Guerra fría. CHAELISA (GIP)

8. Tu me gustas.

POV Lisa.

No pude evitar preguntarle, no quería, necesitaba saber porque era como era conmigo.
-¿Porque eres así Rosie? ¿Que te he hecho para que me trates así?-Pregunte con todo el dolor disfrazado de calma.
No obtuve respuesta, Rosé ya estaba dormida, bese su cabeza y dormí.
Abrí los ojos, el cuerpo desnudo de Rosé pegado al mío, sus labios en mi cuello, sentí algo de baba y sonreí, por estar así de unida a ella.
Cuando Rosé despertó fingí seguir dormida, ahora parecía apenada por su desnudez, seco su boca y mi cuello, cuando intentó separarse de mi la detuve.

-Aun es temprano, y hoy es nuestro descanso.-Me queje y bese su cuello, Rosé parecía paralizada, ¿había estado mal para ella lo de anoche? Ahora yo me aleje para verla de frente.
-¿Te has arrepentido de lo de anoche? ¿Rosé que te he hecho para seas así conmigo? ¿Que he hecho para me trates así?-Rosé ni siquiera alzó la vista, solo estaba en silencio, me frustró su actitud, ya no podía con eso.
-¿Es que no me hablaras?-Dije levantándome de la cama, ni siquiera me apeno un poco mi desnudez, y busque la playera.

-Lisa, no es nada de eso.-Susurro.

-¿Entonces que es maldita sea?

-Lisa, tu me gustas, me he sentido asi contigo, no se desde cuando, solo se que en los conciertos es cuando más me delato, no puedo evitar sentirme así contigo, no solo me gustas Lisa, yo te quiero, intente alejarme de ti, no quería arruinar nuestra amistad.- Sus mismas preocupaciones eran las que me atormentaban a mi.

-Rosie, tu me gustas.-Me colocaba los bóxers, pero sentía como la sangre bombeaba por mi cuerpo hasta llegar allá abajo nuevamente, Rosé sonrió y se cubrió con la manta y sonreí con esa acción, casi gatee hasta ella y me senté en su regazo, y la bese, dejó caer la sabana dejando descubierto su delgado cuerpo, sonreí al verla y cuando ella se sonrojó, bese sus labios.
-Estamos igual.-Le dije quitando mi camisa y mis bóxer, me sentí como niña pequeña corriendo bajo las sábanas con ella.
Nuestros besos eran desesperados, ella mordió mi labio inferior y lo halo de una manera tan sensual, yo acariciaba sus delgadas caderas, cuando tenía mi pene en su entrada, llamaron a la puerta.
-Maldición.-Jadee deteniendo mi punta en su entrada.

-No hagamos ruido.-Me susurro subiendo sus caderas haciéndome entrar en ella, ahogue un gemido cuando sentí que había sido bien recibida por la rubia con sus paredes apretándome tome una almohada para que su cadera se elevara aún más, me permitió estar más profundo en ella.

-¿Están despiertas?-Jennie me provocó un gruñido.

-Ve al baño Lisa, Jenn no se irá de aquí.-Rosé rodó lejos de mi yo camine lo más rápido que pude a darme un baño con agua fría.
Cuando salí me encontré a Jisoo y a Jenn hablando con Rosé, su cabello revuelto y su rostro ligeramente rojo, se veía hermosa, cuando nuestras vistas se cruzando ella sonrojada desvió la mirada.

-Tomare una ducha.-Rosé buscó en su maleta ropa y entró al baño.

-¿Como van?-Pregunto Jenn, ¡mejor que nunca! ¡Y de nos ser por ustedes estaríamos mejor!

-Bien, supongo.-Me deje caer en la cama, amaba a ese dúo, pero justo ahora, las odiaba.

-Rosé se veía, feliz.-Sonreí como boba con esa afirmación de Jisoo.
-Y tu igual, ¿Que paso?-claro que no les diría lo qué pasó hasta que hablé con Rosé de nuestra situación.

-Es que no hay nada que contar,¿que haremos hoy?-Cambie de tema de inmediato.

-¡Vayamos por comida!-Grito emocionada Rosé secando su rubia cabellera con la toalla.

-Pero.

-¡Vamos!-Dije colocándole los tenis, ni siquiera le di oportunidad a Jenn de debatir, salimos a un restaurante cercano al hotel, afortunadamente estaba casi solo, lo que nos permitía platicar cómodamente.