❝Donde Yeonjun y Soobin
son hermanos. Yeonjun
es tan tierno y dulce,
Soobin solo lo mira como
su hermanito menor hasta
que se da cuenta que entre
los dos existía una fuerte
atracción y algo más grande
que un capricho.❞
➽ Adaptación Autoriz...
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El cuerpo de Yeonjun falló ante el cansancio y los temblores en este, haciendo que cayera de nuevo a la cama, intentando recuperar el aliento. Soobin salió de él dando leves golpecitos en el trasero del menor para deshacerse del líquido blanco que salía de la punta de su polla, al terminar se dirigió al baño. ¿Había aprendido algo Yeonjun? Claro que sí. Número uno: No molestar a Soobin con temas relacionados a Taehyun o a cualquier tipo. Número dos: No retarlo mientras se lo follaba, Yeonjun sentía que su trasero dolía, probablemente al día siguiente despertaría con más marcas de los dedos de su hermano en su cintura, Soobin lo había tomado fuerte, para poder penetrarlo con rapidez y fuerza. Último punto: A pesar del dolor lo volvería a hacer, el mayor se lo hizo como tanto estaba deseando, fuerte, duro y sin compasión.
Tomó las sábanas para cubrir su cansado cuerpo, dejando su culo al aire, a fin de cuentas, era algo que Soobin ya había visto, tocado, follado, incluso probado con su propia boca. Su hermano regresó del baño, caminando hasta él para tomarlo en brazos y dirigirlo de regreso a este. Se sorprendió, el agua de la tina los esperaba, Yeonjun soltó un pequeño gemido de placer ante el agua tibia que cubría su cuerpo. Soobin lo miraba de una forma tan bonita que el corazón del menor comenzó a latir rápidamente, pensó que este seguiría enfadado, pero era todo lo contrario, se veía más tranquilo y relajado, podría jurar que hasta más cuidadoso y atento.
Después de dejar al menor dentro de ella, él entró, Yeonjun enseguida se acomodó en su pecho, recostando su cabeza mientras sentía las manos del mayor acariciando su cintura con cariño. Dejó un beso en la frente de su hermanito, estirándose lo suficiente para tomar la esponja y el jabón líquido que descansaban junto a la tina, comenzando a limpiar sus cuerpos con lentitud.
Amaba la versatilidad de Soobin, podía estar molesto y romper todo, pero en otro momento se encontraba siendo tierno y cuidadoso con el menor. Eso hizo a Yeonjun enamorarse un poco más.
—¿Te duele? —preguntó. Sus manos se encargaban de hacer masajes en el cuero cabelludo del menor.
—Todavía no, solo un poquito. Mañana será peor.
—Perdóname, bebé, sabes que no me gusta herirte, pero me sentía muy molesto y no parabas de retarme con lo que más me duele.
—¿Con qué? Solo hablamos de mí y Taehy... —lo hizo callar rápidamente, colocando una de sus manos en los labios del menor.
—Con eso... Tocaste mi punto débil al hablar sobré ti y él —confesó. Yeonjun no sabía cómo interpretar eso.
—Soobin...
—Bebé, creo que nunca hemos tenido esta plática y es momento de que hablemos —sentenció.
—Estoy de acuerdo.
—Tienes al maldito de Kang como novio, yo... ¿Tengo a Yoo? —lo miró dudoso.
—¿A mí me preguntas? —bufó. Ese tema no le gustaba para nada.
