos segundos y luego desvió su mirada a su plato. ¿Qué había sido eso?

Luego, yo también desvié mi mirada a mi plato, tenía una tostada restante pero sentí mi estomago completamente lleno, suspiré y me levanté de mi asiento, con el propósito de irme del gran comedor, iba a cumplir con mi propósito pero noté una suave mano sobre mi hombro, rápidamente giré mi rostro para analizar a la persona.

Era Leyre, la chica de Slytherin que ví el otro día junto con Aike, Alexander y Naiara.

- ¡Abril! ¿Como estas? Te ví aquí sola, ¿qué haces aquí tan pronto?

Su tono era bastante gentil, algo raro de una Slytherin, ¿Me estará tratando de manipular? Probablemente.

- Hum... Hola, bueno... Supongo que me gusta madrugar, ¿tú que haces por aquí?

Ella hizo un ademán con la cabeza, indicando que me sentará a su lado, bueno, no había nadie en la mesa de Slytherin, ¿por que no?

Me senté a su lado y me ofreció unos cuantos alimentos, yo negué todos con la excusa de que había desayunado.

- Bueno, Abril. No he tenido la oportunidad de hablar contigo, cuéntame de ti, ¿Qué te gusta hacer? ¿Cuales son tus aficiones?

Me sentí algo incómoda, tantas preguntas de repente era algo estresante. Iba a contestarla lo primero que se me pasara por la cabeza pero por suerte pude sentir la voz de Aike.

¿𝘼𝙡𝙪𝙢𝙣𝙖 𝙤 𝙖𝙡𝙜𝙤 𝙢𝙖́𝙨? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora