MILA - Guido Armido Sardelli fanfic

Parte 2: 12

- Estaba riquísimo, de verdad- dice Mila refiriéndose a la comida  -

Vinimos a comer de unos tíos que siempre me reclamaron no conocerla. No tenemos mucha relación, ya son grandes los dos, pero se que a pesar de no tenerla me aprecian.

- Son muy lindos juntos- habla mi tía en la sobremesa con cara tierna mirándonos -

- No seas pesada - le dice mi tío y me río - igual si, hacen linda pareja, se nota que se quieren de verdad-

- Gracias gracias - digo un poco avergonzado y veo que Mila está en la misma que yo, sonriendo de lado mientras se tapa un poco la cara -

La amo tanto

- Y mis amores...- dice mi tía tan melosa como siempre- piensan tener un hijito? Díganme que si por favor-

Trago grueso y miro a Mila, le cambió la cara automáticamente. Pero educadamente la cambia disimuladamente y sonríe amable.

- En un futuro...- digo incómodo riéndome y escucho como mi tío reta por lo bajo a su mujer como si no estuviéramos en frente-

...

- Avisen cuando llegan!- grita mi tía desde la puerta -

Saludamos a lo lejos y nos subimos al auto.

- Estás bien?- le pregunto mientras arranco el auto-

- Si gui- dice y me sonríe levemente -

- Perdón... Es grande y seguramente no tenía ni idea...-

- No pasa nada gui... Tranqui- dice acariciándome la mano-

Emprendemos viaje y mientras vamos los dos en silencio no puedo evitar pensar en la pregunta de mi tía y en el hecho de que yo también me la hago de vez en cuando... En el hecho de que sé que Mila todavía tiene las heridas un poco abiertas y en el hecho de que no sé si todavía quiere tener una familia. Sigo pensando en silencio, debatiendo conmigo mismo si largar todo lo que estoy pensando o no... En eso se basa nuestra relación, en sernos sinceros el uno con el otro, pero la idea de lastimarla con algo que pueda llegar a decir me carcome.

- En qué pensas?- interrumpe mi mar de pensamientos-

- En nada...- digo lo primero que se me viene a la cabeza-

- En algo pensas amor... Decime- me mira mientras yo sigo mirando el camino-

Mantengo unos segundos de silencio.

- Para vos ya está muerta la idea? De tener una familia digo... - se acomoda incómoda en el asiento- no ahora, obviamente... Pero... No sé, perdón Mila, no tendría que haber dicho nada- me empiezo a enredar con mis palabras -

- Vos sos mi familia- suelta -

- Obvio, yo soy tu familia y vos sos la mía...- digo- pero...-

- No quiero hablar de esto ahora gui... Porfa-

- Está bien mi amor, pero en algún momento lo vamos a hablar?-

- Si... En algún momento- suelta y lo que sigue del viaje transcurre en silencio-

...

Los días que pasaron fueron raros... Mila volvió a Rosario y aunque es difícil deducir que es lo que le pasa a la otra persona por chat, la sentí rara. Capaz estoy flasheando una banda y está todo bien, pero no siento que sea así.

Hoy me voy yo para allá a pasar unos días con ella, lo habíamos planeado en su última visita a Buenos Aires. Lo que también planeo es dejarla tranquila, hacerle saber que no la estoy presionando, que es lo que menos quiero, que lo único que me interesa es que ella esté bien y nada más.

...

- Hola mi amor- digo abrazándola fuerte -

- Hola mi lindo- dice en el abrazo-

Me adentro a su depto que está tan hermoso y bohemio como siempre y me pongo cómodo. Me extiende un mate y le sonrío.

- Sos la mejor- le digo y me sonríe - que hacías?-

- Estaba pintando- habla mostrándome sus manos manchadas-

La miro con ternura.

- Y estuve pensando, mucho- dice de la nada- y te quería pedir perdón si estos días estuve rara... Cuando estoy en ese proceso de introspección me cuesta mucho falsear, pero perdón -

- No pasa nada mi amor... En qué pensaste?- digo terminando el mate y dándoselo-

- En lo que te dije que en algún momento íbamos a hablar...-

- Yo también estuve pensando en esto- me sincero- y quiero que sepas que lo único que me importa hoy es que vos estés bien, no me importa nada más -

- Si gui, si te importa, te importa mucho... Y yo sería muy injusta si no le doy la importancia que se merece a algo que a vos te importa mucho...-

Narra Mila

Odio ser tan maricona y no poder hablar sin llorar.

- Mi... Me importas vos, más que nada- Guido se acerca y me agarra la mano-

- Y si... Si quiero, obvio que quiero formar una familia con vos, más grande que la que tenemos- le aprieto la mano y me mira con los ojos vidriados de lágrimas -

Estos días lo pensé mucho. Y a pesar de lo que me pasó, de lo que nos pasó, el deseo nunca se fue. Obvio que quiero tener un hijo con Guido, como no voy a querer tener un hijo con el amor de mi vida? Cómo? Si teníamos tantas ganas... Más allá del trauma, el deseo está y no pienso dejar que el trauma me boicotee.

- Tengo miedo... No te lo voy a negar- le digo y a esta altura el rubio ya está llorando- pero no voy a dejar que algo triste que nos pasó me inmovilice para siempre... Obvio que quiero tener un hijo con vos Guido -

Me da un beso en la mano y me abraza fuerte.

- Yo también tengo miedo Milita, pero te prometo que te voy a cuidar muchísimo, no voy a dejar que nada malo te pase, que nada malo nos pase- me dice en el abrazo y lo aprieto fuerte contra mi cuerpo-

Es la persona que más me amó y me ama en el mundo... Y cuando me abraza siento que nada puede salir mal. Nada va a salir mal para nosotros, nunca más. Me lo prometo, nos lo prometo.