𝘖𝘕𝘌 𝘓𝘈𝘚𝘛 𝘛𝘐𝘔𝘌

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Sergio Pérez, un chico de 18 años que se encuentra cursando la universidad, su meta es graduarse y obtener su título, desde pequeño soño con ser un arquitecto, que pudiera mantener y darle una mejor vida a sus padres.

Su hermano hace mucho que se había ido de casa y ahora solo eran el y sus padres.

Desde pequeño había sufrido mucho, económicamente y demás, sus padres se esforzaban trabajando para poder pagar sus estudios, y desde ahí, el mismo se dijo que no volverían a sufrir, sin importar que, el lograría obtener su título y graduarse con honores.

Ese era un hecho, no volvería a pasar por lo mismo, ni mucho menos dejaría que sus padres volvieran a vivir de aquella manera, quería que tuviera una buena vida y el lograría darselas.

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El timbre sonó, aquel que anunciaba el inicio de clases. Claramente Checo iba tarde, muy tarde, ya no era su primer día de clases, ni su primer día fue así.

Este corría por los pasillos de la UNI, en su mente rogaba por qué su profesora aún no estuviera en el salón, pues sabía que si ella ya estaba ahí, no empezaría un buen día, era tan estricta que eso le ponía los pelos de punta y de alguna manera le causaba escalofríos.

Al llegar al aula, se sersorio de que la profesora no estuviera ahí, así que abrió la puerta entrando, para después buscar con la mirada a sus dos mejores amigos.

-Checo por aquí!- grito Charles, alzando una de sus manos para que Checo lo viera.

Al ver esto, Pérez apresuró su paso a dónde se encontraba Charles y también Carlos, que se encontraba a su lado, suspiro aliviado, daba gracias a que la profesora aún no llegaba.

-Buenos días chicos- saludo el de piel canela y sonrió al son de su saludo.

Estos le devolvieron la sonrisa y este se sentó al lado de Carlos y se acomodo, Carlos giro a mirarlo y pregunto.

-¿tarde de nuevo?- pregunto, alzando una de sus cejas.

-si...- dijo Checo avergonzado.

Charles negó con la cabeza divertido.

-al parecer de nuevo no escuchaste tú alarma- dijo Charles y rieron.

Checo ya no respondió, ya qué la profesora entro al aula, les dio un saludo, tan frío como ya era de esperarse, al parecer no era muy expresiva y las clases dieron inicio.

Las horas pasaban y para Checo era eterno, pues estaba demasiado cansado, y se sentía desmayarse, la noche anterior no comió casi nada, ni mucho menos durmió, por qué tenian un proyecto pendiente y no podía dejarlo para después o le sería más tedioso.

Pérez suspiro cansado y bostezo unas cuantas veces, para que los dos a su lado terminarán confirmando sus sospechas. Pues era obvio que no había dormido bien, desde que entró al aula y se acercó a ellos, se dieron cuenta de que algo andaba "mal", pues su cara estaba adornada por unas ojeras demasiado notorias.

-¿acaso no dormiste bien?- pregunto Charles, mirándolo preocupado.

-Si, pero no es nada, estaré bien- asintió el más bajo, sonriendo.

-¿estás seguro?- ahora pregunto Carlos.

-enserio, no se preocupen por mí- les sonrió cálidamente a los dos, para después seguir poniendo atención a la clase.