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Pov – Momo

Cuando menos me di cuenta, me descontrolé y desconocí en toda la fiesta. Para ser honesta, Dahyun se me había hecho demasiado atractiva para lo que acostumbraba; pero tal vez Sana tenía razón, solo necesitaba ese pequeño empujón (alcohol) para acercarme; sin embargo, era 50% consciente que de quien se trataba era nada más y nada menos que mi asesorada

En el momento que nos besamos olvidé por completo las reglas, ignoré el peligro y dejé al lado mi papel de chica correcta y ejemplar. Pero solo quería vivir el momento después de tanto tiempo en mi miserable vida, después de todo, el alcohol tenía el efecto en mí que me hacía olvidar todas unas cuantas horas después, definitivamente no pensé en cómo se sentiría ella.

+18 (Ya hijos del Señor, la espera valió la pena, no me funen)

Ella contemplaba mi cuerpo semidesnudo, se veía hambrienta... Pero lo bueno se hace esperar.

Hice lo que se me dio la gana con su cuerpo, me adueñé de ella por completo.

- Mierda – pensé mientras escuchaba sus gemidos intentando ser ahogados por sus dedos

- -Ah Momo – Joder Momo no te detengas o te juro que te mato – exclamó casi gritando mientras dejaba notar su desesperación

- Quiero tocarte

No contesté, bajé mis bragas dejando expuesta mi intimidad, tomé sus brazos y los levante hasta tocar el colchón por la parte de arriba de su cabeza, mientras que con mi otra mano tocaba suavemente su cuello haciendo un poco de presión; bajé mi mirada a sus pechos mientras saboreaba mentalmente mi nuevo objetivo con deseo, lamí y chupé cada uno de sus pezones con fuerza.

- Tócame, quiero que tu cuerpo que toque, hazme sentir en el paraíso.

Entendí la clara referencia, mi ubiqué en una posición dónde nuestras intimidades se tocarán, mientras empujaba con movimientos lentos pero firmes, gimiendo como si no hubiera un mañana, como si no hubiera nadie más en la segunda planta, como si no fuera mi asesorada y como si no me importara en lo más mínimo.

Me descuidé un segundo para tomar algo de aire, cuando Dahyun se subió encima de mí.

- No te muevas – ordenó

No respondí, cuando ella empezó a succionar mi clítoris con su lengua larga; Dios esa chica tenía – hmm – solté, haciendo así que se excitara más y creara una adicción a escucharme gemir, maldecir y suplicar por más.

- ¡Lista? – preguntó sensualmente

Nuevamente me dejó sin habla cuando introdujo dos de sus dedos en mí, los metía y sacaba, movía para abajo y arriba, mientras que yo agarraba con la poca fuerza que me quedaba el colchón tratando de guardar el mayor silencio posible. Pero eso fue suficiente para soltar mi orgasmo, el cual ella bebía con gusto.

- Eres deliciosa y dulce – exclamó mientras se acomodaba el cabello y nos fundía en un abrazo; recostó su cabeza en mi pecho mientras entrelazaba sus manos con las mías.

- Podría follarte todo el tiempo – dije

- Créeme que acabo de descubrir que yo también

Le di un suave beso en la frente mientras acariciaba sus lacios cabellos y se quedaba dormida, hasta que yo hice lo mismo...

(PERDÓN POR ARRUNIARLES SU MOMENTO HOT CON LO QUE VIENE)

Pov Dahyun-

Me hice la dormida poco después que Momo me diera un cálido beso en la frente, no pasó mucho tiempo para que se quedara dormida. Subí suavemente mi cabeza para toparme con su rostro y admirar sus bellas y largas pestañas rizadas y su brillante cabello negro, me costaba creer que había terminado de follar a Momo y viceversa, y no solo eso, la probé por completo al igual que ella a mí; con mi mano acaricié sus mejillas aún sonrojadas y no pude evitar dibujar una tonta sonrisa en mi rostro.

Por alguna razón sentí que esa chica, esa tal Hirai Momo tenía algo más que solo un bello y sexi cuerpo, me convencí que solo nos habíamos acostado en malas condiciones, no significaba nada, ¡cierto?

No podíamos desarrollar sentimientos entre nosotras y aunque eso pasara sería prácticamente imposible que estuviéramos juntas.

Prefería creer que solo me atraía físicamente y era verdad, no me podía mágicamente enamorar de alguien que recién conozco, no existe tal cosa como el amor a primera vista. Pero si mis teorías eran ciertas, ella era aquella chica del paraguas y la bella dama de quien habló ese chico hace unos días. Pero era imposible, solo la vi un par de veces y de la nada follamos.

Además, ella nunca se enamoraría de mí, ella es la gran prodigio, la chica que todo el mundo quiere, incluso profesores, no se fijaría en una simple cachimba con pésima orientación para ubicarse que ni tenía ganas de asistir a las clases que determinan su futuro.

NUESTRO SECRETO / DAHMODonde viven las historias. Descúbrelo ahora