Capítulo 6: Poppy Pomfrey

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Music: Caves - Haux

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Albus abrió la puerta de la enfermería y vio que Severus dormía plácidamente. Llamó a la puerta de Poppy.

«Pasa», gritó ella.

Entró y se sentó en una de las sillas.

«¿Cómo está el niño Poppy?» le preguntó preocupado.

Poppy suspiró. «Tiene suerte de que la costilla no le haya atravesado el pulmón o el corazón. De ser así, ya estaría casi o simplemente muerto».

El director miró con ojos muy abiertos a Poppy. Afortunadamente, él estaba allí

«¿Has castigado a esos chicos?», preguntó Poppy mirándole con amenaza. 

«Por supuesto, Poppy. Incluso los suspendí y le quité la insignia de prefecto al señor Lupin» explicó Albus.

Poppy no dijo nada. Pero sonrió al escuchar eso. 

«Más te vale haberlo hecho aunque nunca pensé que le quitaría la insignia de prefecto al señor Lupin.»

«Bueno antes los había ignorado pensando que eran bromas inofensivas, Poppy. Antes de esto, les había creído porque nunca creí que los chicos de Gryffindor me mintieran. Pero me equivoqué. Esta noche los he pillado", dijo suspirando.

«Bueno, ahora hiciste lo correcto», replicó Poppy.

«Poppy, ¿puedo ver el expediente médico de Severus?», pidió Albus.

Poppy le lanzó una mirada curiosa, atónita ante su petición.

«Por favor Poppy», repitió con algo de suplica.

Poppy asintió y fue a buscar el expediente. Mientras Albus se servía un té en su taza y sorbía.

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Severus abrió lentamente los ojos, se tomó unos preciosos segundos para ser consciente de su entorno y su situación. Sonrió satisfecho al recordar que su plan había tenido éxito. Pretendía que el director viera la intimidación del merodeador aunque tuviera que sacrificarse. En otro tiempo alternativo, era muy difícil para él luchar contra cuatro en uno, pero ahora por suerte tenía su mente, tal vez sólo su cuerpo no lo suficientemente fuerte cuando se estrelló contra la pared.

La última vez, a menudo recibió cruciatus del Señor Tenebroso, era peor cuando estaba furioso a veces temía que se quedara como los padres de Neville pero nunca sucedió, pero la experiencia que era la razón principal por la que su cuerpo podía soportar las heridas. Sin embargo, Dumbledore probablemente los castigaba a la ligera, después de todo eran sus favoritos. Se incorporó y se estremeció al sentir dolor en las costillas. Probablemente tenía las costillas rotas. Se levantó de la cama y se dirigió al lavabo, sin hacerle caso al dolor.

Al salir, una voz le preguntó: «¿Cómo te sientes?».

Severus se sobresaltó y buscó de dónde provenía la voz. Miró a su izquierda y vio a Dumbledore de pie, con su túnica púrpura, bueno, después de todo era su color favorito, pues era terrible si combinaba con sus medias de 7 colores.

Dumbledore soltó una risita, sospechando que sabía lo que estaba pensando.

«Te pido disculpas. Últimamente siempre te hago sobresaltar».

«Está bien señor. Ya me siento mejor", respondió Severus mientras se dirigía a su cama.

Miró a Dumbledore con curiosidad. Dumbledore se acercó a su cama, sacó una varita y se la tendió. Severus abrió los ojos al ver que era su varita. Se había olvidado por completo de su varita. Severus cogió la varita y dio las gracias a Dumbledore con la cabeza. Comprobó su varita, temiendo que el merodeador hiciera algo con su varita.

«He castigado severamente al señor Potter y a sus amigos. Les he dicho que te dejen en paz. Si no lo han hecho, por favor, házmelo saber, muchacho» aseguró Dumbledore mientras se sentaba en el sofá.

Severus se quedó pasmado un momento. Nunca esperó que el anciano dijera eso. Normalmente, pedía que castigaran al merodeador o por mala suerte él era castigado injustamente.

«Gracias, señor, ¿y yo voy a tener detención?», pregunto en voz baja


«No mi muchacho, además necesitas recuperarte»

«Sí señor, ¿puedo preguntar a qué viene?» Pues sabía que ése no era el tema principal.

«Nada se te pasa Severus ¿Puedo preguntarle dónde pasará el verano?», preguntó Dumbledore.

Severus parpadeó. Se preguntó por qué lo preguntaba Dumbledore.

«En mi casa, Spinner End, señor. ¿Esperaría que estuviera en otro lugar?»

Albus soltó una risita más suave. «Perdóneme. Pensé que pasarías el verano en Malfoy Manor»

'¿Por qué pensaría eso?'

«Oh... bueno él me invitó. Pero lo rechacé", contestó Severus escuetamente.

Albus levantó la vista hacia él y miró fijamente al chico. Pero Severus ni siquiera lo miró. Parecía que no le interesaba seguir discutiendo. Anoche, cuando recibió el expediente médico de Severus, se sorprendió al ver su historial. Aparte de la lesión peleando con el merodeador, Poppy había detectado señales de maltrato. Al principio no pudo creerlo porque no creía que los muggles puedan ser malos, además sabía que cuando Pomona le preguntó, el chico se negó. Ahora, necesitaba preguntar.
«Severus, ¿tu padre te trata bien?»

Severus, que estaba sumido en sus pensamientos, se sobresaltó con la repentina pregunta de Albus.

'¿Desde cuándo le importa que mi padre me trate bien?' pensó Severus.

«Sí», mintió Severus.

Albus lo miró a través de sus gafas. Sus ojos azules querían escudriñar la mente del chico, pero lo dejó estar ya que había detectado el escudo de ocultismo del chico levantado. Lo cual también estaba sorprendido que a sus 15 años pudiera manejar la Oclumancia. Se levantó y se sentó en la cama y puso su mano apoyada en el hombro del muchacho, sintió que Severus se tensaba.

«Severus, hijo mío, puedo ayudarte si tienes la fuerza para confiar en mí» dijo Dumbledore ofreciendo una de esas sonrisas manipuladoras que ya sabía por su otra vida. Severus no dijo nada, miró a la sábana blanca. No quería responder a esta pregunta y no necesitaba la compasión de nadie. Afortunadamente, Madam Pomfrey entró.
«Albus, disculpa la interrupción, ahora tengo que hacerle un chequeo», dijo Poppy.

Dumbledore suspiró al no poder convencer a Severus de que se abriera para él. Se levantó y se marchó. Severus se quedó mirando al director. Quizá realmente le importaba, ya que no quería estar bajo su dominio otra vez, por ahora tenía que ir con cuidado.


'¿Albus realmente estaba tratando de ayudarme? A mi, soy un slytherin, y pronto seré un espía o solo tengo que destruir los horrocruxs, no estoy muy seguro de eso, aunque eso es tarea de Potter. Esta es mi segunda oportunidad, ¿Qué hago?' 'Hmm... Recuerdo que una vez Dumbledore sospechaba de mi vida hogareña, y siempre que estaba en reposo o algo así, trataba de entrometerse' 

«Viejo chismoso, deje vivir una vida tranquila» Dijo en voz muy baja.

Poppy al terminar su chequeo, le dijo que se podía ir, y que durante las siguientes 2 semanas tomara la poción de las vitaminas, y que después del verano regresara para su otro chequeo.

La segunda oportunidad de Severus SnapeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora