Trece ☁︎

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Estaba preparándome para ir a la sala de ensayo, la lluvia de ayer había desaparecido y hacía calor.

Sobredosis de TV de Soda Stereo sonaba de fondo mientras elegía qué ponerme.

No había canción que no me haga recordar a Julian, la amaba y ahora más todavía porque me hacía recordarlo, aunque eso dolía de cierta forma.

Mi cara se puso seria, abrí la ventana y me senté sobre mi escritorio que estaba frente a ella mientras prendía un cigarrillo para poder distraerme un poco de mis pensamientos.

- Ahora fumas? - su voz sonaba tranquila, siento que lo invoco con cada pensamiento que tengo sobre él.

- De vez en cuando, trato de no hacerlo muy seguido, ah, la próxima NO ME ASUSTES ASÍ JULIAN.

Soltó una carcajada larga mientras yo lo veía de forma seria.

- Qué estás escuchando?

- Buena música, algo que vos no conoces.

- Uy que odiosa, dale, qué es?

- Soda Stereo, magia pura, un viaje de ida, no volves más - la emoción se hacía presente en mi voz, es una de mis bandas favoritas del mundo.

- Me prestas el cd? Me gustó, bastante - decía mientras se acercaba a mí y me analizaba mientras yo cantaba la canción.

"Estoy desesperado,

soy tan vulnerable a su amor"

- Puede ser, puede ser.

- Y qué puedo hacer para que ese puede ser se convierta en un sí?

Se había sentado en la silla frente a mis piernas y apoyado su codo sobre la fría madera del escritorio para finalmente poner el mentón en la palma de su mano y mirarme expectante, como si quisiera analizarme hasta el alma.

"Sus rasgos son escombros,

detienen mi respiración"

Estaba tratando de seducirme, y lo iba a lograr, necesito huir de ahí.

- Tal vez prestandome uno tuyo, recomendación por recomendación, que te parece? - Por qué le propuse lo mismo que a Nick el día que nos conocimos? Igual nunca lo hicimos.

Salté del escritorio, apagué el cigarrillo a mitad terminar, lo tiré por la ventana y me dirigí a mi clóset.

Parecía una inocente charla, lo sería si estuviese hablando con cualquiera de los chicos, con Julian, la inocencia no existía, todo iba a un nivel más, totalmente secreto.

Empecé a revolver mi ropa de forma rápida, tratando de buscar algo que ni siquiera yo sabía qué era mientras lo escuchaba acercarse a mí.

- Estás muy linda, Beck - nadie me había llamado así en mucho tiempo, solo Albert lo hacía frecuentemente cuando éramos niños, ahora ya no tanto.

"Sobredosis de TV,

no creo poder resistir"

Su mano acariciaba mi hombro y yo trataba de esquivar su mirada.

- Vos igual, Jules - nuestros ojos se hallaron, logrando una conexión perfecta.

"Mi cuerpo procesado,

al ritmo de su corazón"

Me alejé casi corriendo hacia la cama, rompiendo el cálido espacio que se había creado entre nosotros. Quito el cd del reproductor, lo guardo en su respectiva caja, me acerco a Julian, el cual no había despegado su vista de mí y se lo entrego.

- Cuando lo termines decime qué te pareció, si querés saber lo que dicen las canciones avisame y te las escribo.

- Cuál es tu favorita? - preguntó mientras analizaba la portada.

- La que estábamos escuchando ahora, ésta - la señalo en la parte de atrás del disco, solo quería que la escuche y piense en mí, así como yo pienso en él al oírla.

Había sacado el disco pero la canción seguía reproduciéndose en mi mente sin parar.

"Acuéstate, levántate,

no puedo seguir así"

- Entonces quisiera tener la letra de esa, si no es molestia - dijo un poco tímido, su mano buscó la mía hasta encontrarla, agarrándola de manera suave y dándole dulces caricias mientras me miraba sonriendo.

Cuando el aire parecía que había desaparecido de la habitación y la distancia entre ambos se nos veía infinita, escucho pasos rápidos subir la escalera.

Me alejo y envío mi cuerpo hacia al desorden de ropa detrás mío, sacando un vestido al azar.

- Hola linda, como estas? - la cara de Nick se había formado seria al terminar su oración, no contaba con la presencia de Casablancas en mi habitación - Hola, Jules, que haces acá?

- Vine a buscar un cd que Becca me había recomendado - su voz se había apagado y se dirigía despacio hacia la puerta, mirando a Nick con la misma seriedad que él lo estaba viendo.

- Cuidalo, son como sus hijos - dijo mi novio mientras se acercaba hacia donde yo me encontraba parada mirando la situación.

- Sí, por supuesto - Nick seguía viendolo mientras apoyaba una de sus manos en mi cintura - ahora busco el tuyo y cuando lo encuentre te lo doy, Beck, nos vemos - terminó de decir y salió de mi habitación para entrar en la suya y dar un portazo.

- Qué le pasa a ese - dirigió su vista al vestido que tenía en mis manos - ese vestido te quedaría hermoso - dejó un suave beso en mis labios y se acostó en mi cama - cambiate rápido así vamos yendo, quiero pasar a ver unas cosas antes.

Asentí y fuí al baño, me miré al espejo sin creer lo que había sucedido.

"No puedo, no puedo, seguir maquinandome"

Something - Julian CasablancasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora