Moral of the story [2MIN VER.]

10

—¿Listo?—pregunto la señora Kim mientras Seungmin asentía algo nervioso.

Se encontraban frente a una clinica especializada en el tipo de lesiones como la que el menor había sufrido.

Después de la reunion de la noche anterior, dónde Minho por cierto se acoplo muy bien con todos, al llegar a casa le conto a su madre lo que había decidido.

Los padres de Seungmin no pudieron estar más feliz con la noticia y no tardaron nada en hacer una cita para estar a primera hora en la clinica.

—Pasen—dijo la señora Kim dejando que pasara Seungmin y seguido de este Minho quién estaba más que feliz por la desición del menor—Preguntare por el doctor esperen aquí chicos—les ordeno y ambos tomaron asiento en la sala de estar.

—¿Cómo te sientes?—inquirió Minho mientras veía a Minho dibujar una pequeña sonrisa en su rostro.

—¿Realmente?—pregunto y el mayor asintió—Nervioso pero algo emocionado—murmuro encogiendose de hombros.

—Siento que todo saldra bien—murmuro Minho sonriendo mientras ponia una mano sobre la mano del menor quién no pudo evitar sonrojarse ante el tacto del mayor.

La noche anterior cuando Minho dijo a todos que era su pareja se había comportado como tal, había sido realmente atento justo como si fueran una.

—Chicos ya podemos pasar—interrumpio la señora Kim el juego de miradas de aquellos dos.

—Claro—murmuro con nerviosismo Seungmin apoyandose en su bastón para ir hacia dónde su madre.

Minho solo pudo sonreír antes de seguirlos.

Caminaron por un pasillo y llegaron a una pequeña recepción dónde había una chica con cabello de color chillante la cual le tomo los datos a Seungmin y le hizo unos chequeos de rutina antes de pasar al consultorio lo cual no tardo mucho pues al acabar con la toma de peso el doctor les llamo.

—Buenos días pasen—saludo el hombre de mediana edad—¿Kim Seungmin?—leyo una carpeta que tenía entre sus manos—Vamos a ver Seungmin te voy a pedir que subas ahí para poder revisar tu pie—pidió señalando un asiento alto.

Seungmin miro aquel asiento y paso la mirada a su madre pidiendo ayuda.

—Dejame ayudarte—se adelanto Minho tomandolo de la mano y ayudandole a subir—Apóyate en mis hombros—le indico y el menor lo hizo sientiendose algo avergonzado por la cercania.

Al terminar de ayudar a Seungmin, Minho volteo y pudo ver como la señora Kim sonreía, algo que lo desconcerto.

—Bien comenzaré a revisarte si duele al tocar necesito que me lo hagas saber—pidió el doctor y el castaño solo asintió quitandose el zapato.

El doctor comenzo a revisar el pie del menor y hacer pequeños movimientos con este, estuvo haciendo aquello por un rato hasta que al parecer fue suficiente.

—¿Has tomado terapia antes Seungmin?—pregunto poniendole el zapato y yendo a su lugar.

—Solo tomo terapia unos meses y después lo abandono—respondió la madre de este mientras el doctor asentia empezando hacer anotaciones en una pequeña libreta.

—Haremos algunos estudios y ejercicios para saber el grado de problema en el pie de Seungmin—hablo el doctor mientras seguía anotando—Siendo sincero—elevo su rostro viendo al castaño quién se encontraba más asustado que nada—Creo que tu pie puede curarse, no quiero darte esperanzas falsas pero he visto casos peores el tuyo es promedio Seungmin debiste atenderte cuanto antes—hablo el doctor y el mencionado miro a su madre sorprendido.

—El doctor que le vió después del accidente dio un diágnostico diferente—declaro la señora Kim sorprendida.

—O no sabía o era principiante—se encongio de hombros el doctor viéndolos—Seungmin necesita hacer ciertos ejercicios de fuerza y resistencia para medir el grado de su problema así como varias radiografias—indico.

—Actividades como natación fisioterapias, ¿cierto?—intervino por primera vez Minho

Él había hecho natación, y también sesiones de fisioterapia.

—Asi es—asintió el doctor viendolo—Veo que se informo antes de venir—sonrió el hombre y Minho desvió su mirada algo avergonzado.

—Yo viví algo similar, por eso se que en esas terapias se debe tomar tiempo y fuerza—murmuro y el doctor asintió.

—En todo caso, que el novio de su hijo sepa todo esto puede facilitarle las cosas—respondió el doctor y ambos chicos negaron mientras la señora Kim reía.

Seungmin quería que la tierra lo tragase mientras se ponía rojo al igual que Minho

—Como sea, le doy las ordenes de las radiografias y los ejercicios que puede hacer y a dónde asistir, nos vemos en una semana para la valoración de Seungmin—sonrio en dirección al castaño quién estaba dispuesto a bajar del asiento.

Minho se apresuro y le ayudo a bajar.

Apenas toco el suelo, Seungmin le dio un pequeño empujon lejos de él y tomo su bastón para caminar hacia su madre.

El mayor lo miro con el ceño fruncido sin embargo no dijo nada.

—Nos vemos doctor, muchas gracias nos ha regresado las esperanzas de nuevo—agradecio la señora Kim y el doctor solo sonrio despidiendolos.

Apenas salieron del consultorio la señora Kim se despidio de Seungmin y Minho.

—Necesito volver al negocio chicos—aviso—Vuelvan a casa, pidan un taxi nos veremos por la noche—dijo tendiendole dinero a su hijo—Hoy pondremos los adornos de navidad así que no vayan a salir a ningún lado—pidió y ambos chicos dijeron adios viendo como desaparecia en el estacionamiento.

Se quedaron en silencio por un momento mientras caminaban.

—Era bonito, ¿no?—hablo Seungmin rompiendo el silencio.

—¿Qué cosas?—cuestiono Minho sin entender de que hablaba.

—El cabello de la chica—dijo Seungmin recordando el rosa chillon en el cabello de la chica—Siempre quise pintarme el cabello pero nunca me atreví—sonrio y a Minho de pronto se le paso una idea loca por la cabeza.

—¿No has probado otro color aparte del castaño?—inquirió y Seungmin nego mientras esperaban un taxi.

—No, no me siento capaz—dijo y el menor sonrió.

Antes de ir a casa de Seungmin, Hyunjin estaba pensando en teñirse el cabello de algun color pero no se decidio por alguno así que no lo hizo.

—Entonces hoy es tu dia de suerte—dijo emocionado mientras un taxi se paraba frente a ellos y subian—Señor llevenos a la estética más cercas que haya—pidió Minho y Seungmin lo vió con su ceño fruncido.

—¿Qué haces Minho?—pregunto sorprendido.

—Hoy dejaremos este espantoso color castaño Minnie—dijo pasando su mano por el cabello del menor mientras lo despeinaba.

Seungmin lo miro algo dudoso pero después penso en las palabras que Minho había dicho con anterioridad.

Después de todo jamás volvería a ser tan joven como en aquel momento, un color de cabello diferente no sería nada del otro mundo.

O eso creía.