el Sultán Murad al enterarse de todos los planes de la esposa de su padre mando a asesinar a todos los aliados de la esposa de su padre y de nuevo le mando una carta diciendo: te lo dije no podrás derivarme la próxima vez que intentes hacer algo contra mi te asesinare a ti y a toda tu familia la sombra que se desvanece en el palacio,
Tus susurros en la oscuridad han llegado a mis oídos, y tus aliados ya no son más que ecos del pasado. Como te advertí, aquellos que buscan mi caída solo encontrarán la suya.
No subestimes la extensión de mi poder ni la profundidad de mi alcance. He demostrado que no habrá refugio para los traidores, ni perdón para los conspiradores. La próxima vez que intentes urdir planes contra mí, recuerda el destino de aquellos que ya no están.
Que esta sea la última advertencia: si vuelves a amenazar mi reinado, no solo serás tú quien pague el precio, sino también aquellos que llevan tu sangre. La misericordia ya no tiene lugar en mi corte.
Con la resolución que me confiere mi corona,
Sultán Murad
