¡Atras, Edificio andante! ➸ NamGi

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—Esto de venir a la escuela sin Tae es más aburrido de lo que pensé—confeso Jimin mientras terminaba de elegir lo que comería, antes se hubiese preocupado por las calorías y por la cantidad, pero con el tiempo y los claros regaños de sus amigos estaba aprendiendo a vivir sin preocuparse por todo.

—Ya lo se mio, pero no hay de otra, yo pensé que su pai lo dejaría quedarse, pero ya paso una semana desde que se fue—Hoseok por su parte podía llenar dos bandejas y comérselas sin problema, podía comer sin engordar nada así que aprovechaba ese poder al máximo.

—Ni siquiera un mensaje de llegada, pero me imagino que ha de estar ocupado aprendiendo del país donde tendrá que vivir un tiempo—Yoongi dejo su bandeja en la mesa que eligieron para desayunar, comía lo que era necesario y nunca faltaba su novio poniéndole más comida cada que podía.

Su novio. Que bien se escuchaba esa palabra.

Su vida se detuvo cuando su padre falleció en aquel accidente donde se llevó parte de su vida y casi toda la de su madre, la luz de ambos se apagó cuando su casa quedo vacía y con el tiempo su voz, presencia y recuerdos se fue desvaneciendo, dejando pocas fotos como vivo recuerdo del vacío que sentían.

Ahora su vida volvió a avanzar, al igual que la de su madre permitiéndose el conocer a otra persona.

— ¿Y esa sonrisa de maniatico?

—Seguro es por Namjoon—se burló Jimin provocando un pequeño sonrojo en el pálido.

—No es por eso, par de metiches

—Ma jablador

Para confirmar su hecho ambos hermanos Kim se dejaron ver y Yoongi estaba seguro de que todo el que lo viera en ese momento podía asegurar que estaba claramente enamorado de aquel edificio andante.

—Y según tu no e por el

—Tu cállate, Jaebum aparece y se te prende hasta el alma

—Por lo meno no lo ando encondiendo como tu que lo ve como si fuera la comida que ma te guta

Yoongi maldijo su piel pálida en voz baja y lo obvio que se veía su sonrojo porque hasta Namjoon, desde donde estaba, podía ver a su pequeño novio muriendo de vergüenza mientras fingía no verlo de más.

—Y vienen pa aca

—No me digas lo obvio—gruño fingiendo que tenía algo muy importante en su plato más que comida a medio terminar.

—Hey chicos, ¿Como están? —Namjoon no dudo en sentarse al lado de su pálido novio quien ni siquiera levanto su mirada cuando llego y eso le mantenía una sonrisa, sabía que estaba avergonzado y como le encantaba. —Hola precioso novio, ¿Esta buena la comida?

Casi al instante el pálido estaba casi tosiendo el pulmón recibiendo palmaditas del más alto y risitas de sus amigos cómplices, ¿Qué mejor que ver a su amigo querer desaparecerse de la vergüenza?

— ¿Qué diablos haces, Namjoon? —susurro como si ya lo que este dijo al principio no fue más que suficiente para saber que por fin era oficial.

—Preguntándole a mi novio si esta bueno lo que come, pensé que era obvio—Namjoon sonrió disimulando lo divertido que era ver y escuchar como quería ser discreto.

—Deja de decir esa palabra

— ¿Novio? ¿Que acaso no somos novios?

— ¿Ya polfin son novios?

— ¡Un aplauso a esta pareja que está enamorada! —los estudiantes de aquella escuela eran unos metiches, pero ahora con el grito de Jimin su relación estaría rondando por todos lados.