capitulo 5: tijeras y papeles

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Llegué al departamento al mismo tiempo que golpeaba la puerta esperando respuesta de mi primo del cuál sabía me recibiría con los brazos abiertos, salió de repente al mismo tiempo que me miraba dudoso de mis ojos llorosos y con lágrimas

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Llegué al departamento al mismo tiempo que golpeaba la puerta esperando respuesta de mi primo del cuál sabía me recibiría con los brazos abiertos, salió de repente al mismo tiempo que me miraba dudoso de mis ojos llorosos y con lágrimas. Me sentía fatal así que solo lo abrace al mismo tiempo que entraba.

Así pasaron unas horas y recostado sobre el sofá de la sala solo mirando al techo llegó un mensaje, era de Lía y al mismo tiempo que lo leía lloraba aún más.

─Sé que lo nuestro fue algo especial sobre todo aquella conexión la cual se sintió como una chispa de amor verdadero en mi pecho. Te amo. Pero lo que en algún momento comenzamos deberá llegar a su fin, fuiste la primera persona que me hizo sentir cosas maravillosas, aquella persona que con su alegría me daba felicidad al corazón. Por siempre serás mi amor prohibido─ en mi corazón una tijera atravesaba mi pecho como si fuera de papel

Conoces esa sensación en el pecho de cuando la persona que amas se vuelve inalcanzable para ti, de cuando sabes que esas emociones que en algún momento tuviste no volverán hacer latir tu corazón, las lágrimas corrían sobre mis mejillas haciendo sollozos y bullas al mismo tiempo que sonaba en la tele aquella canción la cual hacía aún más sentir aquel dolor en mi pobre corazón.

Tal vez era mi destino, pero no lo quería para mí era demasiado dolor en una persona de la cual las heridas anteriores estaban aún presentes

Esa noche no dormí llore, me quedé despierto ahí viendo mi futuro sin un amor miles de sueños pasaron frente a mi entre ellos uno de miles del cual solo recuerdo hablarme de un amor verdadero al lado de Lía ese amor que aún existía en mí, porque un corazón roto no se sana de la noche a la mañana...

Ese día me levante muy, muy tarde debido al insomnio que me había provocado la situación de la noche anterior no me levante tan fácil del sofá amenos para comer o ir al baño de ahí no pasaba, pues en verdad me sentía muy mal

Se dieron las horas y dormí, dormí toda la tarde de aquel día el cual al menos me hiso descansar hasta la mañana siguiente cuando entro una llamada al móvil, la cual por su puesto no respondí sabía que era alguien tratando de preguntar por mí en especial como estaba o algo me imaginé, y así fue la llamada perdida era de Ann.

En ese momento solo quería tiempo para mí. Es complicado el no saber cómo sanar un corazón roto al menos cuando sabes que lo diste todo por esa persona, todo en el sentido de hacer sentir a esa persona cosa las cuales nunca nadie ha hecho por ti, como emociones palabras caricias y sueños rotos aquejaron mi corazón en esas pocas horas. Después de todo el amor duele y mucho.

En algún momento me iría de aquí y tal vez no vuelva o quizá pasen años para regresar, pero sé que en mi futuro yo no quiero volver a donde alguien me destrozo o a donde hubo emociones las cuales sabes nunca volverán y dejan a tu alma en un abismo de tristeza he infelicidad, no me queda más que aguantarme este dolor que de cierta manera ya es parte de mí.

Esos son los pensamientos de un Félix consiente de su cruda realidad la cual era inevitable, por lo cual dormir era mi salida una salida de sueños y una realidad donde nada ni nadie me hace daño y esos recuerdos dolorosos se van de mí, de mi mente durmiendo yo fui feliz.

Pues a diferencia de otros sueños, los sueños de amor habían sido cortador con el golpe de el filo de unas tijeras la cuales hacen pedacitos mi corazón como si fuera de papel, así de frágil y delgado que con algún movimiento brusco puede romperse o arrugarse, arrugas la cuales jamás regresan a ser lo que en algún momento fueron

Al final de todo yo sí creo que existe el amor como las películas, solo que nadie va a ir a buscarte a la torre más alta y nadie ira a buscarte por el zapato que casualmente dejaste tirado, y yo sí creo que cada quien le da un toque original al amor. no como las películas, sino como tu película.

mi vida era diferente a la de los demás, cuando ellos están en un romance adolecente yo estoy sufriendo por no ser capaz de entenderme a mí mismo.

mis pensamientos se apoderaron de mi dejando pasar la hora y la tarde se había ido tan rápido que olvide por completo que debía volver ese día en la mañana con Angie, las llamadas llegaron una tras otra y sabía que estría preocupada por mí, pues no sabía siquiera que había sucedido o al menos no se lo imaginaba, hasta cierto punto la noche del parque debí escuchar una conversación entre los padres de Lía y ella diciendo que se notó la manera en la que rápidamente socializamos uno con el otro en especial porque ella era aún más tímida de lo normal, siempre tan callada y fría pero conmigo era diferente, era única.

Le pedí a Sam me llevara de vuelta a casa de Angie pues estaba preocupada por mi

arrancamos hacia la casa y en el camino observe a través de la ventana el parque que lo inicio todo, la banca donde estuvimos aquel primero de enero el lugar donde fue nuestro primer beso abrazo y demás cosas de la cuales me tenía que olvidar pues no fuimos ni volveremos a ser, simplemente dos extraños los cuales chocaron por obra del destino aun sabiendo que no serían felices juntos y estaba bien pues eso era lo mejor. Y así como otras veces un sueño más se vio perdido.

Ya no me importaba ahora me enfocaría en mí, en mis pensamientos en mis emociones simplemente seria yo, un joven de dieciséis años en una vida de la cual tenía que hacer frente solo sin nadie a su alrededor porque todos tenemos una vida propia y nadie detendrá la suya para venir a ayudarte a ti pues es el saber cómo enfrentar la situación con el pensamiento y el corazón. 

corazones de papelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora