Mi camelia, mi copo de nieve

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—Jeon Jungkook —el hombre caminó alrededor del alfa atado, respirando fuerte y con sangre cayendo por un costado de su cabeza—. Tú... tú mataste más de la mitad de mis tropas.

Jungkook no dijo nada, manteniendo los ojos cerrados.

—¡Jeon Jungkook está frente a mí! ¡El mismísimo Jeon Jungkook! —se rio histéricamente, estaba condenado a morir, pues, perdía mucha sangre.

—Destruiste a mi hijo.

El alfa ni siquiera se estremeció, tenía los brazos atados con fuerza.

—Tú... tú lo regresaste a mí como un hombre diferente —tosió, escupiendo sangre. Moriría pronto.

Aunque el hombre no lo percibía, Jungkook podía escuchar a sus tropas acercarse.

—Tuve que matar a mi propio hijo porque lo desfiguraste, no podía hablar o comer —el alfa escuchó una cadena de metal—. Jeon Jungkook, el líder del Sector de Tortura... ¿Alguna vez has sido torturado?

No respondió, preparándose para lo que venía.

—Voy a atormentarte hasta mi último aliento —el hombre se acercó a su oído—. Vas a suplicar por mi perdón, aunque eso me cueste la vida.

[ . . . ]

—Quiero ir con mami.

—Tu madre aún está con el doctor, tenemos que esperar.

Minsoo sostenía un juguete que había tomado en la sala de espera. Presionó la espalda contra la rodilla de Jungkook, jugueteando con el pequeño muñeco.

Jungkook estaba sentado detrás de él, con los brazos cruzados y observando a varios omegas que habían estado ahí cuando acompañó a Jimin.

Claramente, visitaban el consultorio por la misma razón.

Jimin apareció detrás de la puerta una vez que otro omega fue llamado.

—Mami —Minsoo susurró, dejando todo para intentar levantarse, pero Jungkook lo detuvo, atrapándolo entre sus piernas antes de que pudiera hacerlo—. ¡Mami!

Jimin sacudió la mano desde el mostrador, donde estaba pagando—. Un segundo, bebé.

—No puedes solo correr sin decirme, Minsoo.

El niño se quejó, queriendo liberarse de su agarre, y Jungkook lo cargó—. ¿Me escuchaste?

Minsoo negó, estirando los brazos hacia Jimin—. Mírame, por favor.

El alfa más pequeño lo hizo, volviendo la vista hacia Jimin unos segundos después.

—Si corres puedes lastimarte. Debes permanecer a mi lado siempre, ¿entendido?

Minsoo hizo un puchero—. Sí, pero... pero mami...

—Lo sé, pero mamá dijo que esperáramos y eso haremos —Jungkook se levantó y fue hacia la salida con el niño en brazos, esperando a Jimin.

—Hola, Soo —El omega sonrió y estiró los brazos hacia su hijo—. ¿Te portaste bien con Jungkook?

—Un poquito, mami.

—¿Un poquito? —Jimin negó—. Necesito que sea mucho, bebé.

—Sí, mami —Minsoo abrazó fuerte a su madre.

Jimin sonrío—. Eso es todo —mordió su labio inferior, intentando contener su felicidad—. Se ha ido.

Jungkook agarró su rostro—. Luces cansado, si quieres tomar una siesta antes de que lavemos la ropa, puedes hacerlo.

cold little heart 𐙚 kookmin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora