2. juan de tercero

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Esteban se despierta a las 6:00 de la mañana todos los días, teóricamente debería levantarse media hora antes, pero vive a lado de su escuela así que no lo hace.

Su rutina es sencilla, son solo dos pasos: levantarse y sufrir.

(A su psicóloga no le gusta que diga eso.)

Se lava los dientes frente a su espejo, y se acomoda el pelo, todo lo hace rápido, intentando verse lo menos al espejo.

Se pone el uniforme, que es de su hermano mayor y que le queda grande por todos lados, los huesos de su cadera se clavan en la tela de su pantalón y sus costillas sobresalen por la camisa.

Se mira en el espejo de su habitación un segundo, a sus ojos hundidos y a su estómago cóncavo, se ve delgado, delicado, perfecto.

Pero no puede evitar pensar en que podría serlo aún más.

Se pone los vans que siempre usa y toma su sudadera del respaldo de su silla, la tela gris cae hasta el nivel de sus rodillas, es enorme y no tiene ni idea de dónde sacó pero le gusta.

Sale de su habitación y se encuentra a su hermano en la cocina, el olor a comida le llega a la nariz y se le vuelve agua a la boca, el hambre devorandolo de adentro hacia afuera.

"Te hice tu merienda Kuku, para que comas en la escuela" Enzo se da la vuelta y le muestra su comida, guardada delicadamente en un tupper de un mono, son fresas cortadas y un sándwich de jamón "Es saludable, para que no te preocupes por las calorías"

Enzo le sonríe, con la amabilidad que su hermano siempre ha tenido dentro, su corazón se encoge con culpa, no puede comer eso, necesita seguir su plan.

Necesita seguir como está.

Aún así toma el contenedor y lo mete en su mochila, sentándose en la mesa del comedor cuando su hermano sale con dos mates y una medialuna.

"En la tienda me dijieron que es baja en calorías" Le dice Enzo cuando ve la mueca que hace al ver la factura, el asiente y la rompe en pedazos.

"Gracias"

Enzo le sonríe y bebe de su mate mientras ve su celular, Esteban mueve los pedazos de un lado a otro, dando un sorbo del mate, no quiere desperdiciar la comida, pero no quiere comerla aunque tenga hambre.

"¿Me podés llevar hoy?" Le pregunta, tomando más mate para engañar a su estómago.

"Si, claro ¿También pasamos a recoger a Fran?"

"No, su papá lo va a llevar"

Enzo asiente y se levanta, rebuscando en su mochila, Esteban admira a su hermano mucho más de lo que le ha dicho, es todo lo que el aspira a ser,  es guapo, tiene una relación estable con un chico increíble, calificaciones buenas, amigos y no tiene problemas.

"Vas a llegar tarde si seguís pensando" Enzo se ríe, suave, Esteban asiente con las mejillas sonrojadas por la vergüenza y se levanta, la mochila colgada de uno de sus hombros.

Duerme el camino de su casa a la escuela, son menos de 10 minutos pero no puede mantener los ojos abiertos, baja del auto y no piensa en nada hasta que llega a su sala.

Ya están casi todos sus compañeros, sus amigos están sentados en el fondo, en los asientos de la esquina contra la ventana, el se dirige hasta el suyo en silencio.

"Les traje de merendar" Dice cuando se sienta finalmente, la cabeza de Pipe salta de su silla donde había estado haciendo quien sabe que y extiende su mano.

Saca el tupper de su mochila y se lo da y ve rápidamente como su grupo de amigos se junta para comer lo que le preparó Enzo.

"Que rico que está el sandwich ¿Eh?" Le dice Fran, con medio pedazo dentro de la boca, el no cree que este tan bueno, es solo jamón y mayonesa pero sabe que lo hace para que también quiera comer.

No lo hará, no lo van a convencer.

"Hablando de cosas ricas ¿Vieron que la vieja de lengua está embarazada?"

"¿Posta?" Pregunta Pipe, tiene los dedos manchados de rojo y sus labios brillan por el jugo.

"Posta, viste que te dije que era re atrevida, me enteré que la embarazo este de tercero ¿Cómo se llama?"

"Juan"

"Si, ese, pero el de tercero, yo no, aunque hubiera querido"

"Juan Caruso"

"Medio desubicado lo que dije, pero está re buena la vieja, lo juro"

"Gracias por sus comentarios señor Caruso"

"Uy"

Esteban se muerde la lengua para no reírse, su profesora está al frente de la sala, con las manos en las caderas y mirando horrible a Juani.

Francisco a diferencia de él, se caga de risa, su voz resuena por toda el aula y otros chicos con los que apena ha hablado se rien con él.

"Para matar estos chismes, si estoy embarazada, pero de mi esposo Juan y su compañero no tene nada que ver acá" La mujer se cruza de brazos, se ve enojada y Esteban sabe que lo está, guarda silencio, jugando con su pulsera "Con su permiso, voy a llevar a su compañero a rectoría"

Juan los mira, con los ojos bien abiertos y preocupado, Esteban vuelve a querer  reirse pero no lo hace, no es lo adecuado en esa situación, en cambio Francisco si lo hace.

"Por cagón Juani"

Entonces si se ríe, se ríe hasta que le duele el estómago y Fran lo hace con él, Pipe que tiene las manos manchadas por el jugo de sus fresas golpea a Fran en el hombro y se siente bien.

"Puto Juan de tercero"

Les dice Juani antes de tener que levantarse y irse, Esteban se ríe.

karmadame | esteban x franciscoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora