Cap 13

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Narradora:

Ya habían salido por fin del hospital

Llevaron al pequeño por un juguete, se lo había ganado. Para que las pequeñas no se quejaran, les compraron chocolates

Llegaron a su hogar, abrieron la puerta y de inmediato se les abalanzaron a los tres las dos pequeñas llorando

Dahlia: ¡Mamá, papá, Silver!

María: ¡¿Etan bien?!

Amy: Calma, calma ¿Qué pasó?

Dahlia: En la tele vimos las noticias y de qué papá salió lastimado

La rosada inhaló profundo

Amy: ¡AIRON!

El dicho apareció

Airon: Ya volviste hermanita - la abrazo - ¿Qué pasó?

Amy: ¡¿Porque mis hijas saben lo de la tele?!

Airon: Sin querer lo vieron

Amy: Sin querer vas ha tener un golpe en la cara

Dahlia: Mami, pero ¿Están bien?

Amy: Si

Silver: Fue horrible ayer, había mucho fuego, humo, casi me caigo, papá me atrapó, casi nos aplasta un techo

Amy: Repite lo de caerte

Shadow: Luego te explicamos los dos

María: Que peo pot Silver

Amy: ¿Cómo te sientes María?

María: Etelente

Shadow: Que bueno

Dahlia: Pero tenía una pila interminable ayer

Amy: Lo bueno es que ya terminó, así que ¿Qué quieren hacer?

Silver: Correr y jugar

Shadow: No puedes, recuerda que el doctor dijo que nada de hacer ejercicio durante unos días

Silver: Entonces jugar

Dahlia: Juguemos un juego de mesa

Amy: Bueno

Fueron al comedor y jugaron muchos tipos de juegos, aunque ayudaron a la más pequeña, ya que no le estaba entendiendo a los juegos

A la rosada se le había olvidado llamar a los de su trabajo, así que ellos la llamaron, les dijo que mañana iba y les pagaba más por ese día, aunque ellos entendían su situación por lo que repetidas veces le dijeron que no, pero con lo terca que es la rosada, a la mera hora se aguantaron

Ya había anochecido para dentro de poco

La rosada y el azabache durmieron a los pequeños, ya que el albino si iba ir que la escuela al día siguiente, aparte de que ya tenían sueño todos

La rosada y el azabache fueron a su habitación, pero ella veía al azabache muy incómodo

Amy: ¿Estás bien?

Shadow: Si, solo que el vendaje ya me lastima

Amy: Déjame ver la herida

El azabache asintió

La rosada le fue quitando el vendaje poco a poco, para no lastimarlo. Cuando se lo quitó vio la quemadura mejor, ya estaba casi curada, pero abarcaba gran parte de su espalda

Amy: Sabías que te ibas a regenerar verdad, por eso te expusiste a la explosión para proteger a Silver

Shadow: Es mi hijo también Rose, con gusto daría mi vida por ellos

Juntos para siempre y por siempre (Shadamy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora