「 ✦ Sus ojos ✦ 」- WINRINA (aespa)

❥ Manipulación

19 septiembre, 7:48 a.m.

Otro nuevo día de colegio comienza y muchos alumnos del instituto más prestigioso de Seúl hablan por los pasillos.

Aeri está buscando el libro que necesita en su desordenada taquilla, mientras que Ningning y Min-jeong hablan, esperando a que ésta lo encuentre.

– Date prisa Gigi – A Ningning le gustaba llamarle por ese apodo.

– ¡Ya voy! ¡No me presiones! – Ningning suspiró, su amiga no tenía remedio.

Min-jeong simplemente escuchaba la discusión, pero otra cosa captó toda su atención. Yoo Ji-min acababa de pasar por su lado, junto con su grupo de amigos.

La mejor amiga de Yoo Ji-min, Duri, también parecía necesitar algo de su taquilla, así que sus tres amigos se apoyaron en la pared mientras esperaban a que terminase.

Min-jeong no podía parar de pensar en la larga conversación que había tenido con Yoo Ji-min la noche anterior. Se había dado cuenta de que la pelinegra no era tan mala persona, e incluso podían ser amigas, por lo que decidió acercarse y saludarla.

– ¡Buenos días Ji-min! – recibió miradas de confusión por parte de los amigos de la pelinegra.

– Jimin, ¿por qué te saluda? – preguntó la pelirroja, Duri, mientras cerraba su taquilla.

Yoo Ji-min empezó a temblar, no sabía qué decir.

– No lo sé, se creerá que soy su amiga o algo por el estilo. – se arrepintió al instante de decir eso.

– ¿Quieres que le demos una lección? – intervino uno de los amigos.

– ¿Qué? ¡No! – ahora las miradas de confusión iban hacia ella – Digo, em-... Id yendo a clase, yo ahora os alcanzo, yo tendré unas palabras con ella.

– Si tú lo dices – dijo el otro chico, mientras los tres se dirigían a su clase.

En cuanto estuvieron lo más lejos posible, Yoo Ji-min estalló.

– ¿¡Se puede saber qué haces!?

– ¿¡Que qué hago!? Pues saludar a mi… ¿amiga? Sí, amiga.

– ¿En qué momento soy tu amiga?

– Entonces lo de ayer, ¿qué fue?
– Entiéndelo, solo necesitaba distraerme un poco, y tú también. Si me ven contigo, pensarán que soy…

– ¿Que eres qué? ¿Una rara? ¿Dejas que te controlen tanto?

Yoo Ji-min permaneció en silencio. Los ojos de Min-jeong mostraban enfado.

– Que ingenua he sido pensando que eras diferente, solo te importa la popularidad. – Min-jeong se dió la vuelta y se fue furiosa.

Yoo Ji-min se quedó ahí, parada. “Soy imbécil”, “¿Qué digo? Es una pringada, no me merece”, “Pero… disfruté pasar tiempo con ella”. Esos pensamientos rondaban por su mente, pero decidió ignorarlos e irse a clase.

Durante el descanso, sus amigos le preguntaron por Min-jeong, ella simplemente dijo que la había amenazado.

– ¡Muy bien Jimin! Pensaba que me ibas a remplazar… – los ojos de Duri empezaron a ponerse llorosos.

– Claro que no… No te preocupes – respondió, no muy segura de lo que decía, mientras le daba palmadas en la espalda a su amiga. Este comportamiento desconcertó a Duri, pero no le dió mucha importancia.

Las clases terminaron y todos volvieron a sus casas. Por la tarde, Yoo Ji-min escribió a Min-jeong, para pedirle que se preparasen la exposición juntas, pero no hubo respuesta, así que se preparó su parte por sí misma.