Daddy Yoonseok ver (Adaptación)

5. Reward

—Y-yo, señor... Yo n-no le he men-tido, ¡se lo juro! Y-yo... —Al fin habló, aunque aún tenía algo de miedo.

—Sh, sh, sh... Te creo, cariño. —La interrumpió el mayor. —Y porque me respondiste te ganaste la recompensa, linda.

—¿E-en serio? —Los ojitos le brillaron. Pensaba que tal vez aquella recompensa sería que la dejaría libre para poder irse con sus padres.

—Claro que sí, nena. Ahora, quítate esta camisa sucia que te daré tu premio. —Sonrió con sorna.

No estaba muy seguro de lo que iba a hacer exactamente.

Jung no entendió para qué, pero pensó que podría ser que YoonGi le quiera dar otra para que no se la lleve toda rasgada. Así que se la quitó con una pequeña sonrisa.

Al ver sus ligeros pechitos copa B, YoonGi sonrió ladino.

—Quítate el sostén también, linda.

Así lo hizo inocentemente ella y dejó sus bonitas tetas al aire bajo la atenta mirada hambrienta del hombre.

—Bien, HoSeok. —No apartó su mirada de sus bonitos senos. Creía que ya sabía lo que iba a hacer. Después de todo, ¿para qué maltratar a un cuerpo que se veía tan bonito? —Ahora te daré tu recompensa...

Sin más, hundió su cara en aquellas tetas.

—¿Q-qué- ¡Ah!

No perdió tiempo. Lamió toda la circunferencia y la llenaba de besos. Luego delineó sus pezones con su lengua y comenzó a chuparlos y lamerlos, soltando varias mordidas de vez en cuando. Con su otra mano pellizcaba su pezón.

HoSeok jadeaba y gemía sin control. No sabía qué le estaba haciendo aquel hombre en sus tetas, o por qué se sentía tan bien, simplemente se dejó hacer.

No tenía fuerzas para quitárselo de encima y se estaba sintiendo de maravilla.

Aunque eso no haya sido lo que pensó que sería la recompensa le estaba gustando mucho.

—¡S-señor- ¡mgh! ¿¡Qué es-tá ha-haciendo!? ¡Ah, ah! ~

YoonGi sonrió aún con su pezón en su boca.

Estaba haciendo lo mismo con el otro pechito. Le encantaba los sonidos que la chica bajo él hacía.

—¡Mgh! ¡Ouh, ah! ~ —Chillaba sin parar.

—¡S-señor! —YoonGi volteó su rostro al de la menor mientras que con sus manos apretaba y amasaba sus pechos a su gusto, de vez en cuando pellizcando sus pezoncitos rosas. Su prominente erección se endureció más al ver la cara envuelta de placer de HoSeok.

Estaba toda sonrojada hasta las orejas; botaba saliva de su boca al no poder cerrarla y tenía los ojos perdidos y cristalizados. Sus labios estaban rojos e hinchados de que ella tanto los mordía para acallar los sonidos vergonzosos que hacía. Sus manos sujetaban las sábanas bajo ella. Dios... Se notaba que la chica era más que primeriza en eso. Se ponía tan mal sólo por su boca en sus tetas, se imagina su cara cuando haga mucho más que eso.

—¿Sí, bonita? —Preguntó con una sonrisa.

—¡M-me vo-y- ¡Mmh! ¡Me voy a h-hacer p-pis! —YoonGi rió ronco. Esa chica sí que era inocente.

—No te vas a orinar, cariño. Te vas a correr.... —Entonces comenzó a besar su cuello y a dejarle marcas rojizas y mordidas que lamía después. —Sólo deja que pase, te sentirás bien después.

Y con eso, HoSeok se corrió con un fuerte y agudo gemido por primera vez en toda su vida.

Una inesperada pero excitante recompensa.