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Edad: 6 años.

En una noche fría y despejada, una madre y su hijo de seis años viajaban en el auto, camino a una hamburguesería. El pequeño niño estaba emocionado por su invitación a comer sus hamburguesas favoritas y miraba fijamente a su madre, quien había acabado de regresar del trabajo como policía. Mientras viajaban alegremente por la ciudad, una repentina tormenta comenzó a descargar un fuerte chaparrón. La madre, asustada por las condiciones climáticas peligrosas, decidió regresar a casa en vez de seguir al restaurante. Pero en el camino, un camión de pasajeros se deslizó hacia el auto de la madre y los impactó. El accidente produjo una gran impactación en el auto, donde la madre quedó inconsciente y el pequeño niño pudo escuchar el leve sonido del silbido de una válvula del auto despedazado. Horrificado por el accidente y por las lluvias torrenciales, el pequeño niño intentó despertar a su madre con manos temblorosas y lágrimas en su cara. Mientras el niño se esforzaba por despertar a su madre, un fragmento de metal se encajó en sus ojos. El dolor repentino y agudo le hizo gritar de dolor, lo que le impidió ver debido al llanto y la intensidad de la herida. Sin embargo, a pesar del dolor y la pérdida de visión, Jimin continuó sus esfuerzos para revivir a su madre. Mientras el tiempo iba transcurriendo, la lluvia continuaba arreciando, inundando el suelo y empapando la carretera. Desesperado, Jimin gritaba por ayuda, pero sus gritos se ahogaban entre los fuertes estruendos del agua y el aire. Por fin, después de una larga e incierta espera, una ambulancia se detuvo al lado del carro accidentado, seguida por una patrulla. Los paramédicos desesperadamente intentaron sacar a la madre del auto destrozado y la llevaron a la ambulancia. En tanto, uno de los oficiales se acercó a Jimin para ayudarlo, y se sorprendió al encontrarlo herido y sin visión. El niño fue llevado al hospital, donde recibió atención y cuidado médico mientras su madre estaba en la sala de operaciones.
Durante la operación, la madre de Jimin sufrió complicaciones y, finalmente, trágicamente, falleció de sus lesiones. Jimin, inconsciente en su propia habitación del hospital, no fue informado de la muerte de su madre hasta que los médicos consideraron que estaba lo suficientemente fuerte para soportar la noticia. En el día siguiente, cuando Jimin despertó, recibió la noticia de la muerte de su madre. En medio de un intenso dolor y con lágrimas en sus ojos, Jimin se quedó en silencio durante varios minutos mientras procesaba la noticia y luego rompió a llorar. -Mamá, dónde estás?-murmuró Jimin en medio de sus sollozos. -Te extraño tanto Mamá, ¿dónde estás?-murmuró Jimin en medio de sus sollozos, su mano temblorosa se colocó sobre sus ojos vendados. -Te extraño tanto. ¿Por qué me abandonaste?-Jimin se quedó un tiempo en el hospital para recibir atención médica y terapia. Pasaba el tiempo en silencio, envuelto en su propia pena. Lo único que tenía eran sus recuerdos de su madre y su vida anterior. La idea de retornar a un hogar vacío, sin la calidez y la seguridad de su madre, le parecía algo que simplemente no podía afrontar.
Mientras Jimin se recuperaba, su tía y su padre se encargaron de hacer los preparativos de velar y enterrar a su madre. Fueron días duros y tristes, y el joven niño se mantuvo en silencio durante todo el proceso. Una semana después del funeral de su madre, Jimin regresó a casa, ahora a cargo de su padre y su tía. Su hogar no era el mismo sin su madre y, para hacer las cosas peores, no podía caminar por las habitaciones sin chocar con cosas debido a su ceguera. A medida que pasaban los días, su padre y su tía se dieron cuenta de que algo tenía que hacerse. De manera que, después de un extenso debate, se decidieron a enviar a Jimin a una escuela especial para niños discapacitados visuales. Era una decisión difícil, pero sabían que era necesario para el futuro de Jimin. Era claro que necesitaba aprender cómo vivir su vida con su nueva discapacidad y se necesitaba un ambiente especializado para ello. Con lágrimas en sus ojos y un nudo en su garganta, Jimin llegó a su nueva escuela, llevado por su padre y su tía. La escuela tenía un aspecto amable, pero él no podía sentir el calor de su hogar. Estaba asustado y preocupado por la nueva etapa en la que se disponía a adentrarse. Jimin empezó a hablar con otros niños en el colegio y hacer amigos, aunque seguía sintiéndose un poco aislado. Después de un tiempo, empezó a sentir que estaba empezando a encontrar un poco de solaz en su nueva vida. Mientras que Jimin empezaba a sentir que se estaba adaptando, seguía luchando con la pérdida de su madre y de su visión. Tenía pesadillas casi todas las noches y estaba deprimido mucho de los tiempos. Aun así, seguía trabajando duro en su educación y empezó a dominar las técnicas de la orientación y la movilidad. -Jiminie-dijo un chico de su clase -namjoon hyung- dice jimin.
-¿Qué pasa, Namjoon hyung?-dijo Jimin, girando su cabeza en dirección al sonido de la voz. -¿Cómo estás hoy?- preguntó Namjoon, acercándose y agarrando el brazo de Jimin con una sonrisa. Namjoon movió su mano hacia el brazo de Jimin y le tocó la palma. A pesar de su sordera, podía comunicarse usando un aparato que le permitía escuchar. -¿Por qué no te distraemos con algo? ¿Quieres jugar algo conmigo?-preguntó Namjoon con un tono amable. Jimin se quedó callado por un momento, considerando la oferta de Namjoon. Aunque estaba triste, también le hizo sentirse menos solo. -¿Qué podemos hacer? ¿No es difícil jugar cuando no puedes ver?- dijo Jimin con cautela. -¡Tranquilo, seguro que haremos algo divertido!-
Jimin sonrió ligeramente y asintió. -Suena bien. ¿Quieres que practiquemos con los bastones blancos? Puedo sentir tu toque en el brazo, pero también podría sentir la dirección donde estás-dijo Jimin. Namjoon apretó el brazo de Jimin, animándolo, -¡Sí! ¡Los bastones blancos serán geniales!- Jimin se dio cuenta de que sus manos estaban sudorosas, esto era algo nuevo para él. Sin embargo, confiaba en Namjoon. -¿Podrías ponerme uno de los bastones en las manos y mostrarme cómo se utilizan?- dijo Jimin con cautela.
Namjoon se puso de pie, tomó un bastón blanco y lo puso en las manos de Jimin. -Aquí tienes uno- dijo Namjoon con un tono amable. -Así es como lo hacen. Prueba a balancearlo de un lado a otro para sentir su resistencia y empujarlo contra cosas para saber dónde estás- Namjoon tocó su bastón blanco con su mano libre y lo hizo balancear de un lado a otro. -Los bastones blancos te permiten sentir tu entorno. Puedes explorar el espacio alrededor de ti y detectar obstáculos y obstrucciones- dijo Namjoon mientras practicaba. -Intenta esto ahora-Jimin tomó un poco de tiempo para adaptarse, luego giró su bastón blanco para balancearlo. Se tomó su tiempo, aprendiendo cómo hacerlo y aprendiendo a sentir el espacio que tenía alrededor. -¡Esto es impresionante!-dijo Jimin con entusiasmo. -Puedo sentir las cosas a mi alrededor- Esto es impresionante!- dijo Jimin con entusiasmo. -Puedo sentir los objetos a mi alrededor. ¡Me siento como un superhéroe con unos sentidos superdesarrollados!-Dice feliz. -Sí, ¡y si puedes dominar tu habilidad con el bastón blanco podrás hacer mucho más que solo evitar obstáculos!-dijo Namjoon con un brillo en sus ojos. -¿Quieres probar a caminar alrededor de la sala con el bastón blanco?-Jimin estuvo de acuerdo con Namjoon y, después de tomar unos pasos lentos y precavidos, aprendió a caminar con el bastón blanco. -¡Estoy haciéndolo!-dijo Jimin con entusiasmo. -¡Esto es increíble!- Jimin y Namjoon pasaron horas practicando con los bastones blancos y aprendiendo sobre la orientación y la movilidad. A medida que pasaban los días, Jimin aprendió que puede funcionar a pesar de su ceguera y que podía hacer muchas cosas sin ver. En solo unos pocos meses, Jimin ya pudo caminar por el colegio con su bastón blanco y aprendió poco a cómo leer Braille.










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Holaaaa primer capítulo, espero les guste mucho y que puedan apoyar y compartiendo con sus amigos, me ayuda mucho. Espero les guste mucho esta historia.

Eyes •Kookmin•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora