𝐀𝐅𝐓𝐄𝐑 𝐋𝐈𝐊𝐄 (después de gustar): Uno pensaría que poder ver el hilo rojo del destino facilitaría la búsqueda de su alma gemela. Pero para Noemi, los romances que florecen a su alrededor solo enfatizan el estado de su propio hilo: alguien esp...
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Árboles a kilómetros, el camino sin pavimento, por más de una hora conduciendo es abrumador y nostálgico. Mi mente da vuelta por las mentiras que pudieron decirme mi tío y mis tias al respecto de mis padres. También está el asunto de Mei, quien conduce en silencio y me da espacio para pensar en mi situación.
Es un hecho, no puedo ver los hilos rojos y la doctora Choi inyectó en mi brazo un tranquilizante porque me había salido de si, reaccione de una manera que jamás imaginé. Ni la definición de loca esta cerca y me sentí decepcionada de mi misma.
Al despertar en el auto de Mei, no dije nada y me senté correctamente mirando a través de la ventana. Habíamos pasado e autopista, la carretera fue muy silenciosa sin ningún automóvil en el camino y el desvío por un camino más terrestre, hace un poco de ruido.
── Llegaremos en media hora más ── informó Mei con la mirada al frente y asintió acomodando mi capucha.
No quiero seguir interactúando o hablar porque temia explotar contra ella. Preferí seguir observando la gran distancia que las casas están una de la otra y en minutos podemos estar dentro del bosque donde encontremos la razón de mi o al menos quiero saber si el dolor en el pecho volverá o que fue el causante.
La doctora Choi Younjung fue clara, debía recibir atención médica de un modo más efectivo y firmó la salida del hospital para ser translada a la clínica del pueblo Lune. Al principio pense, bueno, estaré bien pero decirme: Si ellos no encuentran la cura, tendras que aprender a vivir con ello y capas dejaras de ver los hilos rojos hasta el tuyo o afecte de una forma a tu alma gemela. Fue un golpe en la cara y no lo soporte, jamás me perdonaría que por mi culpa a Jeno le pasará o sintiera el mismo dolor.
Levante mi mano derecha y no vi nada. Aunque no me gustaba verlos e ver el mío, quería ver el hilo rojo cortado de YangYang y poder averiguar ¿porque un hilo rojo término cortándose?
── Noemi ── me llamó y no le di cuenta, el auto fue estacionado a un lado de la calle pavimentada. ── Al llegar, no te asustes, ellos son amables pero le resulta extraño tener desconocidos en su territorio.
Asistió. Es de esperarse que lobos le sea extraño encontrar a una desconocida en su territorio y no los juzgo, ello cuidan a su manada con la vida. O bueno, esa es la explicación que me doy.
El auto volvió a estar en marcha y me sumergo en mi mundo hasta escuchar ruino de personas transitando, levantando la cabeza de la ventana observo mejor y veo a gente caminar por las veredas, las casas eran al estilo estadunidense, separadas adecuadamente con jardines, algunas tenían rejas, pasando por una plaza vi a los niños jugar con sus padres siendo supervisados adecuadamente sin despegar ni un ojo de ellos, a diferencia de los humanos comúnes, había un hotel, una cafetería, un restaurante, tiendas, tal cual a un pueblo moderno y unido. Solo el sorprendió que la seguridad de todos no este a cargo de policías, sino por hombres y mujeres vestidas en ropa deportiva con una presencial colgada en sus cuellos. Parecía que las leyes en este lugar son diferentes al resto del mundo o del país.
