Dragon Ball Fic

11. El pacto

Vegeta se lanza al ataque, con determinación. Un puño está a punto de alcanzar a Hyok en la cara, pero éste agarra la mano a tiempo y, sin soltarla, comienza a golpearle en el estómago una y otra vez. Vegeta le agarra la mano y ejecuta una llave, girando, con la intención de lanzar a Hyok, pero éste gira a su vez y es Vegeta quien sale volando. Hyok le persigue por los aires y le ataca con una patada. La espalda de Vegeta choca contra la pared; éste aprieta los dientes, con los ojos cerrados. Los abre y contempla a Hyok, que viene a su encuentro velozmente. Vegeta aparta la cabeza y un puño se hunde en el muro. El Saiyan aprovecha y descarga un cabezazo. Hyok encaja el golpe y después ríe, antes de empezar una serie de feroces cabezazos contra la frente de Vegeta. Hyok se aparta y Vegeta cae al suelo de rodillas, con la frente sangrando. Tras unos instantes, el guerrero vuelve a levantarse.

VEGETA: Eres fuerte... pero no pienso perder.

Vegeta concentra su ki, con un estallido dorado.

HYOK: (Sonriendo) Eso no bastará, Saiyan.

Vegeta sonríe a su vez y se lanza al ataque.

Mientras tanto...

PAN: (Agarrando el huevo aún cerrado) Tengo que marcharme de aquí... pero me llevaré esto conmigo. (Pan se imagina un huevo frito gigante) Será una comida excelente.

Los polluelos siguen acercándose, hambrientos. La niña salta al nido de enfrente, también plagado de polluelos. Así, la joven Saiyan salta de nido en nido, evitando los picotazos de los polluelos y las alas de los grandes pterodáctilos.

PAN: Tú y yo nos marchamos de aquí, huevo frito gigante. Vas a ocupar un lugar muy especial en mi estómago, jeje.

La niña echa a volar, sujetando el huevo. Finalmente, Pan llega a un tranquilo descampado y coloca el huevo en el suelo.

PAN: (Relamiendose) Genial. Ahora haré un fuego con mi ki y te freiré bien frito. ¡Serás el mejor huevo frito que haya comido
nunca, seguro!

La joven se gira y se dispone a crear un fuego, cuando de pronto el huevo comienza a resquebrajarse.

En el palacio de Dende, Goku, Gohan, Trunks, Goten y Bu se disponen nuevamente a entrar a la Cámara del Tiempo.

DENDE: Sí, podeis entrar de nuevo... pero me vais a volver loco con tanto entrar y salir.

GOKU: (Le pone la mano en el hombro) No te preocupes, Dende, algún día Dios te lo pagará (Aparta el brazo y entra en la Cámara del Tiempo junto a los demás.

DENDE: (Tiene los ojos cerrados y una gran gota en la frente) Pero... si Dios soy yo...

Dentro de la Cámara del Tiempo...

GOKU: Bueno, Gohan, diría que tenemos una pelea pendiente (Se transforma en Súper Saiyan 3)

GOHAN: (Concentra su ki) Podría decirse que sí, padre.

Goten y Trunks se fusionan.

GOTENKS: Tú y yo también tenemos una pelea pendiente, gran bola de sebo rosa (Se transforma en Súper Saiyan 3)

BU: ¿Bola de sebo? ¡Bu acabar contigo!

Los cuatro contrincantes se lanzan al ataque.

Muy lejos de allí, Vegeta ataca frenéticamente mientras Hyok esquiva un golpe tras otro con facilidad. Finalmente, el Saiyan recibe una patada en el estómago y otra en el cuello que le hace salir volando. Vegeta derrapa apoyando una mano en el suelo y se frena; después vuelve a la carga. Hyok le esquiva nuevamente y le lanza despedido de un puñetazo.

HYOK: Ya me estás cansando, Saiyan. Acabaré con esto.

Vegeta ataca de nuevo y Hyok le agarra por el cuello, le lanza por los aires y después guiña un ojo. Una explosión impacta en su cuerpo, haciéndole caer al suelo con las ropas destruidas y echando humo. Momentos más tarde, Vegeta se levanta con dificultad y junta las manos.

VEGETA: Esto ya ha ido demasiado lejos. ¡DESTELLO FINAL!

Una descarga de ki surge de sus manos en dirección a Hyok quien, tras sonreír, extiende la palma de la mano hacia delante y frena la onda. De pronto, el rayo desaparece en su mano, dejando tras de sí tan sólo un rastro de humo. Vegeta se queda boquiabierto.

HYOK: ¡Jajaja! ¡No está mal, Saiyan! ¡Después de todo me he divertido un poco! ¡Eres el ser más fuerte que ha pisado esta nave... a parte de mí, por supuesto!

Vegeta aprieta los dientes y gruñe con ira.

HYOK: ¡Creo que al final voy a dejarte vivir! (Se queda pensativo) ¡Ya sé, te encerraré en una gran celda donde puedas entrenar y pelearé contigo cuando me aburra!

VEGETA: ¡¿Cómo dices?! ¡Ni sueñes con eso!

HYOK: (Poniéndose serio) Antes, cuando hablé de exterminar a aquel Súper Saiyan, dio la impresión de afectarte mucho.
Bien, si no haces lo que te digo, lo exterminaré sin más.

VEGETA: ¡MALDITO!

El Saiyan levanta el puño y se abalanza contra Hyok, pero finalmente se contiene, apretando los dientes.

HYOK: ¿A qué viene esa actitud? Estoy siendo muy considerado al mantener con vida y alimentar a alguien que ya no me sirve de nada. Eso es dinero que sale de mi bolsillo.

VEGETA: (Con la cabeza gacha) De acuerdo... haré lo que dices... (Levanta la cabeza, airado) ¡Pero si le haces algo a Turble
yo mismo me quitaré la vida y tendrás que buscarte otro entretenimiento!

HYOK: (Ríe) Me parece justo... pero si no das lo mejor de ti en los combates y terminas por aburrirme acabaré con ese tal Turble sin ningún miramiento... y entonces más te valdrá suicidarte, porque si no seré yo quien te mate y, ya que no habrás conseguido divertirme peleando, me aseguraré de hacerlo de la forma más cruel y sanguinaria posible, de forma que sirvas para entretenerme por lo menos al final de tu vida.

VEGETA: (Sonriendo) Estamos de acuerdo.