Th-te vi aquella noche con el y te compre con un solo y único motivo. Mi plan era simple, no enamorarme de ti y falle
In-no esperaba nada, mi espíritu estába marchito y yo estaba muerta en vida hasta que llegaste. Hasta que me llamaste... Mon Chéri...
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▭▬
—Taehyung—
8:00pm
En las cuatro paredes del salón privado de mi club las manesillas del maldito reloj en la pared me quebraba la cabeza con cada segundo que marcaban. La tapa de la pluma en mi mano subía y bajaba frenéticamente y pese a escuchar multiples voces pasando por mis oídos mi mente en este jodido momento no era capaz de retener ninguna de las palabras dichas al aire hasta que mi nombre resonó en todo el lugar
—Taehyung ¿algún problema?, en todas estas horas has permanecido callado—dijo uno de los extranjeros
—ninguno que no pueda solucionar
—entonces volviendo al tema, ¿que te parece nuestra oferta? tu museo es la joya de todo Corea y con nuestra ayuda tendrá más valor y prestigio en el extranjero, así podrias
—mi museo ya tiene el sufiente valor y prestigio dentro y fuera del país—respondi un tanto molesto—millones de extranjeros vienen a admirar su belleza y las obras que se exiben en el
—lo sabemos, pero no todas las personas saben la verdadera belleza que albergan en su interior todas y cada una de esas obras. Hay extranjeros que están interesados en traficar contigo, hacerse tus socios y eso claro me incluye.—sonrio—Solo piénsalo, te podría dar a las mejores mujeres, tendrías a cientos de hermosas a tu disposición cuando y donde quieras, todas echas unas completas sumisas
Me fue imposible no reír ante dichas palabras, solté la pluma con cierta fuerza dejándola caer sobre el escritorio circular de mármol logrando así que todas las miradas se posaron directo en mi
—no me interesa trabajar con hombres que estén involucrados en el trafico de mujeres, ellos, todos ellos son una mierda y tu
—Taehyung, piensa bien lo que vas a decir—susurro Jackson quien se encontraba a mi lado derecho con la intencion de hacerme guardar la calma
—estas insinuando que yo
—no estoy insinuando nada, solo estoy diciendo lo que en verdad eres, a donde en realidad perteneces—dije y aquel hombre se puso de pie mirandome con completa molestia por un par de segundos para después mostrar una media sonrisa
—en ese caso tu también perteneces a esta mierda—declaro y mi rostro neutral cambio por completo—todos aquí estamos enterados de que tu compraste a una chica hace poco—sonrio—y eso, te hace parte de esta mierda, Emperador.
