Moral of the story [2MIN VER.]

5

El día siguiente Minho fue quien se levanto primero y se escabullo a la habitación que Olivia le había cedido dejando la cama del castaño quién dormía plácidamente.

Justo en ese momento se encontraban desayunando lo que la señora Kim les había dejado para desayunar.

—¿Puedo preguntarte algo?—Seungmin interrumpió el cómodo silencio mientras Minho bebía el zumo de naranja que tenia frente a el.

—Dispara—declaro Minho poniéndole atención.

—¿Porque dejaste de escribir?—cuestiono Seungmin refiriéndose a las cartas que se mandaban cuando estuvieron lejos uno del otro.

—Porqué tu dejaste de responder—se encogió de hombros el mayor y se traslado al día en que decidió dejar de escribir para Seungmin.

Fue cuando recién cumplió 15 años que dejo de escribirle mas.

La ultima carta que Minho escribió para Seungmin relataba su accidente y el cuanto necesitaba que lo visitara, expresaba lo que aquel adolescente de 15 años sentía.

Cuando no hubo respuesta por parte de Seungmin, Minho se sintió un tanto dolido por que el menor era el único amigo que creía era de verdad, así que solo decidió dejarlo de un lado creyendo que Seungmin había hecho con él lo mismo.

—¿De que hablas? la ultima carta la escribí yo—respondió Seungmin con su ceño ligeramente fruncido mientras llevaba un pedazo de hotcake a su boca.

—¿Bromeas?—soltó Minho con una ligera risa nasal—La ultima carta que te envié fue en el otoño del 2017 justo antes de mi quinceavo cumpleaños, paso primavera, el verano y jamás llego nada—murmuro viendo al castaño quien parecía confundido.

—La ultima carta que te envié fue en el verano del 2017—respondió Seungmin enarcando una de sus cejas—Tu respuesta nunca llego—murmuro y ambos parecían confundidos—Como nunca llego y no volviste a escribir, creí que tal vez te habías aburrido y habías conseguido una vida mas divertida que solo escribir cartas—se encogió de hombros y Minho negó haciendo una mueca al recordar esos años.

—Ojala hubiera sido así—murmuro en lo bajo y el menor no pudo escucharlo bien.

—¿Ah?—exclamo y Minho dejo los cubiertos a un costado del plato que tenia frente a él.

—Casi muero Minnie, la carta que te envié fue justo cuando estaba recuperándome—Minho elevo su mirada perdiéndose en los ojos ámbar que lo miraban un tanto sorprendidos.

—¿De que hablas—murmuro Seungmin con un toque de confusión en su voz.

—A finales del verano la escuela a la que asistía organizo un viaje, un campamento de fin de semana, con lo que no contaban es que la situacion climática cambiaria de pronto—narraba Minho mientras Seungmin ponía suma atención dejando de comer—El autobús salió de la carretera y comenzó a dar vueltas, afortunadamente no todos salieron lesionados—menciono recordando el momento, aun le daban escalofríos—Pero no fue mi caso, mi cuerpo estaba lleno de golpes, tenia un brazo roto y varias costillas también—Seungmin no podía seguir escuchando sin querer comenzar a llorar, él había pensando tan mal de Minho—Cuando llegue al hospital le dijeron a mis padres que era un milagro que estuviera vivo con todas las lesiones que tenia, pero eso no seria todo—comento viendo directamente a Seungmin—Dijeron que tal vez no podría volver a caminar y mi sueño de pertenecer a un equipo de Hockey profesional estaba arruinado—murmuro mientras el menor parpadeaba sin poder procesar aquella información—Mi columna vertebral estaba muy dañada y operarme no era opción ya que era una operación de alto riesgo, sin embargo después de muchas terapias, sesiones psicológicas para prepararme para lo que viniera deje mi fe en lo alto y ahora estoy aquí—elevo sus brazos al aire sonriendo.