Baby thoughts

Parte 28

La alfa salió de la habitación vistiendo su pijama, la cuál iba a juego con la de su cachorrita que iba en sus brazos con una cara sería, quería estar cómoda en su propia casa, quien fuera tenía visitas esperaba que entendiera que la comodidad iba primero.

Yuna miraba a los los lados con curiosidad, esperando a que valiera la pena que alguien estuviera invadiendo su territorio.

"Umh, huele a roba omegas"

Muy poco después escuchó una risa bastante conocida, haciendo que sus sentidos se pusieran en alerta, escuchando los pasos acercándose a la sala de estar donde su mamá había tomado asiento junto a ella, de primer plano vio a su mamá, pero enseguida entró a la llamada su segunda omega favorita, confirmando que valía la pena la visita, pero la felicidad duró muy poco al mirar a la alfa que venía detrás de ella, hizo un puchero inconforme.

Rosé se veía bastante contenta de estar allí o así lo percibían las dueñas de la casa, aquella alegría parecía darle un toque especial porque lucía más bonita, su cabello un poco más largo y ojos brillantes, Yuna quería que pronto la cargará para poder llenarse de su aroma como tanto le gustaba, así que ella misma se impulsó poniéndose de pie sobre las piernas de su mamá, estirando sus brazos con las más clara intención de que la chica se acercara a tomarla en brazos.

-Esta cachorra, ¿ni siquiera puedes esperar que la tía Rosie se siente?-dijo su mami cruzándose de brazos.

-Rosie, Rosie-llamo

-No importa Momoring, por supuesto que tengo que cargar a mi linda bebé- respondió la otra, haciendo caso a la petición de la cachorra, tomándola de una vez.

"¿Escuchaste Lisa? Su bebé"

Momo invitó a la pareja a sentarse en el sofá, siendo bastante amable y atenta con ambas, ellas hicieron caso, compartiendo asiento junto con la alfa que las saludó siendo igual de amable.

Yuna mientras tanto se disponía a pasar su naricita disimuladamente cerca del cuello de la mayor, sólo porque allí era donde más abundaba el aroma de cualquier persona, pero frunció el ceño al no encontrarse con la fragancia a la que estaba acostumbrada, está vez tenía los dejes del aroma de alguien más, un aroma más pesado.

"¿Qué hizo la tía Lisa con tu aroma? ¡Apestas!"

Todas pudieron observar la malhumorada reacción de la cachorra al no encontrar exactamente lo que esperaba, sacándoles risas a las mayores, sus madres nunca iban a entender porque lograba ser tan descarada cuando se trataba de Rosé.

-¿Pasa algo Yuna?-molestó un poco Lisa, satisfecha por la reacción de la menor, un poco inmaduro de su parte, pero para ella valía la pena haberla visto descolorarse por el nuevo aroma.

Yuna desvío su mirada, queriendo dejar claro que estaba ignorandola.

-Oh... espera-Momo se levantó de repente de su asiento recibiendo la mirada intrigada de su esposa ante tal reacción, en cambio Rosé soltó una risa al ver la reacción de su amiga-Tú... ¡Tú!

-Aja-respondió la otra omega con orgullo, Momo casi gritó de emoción ante la respuesta de la otra, acercándose mi más rápido posible para poderla envolver en sus brazos en un cálido abrazo.

Sana miraba sin entender, y Yuna entendía mucho menos, ¿Rosé qué?

-Felicidades-dijo Momo con bastante sinceridad a la pareja.

-Espera, ¿de que me perdí?-preguntó la alfa al contemplar tanta felicidad en los rostros ajenos.

-Rosie está embarazada-repondió junto con Lisa, con el mismo orgullo con el que habia hablado Rosé.

Estaban tan felices y no podían ocultarlo, aunque no había sido para nada planeado, ambas tenían ese deseo bastante presente así que cuando se enteraron de ello no pudieron evitar emocionarse, les agradaba mucho la idea de formar una familia más alla de ellas dos.

Sana abrió su boca sorprendida ante la noticia, ¿cómo había Sido tan lenta? El aroma de Lisa estaba sobre Rosé pero ahora era que podía notarlo mucho mejor.

"¿Uh? ¿De qué hablas vieja?"

-Esto es hermoso, estoy muy feliz por ustedes-expresó Momo, dejándole un poco de espacio a las futuras madres.

-Se vienen días oscuros-murmuró la mayor colocando una mano sobre el hombro de la otra alfa, quien inevitablemente se asustó un poco ante tales palabras.

A pesar de tantas habladera Yuna no entendía muy bien eso del embarazo, ¿acaso se come? ¿Por qué todas estaban tan felices por esa cosa? De otra manera no entendía que tenía de bueno.

-Tendrás un primito o primita, Yuna
-le dijo Rosé, recibiendo la mirada de la cachorra.

"¿Otra? Ya no la quiero, las primas no son lo que yo pensaba, solo mira a la bola de grasa de Mina"

-Pronto estarás a punto de explotar, creeme el tiempo se te pasará rápido- comentó Momo-o quizás no, depende de cómo lo veas, porque no es nada cómodo te digo, y ni se diga el dolor de espalda...

La sonrisa de Rosé se debilitó un poco, no se había detenido a pensar demasiado sobre los cambios de su cuerpo o todas las molestias que conlleva el embarazo, si lo veia así no sonaba tan bonito.

-Oh, pero no te preocupes, vale la pena
-intentó arreglar la omega al ver la reacción de su amiga.

Al parecer no eran demasiados buenas animando a las personas.

"Um bueno, ¿y tú aroma cuando vuelve? No entiendo que hizo la tía Lisa para que no pudiera olerlo"