Volvemos. 《《SMUT》》

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Malfoy había estado unos dos días en la enfermería, Dumbledore fue a verlo y como castigo fue enviado al Bosque Prohibido con Hagrid, sumándole a eso que le restaron 50 puntos a Slytherin.  Aunque el del otro chico fue algo peor. Ya que como claramente dejo muy lastimado al rubio, fue suspendido una semana, restándole los mismos puntos a Hufflepuff.  Sin embargo, Draco pensaba que valió la pena, al menos defendió a su pareja, y claro que estaba dispuesto a hacerlo de nuevo si alguien se le enfrentaba.

Cuando por fin pudo salir de ahí, Harry lo estaba esperando fuera, así que cuando se vieron no se soltaron del fuerte abrazo y la cantidad de besos que se dieron. Cabe aclarar que esos días si se habían visto, prácticamente, Albus dejó que Potter se quede más horas de la que se podían. Él había entendido la dulce relación que llevaban y no se iba a interponer. 

Ambos se fueron al cuarto del más alto, estaban acostados, procurando que nadie entre. Al siguiente día iban a cumplir otro mes más juntos, estaban más que felices y sabían que en aproximadamente 2 meses más iban a volver a su hogar e iban a tener que decirles a sus padres. No tenían miedo, pero si estaban nerviosos. Aunque preferían disfrutar el ahora.

La mañana siguiente llegó muy rápido. La pareja había dormido junta, aunque para la sorpresa del rubio, cuando despertó, su novio no estaba, se levantó algo asustado, saliendo rápido de la habitación, para encontrarse con el de lentes con un regalo en su mano, casi por entrar.

-Mi amor, me asustaste..- Le habló algo desesperado, mirando lo que tenía en la mano. Para luego abrazarlo fuerte.- Felices 6 meses, lindo.. No sabes lo que te amo..

-Feliz mes, Dray, te amo tanto.. Tengo tanto que agradecerte..- Susurraba, mientras se besaban con calma. Aunque fue interrumpido por pequeñas lágrimas que caían de sus ojos.

-Hey, ¿Por qué lloras, mi vida?..- Sé separo Maalfoy, para acariciarle el rostro con ternura.

-Es que.. No puedo creer que estemos cumpliendo otro mes.. Realmente nunca imagine esto o tal vez si, pero.. Se siente irreal... Y te amo.. Y no sé si te lo demuestre, pero quiero hacerlo siempre...- Murmuraba entre pequeños sollozos, causándole más amor al otro.

-Harry... Estos seis meses fueron lo mejor de mi vida.. Desde que te conocí he sido más que feliz... Y gracias a ti se lo que es amar..- Terminó su frase con un amoroso beso, para luego ver el regalo de su novio, el cual era un cuadro con una foto de ellos en el patio.- Es hermosa esta foto, bebé.. Todavía falta mi regalo.- Sonrió coqueto.

-Ay, Draco...-Sé sonrojo sintiendo las manos del contrario en su cintura.- Será luego de la clase de pociones, Snape quiere que estemos a horario. Apúrate.- Le dejo un beso, para luego ambos cambiarse y tomar camino al lugar.

Gracias a Hermione, Severus se había enterado de que era el aniversario de la pareja de su clase, así que, nada mejor que dar la clase de Amortentia.

La pareja después de ser felicitada por algunos, incluyendo el adulto a cargo de la clase. Fueron separados según su casa, para comenzar con la preparación. Luego de un rato, Malfoy habló o más bien, casi grito.

-Que olor tan fuerte.. Harry, ¿Es tu perfume?..- Miro confundido, mientras algunos reían. No sabían que realmente la poción dejaba oler el aroma de quien amabas o sentías atracción. Por otro lado, Potter, al terminar, miró a su alrededor. 

-Hay olor a.. ¿Manzana?.- Le mencionó a Mione.

-Vaya, los enamorados están conectados.- Respondió logrando que escuche toda la clase, haciendo que su amigo se sonroje.

Al finalizar, todos quedaron libres, aunque el pelinegro solo tenía unas horas, ya que luego tenía que entrenar, debido a que había comenzado a practicar Quidditch. Pero su tiempo libre fue robado por su amado.

Se terminaron yendo a la Torre de astronomía. Estaban sentados en el sofá de siempre, mientras se besaban y repartían caricias. Al estar solos, debido a que la mayoría estaba en clases, la situación se fue poniendo un poco más caliente.

De un momento a otro cambiaron sus posiciones. Malfoy medio recostado y Potter sobre sus piernas. Se besaban con  deseo. Cabe aclarar que no era la primera vez que hacían ese tipo de cosas en ese lugar, pero ese día lo sentían especial. Los besos fueron bajando hasta el cuello del pelinegro, dejándole varias marcas y sacandole jadeos sonoros.

La ropa terminó siendo sacada de a poco, entre toqueteo y toqueteo. El alto quiso tomar el mando del momento, pero no fue así, terminaron quedando en la posición que estaban, así que luego de un húmedo beso, el rubio metió dos de sus dedos a la boca de su novio. 

-No te imaginas lo sexy que te ves..- Murmuró, observándolo fijamente. Una vez que la saliba de su novio resbalaba por su mano, decidió sacarlos, llevándolos a su entrada.

-A-Amor...- Gimió por lo bajo, al sentir los largos dedos de su novio.

La preparación casi siempre era rápida, así que luego de unos segundos, con ayuda del rubio, quien le sostenía la cintura al de menor estatura, pudo entrar en él. 

Los saltos que daba Harry saciaban a ambos. Eran seguidos y fuertes, haciendo que el choque de sus piel resuene por el lugar. Fuera de eso, los besos eran lo único que callaban a Potter, aunque verdaderamente, Malfoy amaba escucharlo. Así mismo, le dejaba marcas en su cintura con sus dedos, demostrándole que le pertenece.

-D-Draco...- Murmuraba entre gemidos, sintiendo como su clímax se aproximaba, besando desesperado a su pareja.

-Tan mío, mi amor.. Solo mio..- Le Susurró con voz gruesa, levantándolo de la cintura más rápido para que no se canse tanto con los saltitos. Eso fue todo lo que necesitaban ambos para venirse. El líquido caliente del rubio terminó resbalnado por los muslos de su novio, mientras que él abdomen de los dos quedó manchado por el otro líquido del pelinegro.

Agradecían a Merlín que nadie había entrado al lugar, hubiera sido más que vergonzoso.  Pero sin importar eso, al terminar, se pusieron su ropa, se quedaron unos minutos más besándose, hasta que llegó la hora del entrenamiento de Harry. Su caminar malo debido a la situación anterior era bastante notoria, pero era tan normal, que lo daban de menos.

En un abrir y cerrar de ojos, estaban en el tren de regreso a casa. Ambos estaba felices, por fin iban a ver a sus padres y contarles todo. No fue tan eterno, sino que el tiempo se les fue rápido entre beso y beso.

Pocas horas y ya están en la estación. Bajaron de la mano, buscando a su familia, la cual estaba junta esperándolos.

-Chicos, al fin regrasaron, ¿Cómo han estado?.- Preguntaron casi al unísono las madres, acercándose cada una a su hijo.

-Más que bien.. ¿Verdad, amor?.- Respondió Draco luego de saludar a su madre.

-¿Amor? ¿De que nos perdimos?.- Preguntó Lucius, claramente sabiendo los cuatro adultos de la situación.

-Oh, cierto.. Hace exactamente.. 8 meses soy novio de Harry.- Sonrió orgulloso el rubio, abrazando a su pareja.

-Ya lo sabíamos, niños. Snape nos aviso desde el primer momento.- Mencionó James y rieron con ternura.- Estamos muy orgullosos de ustedes y nos alegra verlos felices.

Dicho eso, las dos familias se fueron al hogar Malfoy para tener una cena de bienvenida. Finalmente vivían una armonía perfecta. Todo estaba más que bien y no podrían ni querían cambiar algo. Se amaban y se notaba.

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Wow, fue el más largo. Realmente me siento rara escribiendo específicamente el Smut, pero trato de que sea relativamente sutil y dulce. Si les gusta, me alegra. Se vienen más cosas. Liv.

Destinado A Ti. 《《《Drarry》》》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora