C08 ❥ Sean amigos

406 73 11
                                    

⌜Hyunjin⌟



No me canso de admitir que me encanta demasiado tener una "enemistad" con Lee Minho porque siempre encuentro la manera de divertirme a costa suya. Y tengo la certeza de que él también está bastante cómodo con las constantes discusiones sin sentido que tenemos todo el jodido tiempo. Y es que, de lo contrario, ¿no me hubiera enviado directamente a la mierda sin retorno?

Sonreí para mis adentros cuando sentí la mirada de Lee. Al parecer, ya se ha percatado de que estoy haciendo uso de su camisa, así que tengo la certeza de que iniciará una disputa conmigo para tenerla de regreso pues es seguro que vaya a quemarla tan pronto se la entregue porque no creo que la vuelva a usar.

—¿Qué mierda quieres, Lee? — le pregunté en voz baja para evitar atraer la atención del resto de los presentes que se encuentran fascinados con la belleza de Momo que es tan difícil de ignorar.

Considero que siempre es un buen momento para discutir con Lee Minho... Aunque, siempre es un "buen momento", ¿no?

—No debiste de haber tomado mi camisa porque eres tan poca cosa como para siquiera tocarla— soltó con auténtico desprecio. —Tienes prohibido volver a abrir mi casillero, ¿entendido?

—Puedo hacer lo que yo quiera— dije con superioridad.

—Vete a la mierda, Hwang.

—Lee, te devolveré la camisa... después de usarla para limpiarme la cola.

Minho chasqueó la lengua.

—Hwang Hyunjin, ¿tanto me deseas que hasta quieres tener una prenda mía en tu poder para masturbarte?

—Bastardo...

Todos los presentes dirigieron sus miradas hacia nosotros y me sentí un completo estúpido por no poder evitado caer ante el perverso juego de Lee Minho.

Siempre he demostrado que soy un chico amable y educado, sin embargo, el imbécil del peligris me orilla a mostrar mi verdadera identidad y sin poder evitarlo, caigo directamente en su red.

—Chicos, ¿podrían salir de aquí para darle solución a su problema? — nos preguntó Momo con tono serio. —¡Salgan de aquí ahora mismo!

Sin pensarlo dos veces, tomamos nuestras pertenencias y salimos de la sala de juntas, no sin antes disculparnos con los presentes.

—¡¿Ya viste lo que hiciste, imbécil?!

Lee frunció el ceño.

—¿Lo que hice yo? ¡Tu iniciaste con la discusión!

—Por supuesto que no.

—No voy a discutir contigo por una tontería— dijo antes de darse la vuelta para emprender su camino hacia la puerta del edificio, por lo que lo tomé del hombro y evité que huyera.

—¡Pídeme perdón! — le exigí.

Minho bufó.

—¿Por qué debería pedirte perdón? — me preguntó tras girarse hacia a mí.

—Sabes muy bien de lo que estoy hablando.

—No hablo idioma caca, así que no entiendo nada de lo que dices.

Le di un puñetazo en el rostro y eso lo tomó por sorpresa a causa de que fui demasiado rápido con mi movimiento.

—Como no hablas idioma caca, entonces tendré que hacer uso de mis puños para que entiendas.

Minho se limpió la sangre de su labio inferior y sonrió de lado.

—¿Eso es todo lo que tienes, bastardo de mierda? — me preguntó Minho con tono burlón.

Esta vez, he sido yo el que fue tomado por sorpresa pues no me dio tiempo de reaccionar, así que su puño terminó en mi nariz.

Es un jodido hijo de perra.

Nunca había tenido tantos problemas con una persona... Hasta que apareció Lee Minho en mi vida.

—Te vas a arrepentir...

—¿Qué me puede hacer un idiota como tú?

Sonreí de lado.  —¿Todavía tienes el descaro de preguntarlo?

Elevé mi puño, dispuesto a golpear a Minho, pero un guardia se interpuso entre nosotros.

—Será mejor que me acompañen a la dirección— sentenció con tono serio antes de escoltarnos hacia la dirección.









「 ♥️ 」








—Chicos, dense la mano y pídanse perdón— nos ordenó el director después de escuchar la versión de los hechos por ambas partes.

De mala gana, me giré hacia Minho y extendí mi mano hacia él. El peligris rodó los ojos antes de estrechar mi mano y entonces ambos dijimos "lo siento".

—Sean amigos, ¿de acuerdo?

Eso era lo que quería yo, pero Minho no cooperó.

𝙎𝙚𝙘𝙧𝙚𝙩 𝙇𝙤𝙫𝙚 🦋 𝙝𝙮𝙪𝙣𝙝𝙤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora