───¡Tengo hambre!─── dijo menciono toru con pereza mientras se aferraba a tus piernas.
─── solo dame un minuto, ya está la cena─── dices con una pequeña sonrisa.─── pero quiero galletas─── dijo haciendo muecas con sus labios.
─── aún no bebé, después de comer─── finalizas, el albino continúa quejándose mientras está a tú lado, habías hecho galletas y un pure de brócoli.
Le decías a satoru que era un pure de Hulk o de lo contrario no se lo comería, habías invitado a tú padre a cenar ya que vivía solo y debía cocinarse a él mismo.
─── cariño ¿Puedes llevar los cubiertos a la mesa?─── preguntas con una sonrisa amable, satoru particularmente no tenía tareas pero se notaban hambriento y aburrido
El niño suspiró con fastidio, odiaba estar a solas con su abuelo, solía molestarse por todo.
Con delicadeza retiro los cubiertos de tú mano y se dirigió al comedor, su abuelo tomaba una taza de té, mientras sus lentes se nublaban por el vapor.
Leía tranquilamente el periódico─── finalmente el rey de esta casa ha hecho algo───dijo con sarcasmo, no había despegado sus ojos del papel pero podía sentir la energía maldita de su nieto.
Con fastidio el más pequeño arrugó su pequeña nariz, colocando de forma rápida los cubiertos sobre la mesa para volver a la cocina, delicadamente coloca los cubiertos de su mami y los suyos.
Deja a un lado los de su abuelo como si no fuese importante, para él no lo era.
El mayor solo suspiró, no era su hijo, era simplemente su nieto pero su hija consentía mucho a él pequeño.
Era bastante grosero con las personas, era el más fuerte,en algún momento de su vida debía coger ese rol como la cabeza del clan gojo, para su muy corta edad de 4 años era arrogante, maleducado y mimado.
─── ya es hora de comer─── dices con una sonrisa juguetona cogiendo el recordete moflete de satoru, era un niño muy delgado pero su pequeño rostro es muy regordete, especialmente sus mejillas.
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Eran rositas y gordas, aveces deseabas morder sus mofletes, te recuerdan a los Mochis.Un dulce tradicional de Japón.
De forma cuidadosa coges la olla con el puro de brócoli, alejas cuidadosamente a satoru para evitar que se queme.
Te diriges a el comedor para ver a tú padre───lamento la tardanza─── colocas el pure sobre la mesa.───no te preocupes───dijo con una sonrisa comprensiva.
───huele muy bien ¿Que has preparado?─── preguntó.─── he preparado puré de brócoli y satoru me ha ayudado───presumes con orgullo.
Toru sonríe en grande, el mayor frunce el seño.───¿Satoru te ha ayudado a cocinar?─── preguntó con rareza.
─── sí, ¿Por qué?─── preguntas ladeando tú cabeza ante su pregunta y su cambio de actitud.
El mayor nego y suspiro con frustración por tercera vez─── cariño se que no es mi hijo y debes ser tú quién lo crié como se le de la gana pero cocinar solo se le da bien a las mujeres ¿Entendes?─── dijo haciendo una pausa.
─── cocinar es solo labor de las mujeres, también he notado que tratas a satoru con delicadeza, él es un hombre no una mujer para ser tratado con delicadeza, sí continúas así se volverá un marica─── en ese momento tu sangre había comenzado a calentarse.
Satoru observa a su abuelo con incredulidad, aparentemente estaba diciendo cosas malas sobre él pero no sabía cuál era el significado de marica.
Agachas un poco la cabeza y coges la mesa con un fuerte agarré, toda tú vida habías sido una mujer muy tranquila y pacífica pero eso te había cabreado como nunca, eso te había tocado los cojones.
Y encima continuo hablando─── papá─── dices de forma tosca haciendo callar a él mayor, el hombre abre los ojos al ver el tono de voz de su hija, nunca había sido tan cortante.
───¿He dicho algo malo?─── preguntó, inmediatamente señalas la puerta.─── marchate ─── no permitirías que NADIE venga a tú casa a insultar a tú hijo, está era su casa.
No vas a permitir que alguien te diga como criar a satoru, él realmente no sabía nada, solo miraba a satoru una vez por semana y tú todos los días era un niño bueno y no vas permitir que alguien te diga lo contrario.
───¿Que?───preguntó confundido pensando que es una broma.─── ella se ve muy enojada─── pensó preocupado.
───¡largate!─── dices levantando la voz.───¿Por qué?¿Que ha sucedido?─── habías dicho muchas cosas ¿Que es lo que te ha cabreado?
───¿Te burlas de mi en mi cara?─── preguntas molesta.─── has venido a mi casa a decirle maricon a mi hijo, tú nieto─── nunca habías estado tan cabreada como hoy, tús palabras habían salido del corazón.
───¡no permitiré que nadie llame así a mi hijo!¡Aún es un niño y si en algún momento cuando crezca y sea un hombre me dice que le gustan los hombres le apoyaré!─── de forma suave comienzas a darle suaves empujones hacia la puerta.
Satoru observaba todo sin saber que hacer o dicer.─── mami está muy enojada─── pensó, una pequeña sonrisa se formó en su labio, una mujer tan pequeña había logrado asustar a un hombre tan grande como su abuelo, solo por él.
Sin duda alguna no necesitaba un papá su mami cumplía dos roles a la vez.
