🖇️06🖇️

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Más tarde, Hyun Joong decidió "abandonar" la búsqueda ajena. Además, tenía miedo de la reacción de Young Saeng al enterarse que su amada ya no estaba más en este mundo.

—Hasta aquí llegaré, ya no puedo seguir… Sería extraño e incómodo para ti—dijo Hyun.

Suspiró triste —Bien, aprecio que hayas llegado tan lejos conmigo.

—¿Por qué no quitas ese rostro deprimido?

—Hyun Joong, ¿Podrás regresar solo a tu casa?

—Por supuesto. Hasta l-luego —Hyun se dió la vuelta y caminó dejándolo atrás.

Ambos se dirigieron a direcciones contrarias, además detuvieron su paso para mirarse una vez más a lo lejos.

—Ya no lo mires… —se dijo Hyun.


Saeng no pudo evitarlo, regresó por él.

—¡No puedo hacerlo solo!, Por favor Hyun Joong… acompáñame —suplicó triste.

—¿Acompañarte?

—Si, por favor. Te lo suplico, Hyun Joong… ayúdame a terminar esta búsqueda.

No pudo negarse, así que lo acompañó. Ambos fueron en busca de la casa de Sun Hye.

Luego de treinta minutos, ya estaban delante de ese lugar. Una casa amarilla de dos pisos, con un pequeño jardín y un caminito de piedras.

Al instante, Young Saeng cayó de rodillas al suelo, su mente trajo el recuerdo del accidente que había sido olvidado por la amnesia.

Todo había sido con mucha claridad.




—Por favor, no se resista a salir —pidió el paramédico —Debemos sacar cuando antes a los que quedaron con vida.

Saeng seguía aferrado a la mano de Sun Hye —¡Por favor, no me separen de ella! —gritó llorando.

Ambos estaban totalmente bañados en sangre.

—¡Sun Hye!, ¡Mi querida Sun Hye, abre los ojos! —gritó una vez más —¡Vámonos de este horrible lugar!

Luego de muchos intentos, lograron sacar a Young Saeng de aquellas ruinas del autobús. En cuanto fue subido a la camilla, se desvaneció… Pero aún estaba consciente de los ruidos del ambiente.

—¡Está perdiendo mucha sangre!, Viene de la cabeza —afirmó el médico—Debemos llegar cuánto antes al hospital. ¡Si no es tratado a tiempo, podría empeorar!







En el suelo, comenzó a llorar desconsoladamente.

—¿Por qué?, ¿Por qué me dejaste así, Sun Hye? —se preguntó.

Hyun Joong comenzó a llorar ligeramente.

—Que tanto dolor tienes… —susurró y se agachó junto a él para abrazarlo —no sufras más, ni la hagas sufrir. Dejala ir.

—¡No!, ¡No!, ¡No! —gritó —No quiero, me niego a aceptarlo. ¡Sun Hye!, ¿¡Dónde estás Sun Hye!?

Saeng estaba totalmente perdido en el llanto, la realidad que fue ocultada por su condición había sido descubierta. Sun Hye no lo abandonó, Sun Hye se marchó para cuidarlo desde otro lugar.

«Creo que no debí dejarlo, tal vez debí decirle lo que Kyu Jong me contó… Pero, ¿Él me creería?, Seguramente no. Ahora estoy llorando a su lado, compartiendo ese irritante dolor del corazón»

Hyun lo abrazó fuertemente, Saeng se acurrucó en esos brazos cálidos que le ofrecieron ayuda sincera.

Era la primera vez que lloraba por el dolor ajeno, la vulnerabilidad e inocencia de Young Saeng le causan tanto dolor. Ni siquiera podía imaginar cuánto tuvo que haber sufrido en el accidente y mucho menos ahora.

—¡Quiero verte una vez más! —exclamó Young Saeng —Solo una vez… perdóname Sun Hye, no pude protegerte.



Después de un largo momento de tristeza y dolor, ambos caminaron lentamente bajo la luz de la luna.

Hyun Joong tomó su mano y la apretó con fuerza —No voy a soltarte hasta que estés tranquilo. No sé cómo aliviar tu dolor, pero voy a acompañarte.

—G-gracias, Hyun Joong. ¿Sabes?, Creo que llorar de esa manera me causó tanta hambre.

—¿Quieres comer algo?

Asintió —Pero, yo te invitaré. Regresemos.

Alcanzaron el tren para volver. El camino sería un poco tardado.

Definitivamente el día de hoy había sido tan pesado.

Durante el transcurso, Saeng pudo dormir un poco… Hyun Joong lo observó dormir. Ahora parecía estar más tranquilo y aliviado, en un descuido Saeng cayó sobre el hombro de Hyun.

No sabía si hacerse a un lado o dejarlo.

—Creo que como compensación dejaré que te apoyes en mi hombro —susurró. Sonrió, cerró los ojos y recargó su cabeza sobre la de Saeng.









Luego de una hora y media, ya estaban de vuelta a Seúl. Saeng llevó a Hyun Joong a un restaurante que por dentro se veía bastante tradicional.

Delante de la barra, tenía a un hombre que parecía ser el chef. Cuando estaba a punto de rebanar el pescado, Saeng apareció vestido de chef.

—Lo haré yo —aseguró Saeng.

—¿Qué, de verdad ya está mejor?

Asintió. El otro hombre se hizo a un lado y Young Saeng comenzó a rebanar el filete de pescado.

¿Qué estaba pasando?, ¿A eso se dedica el vándalo de libros?

Hyun Joong lo observó, realmente parecía un profesional.

—No querrás que pague todo esto, ¿Verdad? —preguntó Hyun observando los grandes platos de comida deliciosa que le ofreció Saeng.

—No te preocupes —sonrió cálidamente —Solo come. Lo hice para ti.

—Bien —tomó sus palillos y probó un bocado de cada platillo —¡Esto es delicioso!

Otro hombre salió, no era un anciano, pero era mayor que Young Saeng.

—¡Hola! —Hyun inclinó la cabeza —Usted debe ser el propietario.

—No, de hecho… —miró a Saeng —él lo es. Pero mi nombre es Seung Ho.

—Un gusto, soy Hyun Joong —miró a Saeng — Así que no eres un mafioso…

El señor y Saeng se miraron entre sí y comenzaron a reír.

Después de algunos minutos, Hyun Joong terminó de comer. —Gracias por todo esto. Siento que es una línea que determina el final….

—Estoy terminando la búsqueda. Todo fue una ilusión que me llevó a la obsesión. Ella me dejó.








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𝙃𝙀𝘼𝙍𝙏𝘽𝙍𝙀𝘼𝙆 𝙇𝙄𝘽𝙍𝘼𝙍𝙔 - 𝙃𝙔𝙐𝙉𝙎𝘼𝙀𝙉𝙂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora