XIX

17 3 8
                                    

El lugar del campamento era hermoso, en medio de árboles enormes, no muy lejos estaba el arroyo y un prado amplio con brisa agradable.

Si sin duda un lugar maravilloso para pasarla en familia, aún mejor al no haber nada de gente en aquella zona.

.
.
.
.
.
.

Bueno para unos malos para nuestra estrella, quien en solo un día noto la diferencia entre el y su familia, sus abuelos querían descansar después de un viaje tan largo, los padres no eran tan divertidos que digamos y los chicos..... Bueno.

Gwen no se separaba de sus libros, Kevin solo se consentraba en su auto pues ahora que Ben tenía poderes extraños debía proteger a su preciado auto.

Y ahí estaba él, en aquel arroyo totalmente aburrido, con frustración se dejó caer en el pasto soltando un suspiro de irritación.

-¿Aburrido estrella mía? -una voz se escuchó no muy lejos, Ben mira a su lado derecho y hay estaba un joven sentado a su lado mirándolo directamente, los ojos verdes de Ben se encontraron con los rubys del contrario.

-¿Te conozco? -pregunto Ben con curiosidad.

-algo así estrellita, soy Kcald la oscuridad -dijo el joven dándole una cálida sonrisa al chico.

-¿El demonio que se caso con el dios Terra? -pregunto Ben impresionado.

-asi es estrellita, aunque no soy un demonio pero lo dejaré pasar está vez -respondio Kcald con una risita de estar Terra presente seguro hubiera habido una sería reprimenda, pero este no era el cado además el chico le daba mucha ternura, pero primero era lo primero -ahora dime ¿Porque esa cara tan larga estrella? -pregunto mientras jugaba con sus pies moviendo los de un lado a otro.

Muchos creen que la oscuridad debe ser fría, desoladora, malvada, pero no al menos la oscuridad de este mundo no lo era, al contrario, Kcald fue cálido, escucho atentamente hasta el más mínimo detalle de lo que Ben le contaba, fue tan agradable.

-estrellita no deberías estar viviendo esto, naciste para dar felicidad y recibirla, lo más importante para los mortales debería ser mantenerte feliz -dijo Kcald acariciando con cariño los mechones castaños del joven, dejando unos polvos rojos que se combinaron con los ojos verdes -cuando tu lo decees solo debes gritar desde el fondo de tu corazón "ya no quiero estar aquí" y mi madre mandara por ti -mucho o poco importaba la respuesta de Ben, igual Kcald ya había echo lo que su marido le pidió, podrá ser una de las entidades más pacíficas pero si familia era primero, además no era conocido por rebelde, todo lo contrario era obediente a todo lo que su amado Terra le dijera.

-muchas gracias oscuridad -dijo Ben pero para cuando terminó Kcald ya había desaparecido.

Ben quería volver con su dios, igual que cualquier estrella en su situación.

Pero....... No se iría sin Rook, si lo hacía él terminaría casándose con Rayona y no, eso no podía pasar, Rook era solo suyo y con ese pensamiento se sentó en el cesped, Rook, su Rook era la persona que invadia sus pensamientos de una y mil formas.

"¿Y que haces en este lugar si deberías estar con él?" La voz de la lujuria llegó a sus oídos, el pensamiento tentador de salir volando para ir con su amado y llevárselo a donde solo pueden ir los seres como él.

Pero no podía hacer eso, su familia, sus amigos, su promesa con su abuela.

"Deja eso de lado ¿Acaso crees que ellos cumplirán su promesa? Pues no niño, no lo aran, todo lo contrario, solo mírate ahora estás aburrido, solo, ellos no saben cómo hacerte feliz aquí no podrás ser libre, no vas a reír y jugar, vamos hazme caso y regresa a dónde verdaderamente fuiste feliz" Era tan tentador....

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 01 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

~•PECADOS•~ (BEN X ROCK)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora