You Girl [Anakin Skywalker]

6. The truth

CHAPTER SIX

La verdad

Aelia

LLEGUE A MI HABITACIÓN ENOJADA, CERRANDO LA PUERTA CON FUERZA DETRAS DE MÍ —¿POR QUE TODO ESTO ME PASA A MI?—ME PREGUNTÉ sentándome en la orilla de la cama, coloque mi cara entre mis manos.

"¡Que impotencia!"

Esto me pasa por enamorarme, sabiendo las conciencias los deje quedarse, y ahora piensan que soy una Sith, eh sido amable con ellos, les eh ofrecido todo y así me pagan, ¡Pensando que soy una asquerosa Sith!

Me recosté en la cama mirando el techo, sentí algunas lágrimas recorrer mis mejillas, me lo esperaba de todos menos de Anakin, aunque en parte tiene razón, no les e mostrado mi cara a pesar de que se han estado quedando aquí por unas semanas.

Todo se me está saliendo de las manos, si se lo decían a Obi-Wan obviamente el no les creería, pero a estas alturas no creo que Anakin le allá dicho algo, le gusta hacer las cosas a su manera.

Luego de llorar por al menos diez minutos sentí mis párpados pesados, se que no debería dormirme en esta situación, pero el sueño es pesado. Llorar siempre me ayudaba a dormir.

Dream/Flash Back

—Te conté que Padmé es mi primer amor—lo mire y asentí—no quiero continuar con esto.

—¿A que te refieres Anakin?— sentí como mi corazón se estrujaba en mi pecho.

—Yo amo a Padmé y quiero estar con ella—me tomo de las manos mirándome a los ojos- pero también te quiero, como amiga...-

Sonreí —claro Anakin, el primer amor no se cambia—me obligué a decir. El me sonrió.

—Me alegra que lo entiendas aelia—me abrazó—¿Todo bien entre nosotros?—se despegó un poco del abrazo.

Asentí- Si... Todo bien.

"Como quieres que este todo bien después de todos esos te amo"

Fin del Flash backs

Luego de tomar una siesta de al menos tres horas, me levanté de la cama y caminé al baño, me mire en el espejo.

Me veía fatal; tenía unas grandes ojeras bajo mis ojos, mi cabello estaba alborotado y tenía los labios resecos.

Abrí el grifo y moje mis manos para luego llevarlas a mi cara, tome una toalla cercana y sequé mi cara. Salí del baño y caminé a mi tocador, tome mi cepillo para el cabello y lo peine hasta que estuviera presentable.

Salí de la habitación en busca que Obi-Wan, tenia que decirle lo ocurrido, necesitaba uno de sus consejos. Caminé por todos lados y no lo encontré, ni me crucé con Anakin ni Padmé. ¿Se habrán ido?

Caminé al balcón y me encontré con Anakin en este, y tenía el descaro de estar aquí, está ves no me iría, es mi planeta y tengo todo el derecho de estar aquí. Caminé hacia el barandal, y me coloque a unos diez pasos de él.

Sentí su mirada sobre mi—De todas las personas que pensé que desconfiarían de mi, no pensé que una de esas sería tu.

Suspiro frustrado—Sabes que tengo razones Sky.

No me voltee a verlo—Pensé que te habías ido, ya que como soy una Sith—hice comillas con mis dedos—no querrías estar cerca de una—mire como el sol se ponía en el horizonte, dando comienzo a una noche estrellada.

—No sospechaba ni un poco, pero Padmé me dio razones, pero Obi-Wan no nos cree—vi de reojo comocamino hacia mi—¿Le lavaste el cerebro o algo?

Lo mire enojada—¡Claro que no! ¡Y si no te cree es porque seguramente no soy una Sith!—su cuerpo se encontraba frente al mío, yo miraba su pecho, no lo quería ver a los ojos.

Di un paso hacia atrás y Anakin me tomo por los brazos impidiendo me seguir retrocediendo—Entonces mirame a los ojos—negué—hazlo y te creeré.

Negué nuevamente, tratando de alejarme de el—No me pidas eso Anakin ya te e dicho que no puedo—coloque mis manos en su pecho tratando de alejarlo.

Una ráfaga de viento golpeó repentinamente mi rostro, me paralicé en mi lugar, Anakin había quitado la capucha dejando mi rostro a la vista. Seguía con la cabeza agachada, el colocó su mano en mi barbilla y subió mi cabeza, mis ojos se encontraron con los suyos; los míos estaba aguados y los suyos sorprendidos con una pizca de miedo y felicidad en ellos.

Algunas lágrimas bajaron por mis mejillas, ya no llevaba la cuenta de cuántas veces había llorado desde que ellos llegaron—Anakin...—mi voz salió temblorosa. Su mirada recorrió mi rostro- déjame explicarte, por favor—una de sus manos fue a mi rostro, para confirmar si era yo realmente.

—Aelia...—susurro si creerlo—Tu estas...—

Asentí frenéticamente —si Anakin—parpadee un par de veces, tratando de apartar algunas lágrimas—soy yo.

El se alejó—Pero tu... Nos contaron que tú....

Lo tomé de las mejillas—Anakin, fue una mentira, todo, yo le pedí al concejo que dijera eso, necesitaba irme.

El me miró a los ojos, estaba enojado—¿Por que? Dime porque, y quiero la verdad.

Como se suponía que le diría todo así nada más, mi pesadilla se hizo realidad; tener a Anakin frente mío y tener que contarle todo. Otra vez me arrepiento de dejarlos quedarse—Anakin, yo...—dude en decirle— Quedé embarazada.

Vi como su rostro se ponía pálido—Ese bebé es Ra, y es tuyo Anakin—vi una lágrima recorrer su mejilla, su mirada estaba enojada y tenía todo el derecho de estarlo
—Se que debí decirte...—

—Pero no lo hiciste—me interrumpió.

Sequé unas lágrimas de mi rostro—De verdad quería decirte, pero me dijiste que estabas tan enamorado de Padmé y además de eso querías ser un Jedi y no quería arruinar tus sueños—me excuse—así que me fui, lejos de
Coruscant, y tuve a Ra, no pensé que te volvería a ver.

—Por más amor que le tuviera a Padmé, tenías que decirme, tengo todo el derecho de ser padre de Ra— baje la mirada—¿El sabe que soy su padre?

Negué—No sabe que eres tú exactamente, pero tiene sueños contigo. De verdad perdoname Anakin—lo mire a los ojos—pensé que lo mejor sería alejarme, y yo...

Fui interrumpida por un abrazo repentino, sus brazos me rodeaban como si fuera una gran necesidad—De verdad te extrañe—susurro en mi oído.

Le devolví el abrazo—Yo también Anakin—dije llorando en sus brazos.