CHAPTER THREEMe entiendes
Aelia
—BUENOS DIAS ANAKIN—CAMINÉ HASTA QUEDAR A SU LADO.
—Buenos días reina Sky—me miró— de verdad tengo curiosidad por ver debajo de esa capucha—habló cuando me coloque a su lado, nos encontrábamos en el balcón,el lugar donde más hablamos.
—Me temo que eso no ocurrirá joven jedi—sonreí, ya han pasado días desde que se han hospedado conmigo y las cosas en Naboo no están ni cerca de calmarse—Ya sabes por lo de seguridad.
—Si, ya se— suspiró ya cansado de la misma palabra que uso cuando quiere saber algo de mi—pero solo somos tu y yo, y si alguien se entera sabra que habrá salido de mi— me miró y yo me recosté en la barandilla del balcón.
Solté una suave risa— no ahí necesidad de descubrir quien se lo dijo a quien porque no te la mostraré—el suspiro frustrado.
—Bien— dijo igualando mi acción- pero de verdad me causas curiosidad, eres bien reservada majestad— baje la mirada y suspiré suavemente- pero respetaré su elección.
—No has cambiado nada— susurré para mi.
—¿Que dijo?—me miró.
— nada olvídalo—negué nerviosa, aveces tenía la lengua larga, asintió no muy convencido.
—Usted pasa mucho de su tiempo aquí—cambio de tema y miro al frente.
—Si, es muy tranquilo— lo mire de reojo— veo que a ti también te gusta.
El asintió con una sonrisa— Me gusta la vista y la compañía— me miró— siento que usted me entiende-
— Me alegra escuchar eso Anakin—sonreí suavemente— a mi también me gusta tu compañía— le asegure, nos quedamos unos minutos disfrutando del silencio del lugar.
— ¿Anakin— escuche una voz detrás de nosotros, era Padmé.
— majestad— hizo una pequeña reverencia— Obi-Wan te busca...— nos miró a Anakin y a mi, su mirada nos recorrió confundida.
— Nos vemos más tarde majestad— asentí mirándolos a ambos irse, solté un fuerte suspiro, leí su mente, era una clara mentira para poder pasar tiempo con el.
•••
— majestad— escuche la voz de mi antiguo maestro, Obi-Wan.
— Hola Obi-Wan— hablé sin apartar mi vista del jardín, decidí ir a este a contemplar la naturaleza y sus hermosas flores. Lo escuché acercarse. No me moleste en ponerme la capa.
Se sentó a mi lado y yo volteé la cara al lado contrario al que estaba sentado— Me alegra volverle a ver maestro...— sentí su confusión— pero necesitaba irme— hablé conteniendo las lágrimas.
— No se a que se refiere su majestad— dude un poco en voltear a verlo—¿Podría ser más clara?—
Lo mire a los ojos —no me recuerda maestro...— dije con una sonrisa triste en mi rostro, observé su rostro sorprendido, como si hubiera visto un fantasma.
— Aelia...— asentí con lágrimas en los ojos, sentí como me abrasó y yo correspondí.
—soy yo maestro— hablé llorando en su pecho como una niña pequeña. Acarició mi cabello.
— Anakin y yo pensamos que habías muerto...— me separé para mirarlo a los ojos— de verdad te extrañamos, más a tus chistes malos- reí.
— Me alegra escuchar eso— baje la mirada sumida en mis recuerdos
—¿porque te fuiste? Y no evadas la pregunta.
Me separé del abrasó y me coloque a su lado, aún con su mirada sobre mi—Yo quedé embarazada— me miró sorprendido—antes de eso había tenido un amorío, claramente— solté un suave suspiró— y no quise arruinar su vida de Jedi, así que me fuí y lo deje para que cumpla sus sueños—sonreí con tristeza.
El suspiro —¿Y se podría saber quién es ese Jedi?—lo mire temerosa y el escucho mis pensamientos— Anakin...— asentí mirando mis manos— ¿Y no piensa contarle?
Negué rotundamente— El no puede enterarse, no sabe ni siquiera mi identidad.
Asintió—pero aún así deberías decirle, tu hijo no puede crecer sin un padre.
Tenía razón, Ra aún cree que el está en una super misión y regresará sano y salvo para contarle de esta— tiene razón maestro, pero no estoy lista— lo mire— tengo miedo de como pueda reaccionar.
Acarició mi espalda para consolarme, siempre funcionaba — tines razón, puede que se sorprenda y se enoje, sabes cómo es— asentí— pero es tu obligación decirle, sería peor que pasara más tiempo del que a pasado— suspiro— quiero conocer a mi nieto— dijo con una sonrisa.
Reí, borrando los malos pensamientos— está bien, acompáñame maestro— me levanté del suelo y coloque la capa por si nos encontrábamos a Anakin.
Caminamos hasta la habitación de juegos y en el camino le fui contando todos los detalles en estos últimos cuatro años. Llegamos y Ra se levantó del suelo hasta llegar a mí.
—¡Mami!— dijo subiendo sus manos indicándome de que lo cargará —Te extrañe toda la mañana— dijo agarrando mis mejillas entre sus manitas, su atención se desvió de mi hacia Obi-Wan— ma' ¿Quien es el?— apunto a mi maestro que se había congelado al ver a Ra.
Caminé hacia el maestro— el es tu abuelo— le dije mirando a Obi-Wan con una sonrisa, el siempre fue un padre para mi — maestro el es Ra— dije dándole a Ra en brazos.
Ra colocó sus manos en sus mejillas, observando con detenimiento a Obi-Wan y luego lo abrazo con alegría —¡Abuelo!— dijo con alegría, y mi maestro le correspondió al abrazo- me debe muchos regalos de cumpleaños — le dijo mientras lo soltaba.
Obi-Wan le sonrió —Y cada uno de ellos te los daré— me miró —es idéntico a el— me susurro. Asentí, era muy obvio.
—Eres un Jedi, ¿Cierto?— le pregunto Ra a Obi-Wan y este asintió— quiero que me cuentes muchas historias, así como lo hace mi mami antes de dormir.
Obi-Wan asintió y sentó en el suelo a contarse las, decidí irme de ahí para darles un tiempo a sola, quería ir al balcón a relajarme contemplando las vistas. Al llegar algo me dejó pasmada, Anakin y Padmé abrasados y dándose cariño, estaba consciente de que ellos no se habían separado, me quedé un momento allí para luego irme a mi habitación con el corazón en la boca.
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You Girl [Anakin Skywalker]
Romance¿Que pasaría si me reencontrara con mi viejo amor del pasado? Ya grande y más maduro de lo que lo conocía. Se perfectamente que fue un error ya que la orden jedi no lo permitía. Nos habíamos enamorado, hasta que llegó su viejo amor de la infancia, l...