Adicto a ti / S2

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Habían estado bailando y bebiendo, el ambiente era divertido y un poco provocador. Caminaron a tropezones hasta la habitación que les tocaba, pasaron frente a la habitación con el número 69 y Angel no se resistió.

¿Seguro que este no es nuestro cuarto?... –agarrando al rey de la cintura y caminando con el moviendo su cintura de forma provocadora-

No lo es... pero si sigues provocándome este pasillo será nuestra habitación... -llevaba una botella y un par de copas mientras caminaba-

Mhhh atrevido... eso me gusta... -sus manos se deslizaron a los botones de su camisa desprendiendo uno de ellos, siguieron caminando hasta llegar a la habitación- 42? Mmhh también es un buen numero... -miro de reojo al rey quien no sabía el significado del número, ambos entraron al cuarto. La estrella le quito de las manos las copas y la botella mientras el rey cerraba la puerta. -

Estoy un poco cansado... -reía- hace tiempo no venía a una de estas fiestas... -puso su mano en su propio hombro y se dio un masaje-

Se ve muy tenso majestad... deje que haga magia con mis manos... -comenzó a hacerle un masaje en los hombros y la cintura- Eso es, relájese... -comenzó a quitarle la camisa- déjeme darle placer... -lo llevo a la cama y lo acostó boca arriba en esta mientras acariciaba su cuerpo desprendió sus pantalones-

Angel... -lo atrajo sobre él y le dio un apasionado beso con su lengua, sus manos se deslizaron por el cuerpo de la araña aflojando su vestido. El cuarto tenía un dulce aroma que los invitaba a explorar sus cuerpos. Angel estaba sobre la entrepierna del rey, se quitó el vestido por arriba dejando su delgado cuerpo expuesto al rey-

Sería una lástima manchar el vestido... -pasando su lengua por el cuello del rey- pero puede mancharme a mi... -susurro mordiendo su cuello con firmeza, Lucifer se aferró a la cintura de la araña mientras Angel estaba sobre el- Disfrute de mi veneno majestad... -miro a un lado de la habitación y vio varias correas y collares. Lucifer siguió su mirada y vio los objetos-

Se ven tentadores... -le dio una sonrisa a la araña que le sonrió también- ¿quieres usar alguno?...

No tengo deseos de correas hoy, pero me gustaría ver una en su cuello majestad... -paso la yema de su dedo por el cuello de este. Lucifer hizo aparecer un collar con cadena en su cuello, sin dudar Angel tomo la cadena. - Su expresión es deliciosa majestad... -Lucifer sonreía sonrojado al sentir como la cadena era jalada-

Me enciendes Angelito... -sus cuernos y su cola habían salido- déjame mostrarte cómo se siente el cielo... -Lucifer saco su larga y bípeda lengua- 

Cinco días en el paraísoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora