Part:7

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La esposa del Sultán Ahmed, enfrentada a una amenaza tan grave y directa, se vería sumida en una situación de desesperación y urgencia.

En la penumbra de su alcoba, la esposa del Sultán Ahmed sostiene la última carta de Murad. La furia y el miedo se entrelazan en su pecho, pero es la determinación la que se refleja en sus ojos. La enfermedad que aflige a su familia es un golpe cruel, pero no será el que la derribe.

"Esto no es más que una tormenta pasajera," se dice a sí misma con una voz que intenta ser firme. "Y yo soy la roca contra la cual las olas se rompen."

Con una resolución forjada en las pruebas de la vida en la corte, ella convoca a sus consejeros más leales. Juntos, comienzan a trazar un plan, no solo para encontrar una cura para el veneno que aflige a su familia, sino también para protegerse de futuros ataques y, si es posible, para dar un giro a la situación a su favor.

"Murad cree que ha ganado," les dice a sus aliados, "pero en su arrogancia, ha dejado ver su propia vulnerabilidad. Ahora es el momento de actuar, con astucia y rapidez."

La esposa del Sultán Ahmed sabe que el tiempo es esencial y que cada movimiento debe ser calculado con precisión. La lucha por el poder en el imperio otomano está lejos de terminar, y ella está decidida a jugar su parte hasta el final.

Sultán MuradDonde viven las historias. Descúbrelo ahora